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POESÍA, Querer y no poder
Salvi nos ofrece una
de sus poesías. Hoy la titula “Querer y no poder”. Tiene su belleza y recoge
sentimientos muy propios de cada persona. Desear algo y no conseguirlo es el momento
en que pueden aparecer. Lee y comenta.
QUERER Y NO PODER
¡Qué impotencia,
Jesús mío!
¡Qué terrible
poquedad!:
Cuando intento volar
Caigo de bruces al
vacío!
Este espíritu mío,
Que siempre tiende a
la altura
Y llegar desea con “
prestura”,
Mas, pronto se cae al
río.
¡Qué grande desvarío!
¡Qué torpeza y
necedad
Cuando me dejo llevar
Por tantos deseos
baldíos!
Ni silencio ni
soledad.
Ni tristeza ni
alegría.
¡Nada me impulsa a
llegar
Al fondo de mi agonía!
Salvi
ACCIÓN
¿Qué
tal? Espero que te haya gustado. Has
visto cómo expresa el estado de ánimo en un momento difícil. Haz una oración expresando
algunos sentimientos que te aparecen en momentos en los que acudes a Jesús. Habla
con él. Te saldrá bien.
Poesía "Querer y no poder" de Salvi nos ayuda a reflexionar. ¿Cómo actuamos y sentimos en momentos difíciles? Ponemos nuestros sentimientos ante Jesús y confiamos en su gracia. Haz un ratito de oración con ella y con tus situaciones. Buen día.
ResponderEliminarEl querer y no poder, nos situa muchas veces en nuestra situación de "criaturas" necesitadas de la ayuda del Señor. Constatar nuestra debilidad nos hace más cercanas a la misericordia de Dios, que se complace en los humildes y pequeños, pero con un gran corazón. María Navarro.
ResponderEliminarGracias, Marian. Así es. Agradecemos al Señor su acción en nosotros. Pedimos por todos los que lo necesitan.
Eliminar"Cuando intento volar/ Caigo de bruces al vacío!" Caer y levantarse es fuerza de Dios. Confiamos en él.
ResponderEliminar"Este espíritu mío,/Que siempre tiende a la altura/Y llegar desea con “ prestura”,/Mas, pronto se cae al río." Cuánta vida hacia la altura y también cuántos pasos perdidos. Lo visualizamos en el corazón de cada persona y movidos por el Espíritu Santo.
ResponderEliminar"Querer y no poder" y también con querer y poder. Confiamos en Jesús resucitado y su fuerza de salvación, desde el Padre Dios.
ResponderEliminar"¡Qué torpeza y necedad/Cuando me dejo llevar/Por tantos deseos baldíos!" ¿De qué vale ganar el mundo si pierde la vida? Vemos nuestro interior, nuestra vida y sembramos lo que da frutos de bien y alegría.
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