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viernes, 23 de junio de 2017

DELITO Y DON


                                                                GUÍA DE ORACIÓN 25-06-17

GUÍA: Nuestra oración hoy quiere ser un encuentro con el Padre Dios. Él está ahí.  Un encuentro que nos lleva a una fe más fuerte, que escucha. El delito de la humanidad y el don de Jesús están ante nosotros. El Padre que reconoce a Jesús, Hijo y acoge al Espíritu. Confianza en Dios que nos da la vida, que nos libera del pecado y nos santifica en el amor. Abrimos el corazón y proclamamos su gloria. SILENCIO QUE CREE, QUE ESPERA, QUE AMA.

Del libro de Jeremías (20,10-13):

Dijo Jeremías: «Oía el cuchicheo de la gente: "Pavor en torno; delatadlo, vamos a delatarlo." Mis amigos acechaban mi traspié." A ver si se deja seducir, y lo abatiremos, lo cogeremos y nos vengaremos de él." Pero el Señor está conmigo, como fuerte soldado; mis enemigos tropezarán y no podrán conmigo. Se avergonzarán de su fracaso con sonrojo eterno que no se olvidará. Señor de los ejércitos, que examinas al justo y sondeas lo íntimo del corazón, que yo vea la venganza que tomas de ellos, porque a ti encomendé mi causa. Cantad al Señor, alabad al Señor, que libró la vida del pobre de manos de los impíos.»

GUÍA: El profeta Jeremías es perseguido. Se siente acosado, pero descubre que el Señor está con él. Como fuerte soldado le defiende. A Dios confía su causa. Confía en su defensa de las manos de los impíos. Hoy la fe es perseguida, en ocasiones. Dirijamos a Dios  nuestra oración como lo hizo Jeremías. ¿Te identificas con el profeta en algún momento? SILENCIO DE IDENTIFICACIÓN, DE CONFIANZA Y DE FE.

De la carta del apóstol san Pablo a los Romanos (5,12-15):

Lo mismo que por un hombre entró el pecado en el mundo, y por el pecado la muerte, y así la muerte pasó a todos los hombres, porque todos pecaron. Porque, aunque antes de la Ley había pecado en el mundo, el pecado no se imputaba porque no había Ley. A pesar de eso, la muerte reinó desde Adán hasta Moisés, incluso sobre los que no habían pecado con una transgresión como la de Adán, que era figura del que había de venir, Sin embargo, no hay proporción entre el delito y el don: si por la transgresión de uno murieron todos, mucho más, la gracia otorgada por Dios, el don de la gracia que correspondía a un solo hombre, Jesucristo, sobró para la multitud.

GUÍA: El pecado se propaga como gran fuego. El mal y la huida de Dios avanza por el ser humano. Jesús como Hijo, entra en la humanidad y se hace solidario con el bien. Vence al mal. Su amor y entrega desborda, rebosa sobre todo mal. Unidos a Jesús ¿nos solidarizamos con el bien? Veamos nuestra forma de actuar. ¿Estamos con Jesús o contra Él? SILENCIO DE CERCANÍA, SOLIDARIDAD, DECISIÓN.

Del santo evangelio según san Mateo (10,26-33):

En aquel tiempo, dijo Jesús a sus apóstoles: «No tengáis miedo a los hombres, porque nada hay cubierto que no llegue a descubrirse; nada hay escondido que no llegue a saberse. Lo que os digo de noche decidlo en pleno día, y lo que escuchéis al oído pregonadlo desde la azotea. No tengáis miedo a los que matan el cuerpo, pero no pueden matar el alma. No, temed al que puede destruir con el fuego alma y cuerpo. ¿No se venden un par de gorriones por unos cuartos? Y, sin embargo, ni uno solo cae al suelo sin que lo disponga vuestro Padre. Pues vosotros hasta los cabellos de la cabeza tenéis contados. Por eso, no tengáis miedo; no hay comparación entre vosotros y los gorriones. Si uno se pone de mi parte ante los hombres, yo también me pondré de su parte ante mi Padre del cielo. Y si uno me niega ante los hombres, yo también lo negaré ante mi Padre del cielo.»

GUÍA: No tengáis miedo. Dios está con vosotros. El que cuida de los pájaros, del universo, de la creación, ¿no va a cuidar de vosotros?¿Qué sentimientos producen estas palabras en ti? Háblale de tus cosas. Escucha, cree y confía. Dios te ama. Jesús se fía totalmente de su Padre Dios. Ahí estamos nosotros, un reto. SILENCIO DE CONFIANZA, DE AMOR, DE ENTREGA

RECOGEMOS EL RESUMEN DE LA ORACIÓN.

OFRECEMOS, PEDIMOS, ADORAMOS, CAMINAMOS CON ÉL.

INVOCAMOS A MARÍA madre, maestra, amiga

PADRE NUESTRO CON Jesús, con todos los hombres y mujeres del mundo.

CANTAMOS

CONFIANZA
//El Señor es mi luz y mi salvación a nada yo temeré 
amparo de mi vida es el Señor, a quien debo entregar mi corazón// 

CORO 
//confianza yo tendré mi armadura cargaré si contra mi se levanta una guerra yo venceré // 
oh yo venceré 

El Señor es mi luz y mi salvación a nada yo temeré 
amparo de mi vida es el Señor, a quien debo entregar mi corazón 

CORO 
//confianza yo tendré mi armadura cargaré si contra mi se levanta una guerra yo venceré // 
oh yo venceré 

bajo tus alas yo me esconderé y a tu diestra Jesús siempre yo estaré 

CORO 
//confianza yo tendré mi armadura cargaré si contra mi se levanta una guerra yo venceré // 
oh yo venceré
- FUENTE -
MUSICA.COM