viernes, 17 de febrero de 2017

GLORÍATE EN EL SEÑOR




ORACIÓN 19-02-17
GUÍA: ¡Gloríate en el Señor! Durante la semana, ¿has visto la gloria Dios, en tus actuaciones? ¿Has visto tu gloria? El Espíritu de Dios se hace presente en este rato de oración. Su presencia coloca las cosas en su sitio. ¿Qué es lo que enaltece tus acciones?
Revisa la semana, ¿Descubres la presencia del Espíritu en alguno de tus momentos? ¿Cuáles? Agradece, recorre nuevos pasos de apertura a Dios y a los hermanos. SILENCIO DE ENCUENTRO, PRESENCIA, AGRADECIMIENTO

Lectura de la primera carta del apóstol san Pablo a los Corintios (3,16-23):

HERMANOS:



¿No sabéis que sois templo de Dios y que el Espíritu de Dios habita en vosotros?
Si alguno destruye el templo de Dios, Dios lo destruirá a él; porque el templo de Dios es santo: y ese templo sois vosotros.
Que nadie se engañe. Si alguno de vosotros se cree sabio en este mundo, que se haga necio para llegar a ser sabio. Porque la sabiduría de este mundo es necedad ante Dios, como está escrito: «Él caza a los sabios en su astucia». Y también:
«El Señor penetra los pensamientos de los sabios y conoce que son vanos».
Así, pues, que nadie se gloríe en los hombres, pues todo es vuestro: Pablo, Apolo, Cefas, el mundo, la vida, la muerte, lo presente, lo futuro. Todo es vuestro, vosotros de Cristo Y Cristo de Dios. 
GUÍA: ¿Qué te dice la lectura? Moisés transmite al pueblo el mandato de Dios: Seréis santos porque yo soy santo…No te vengarás…amarás a tu prójimo como a ti mismo. Señor, aquí estoy escuchando tu Palabra. Que mi corazón la acoja, que la cumpla. Tú eres quien juzga las acciones. Limpia mi corazón y el de todos los hombres y mujeres. SILENCIO DE ESCUCHA, DE ACEPTACIÓN, DE COMPROMISO
Lectura del santo evangelio
EN aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos:
«Habéis oído que se dijo: “Ojo por ojo, diente por diente”. Pero yo os digo: no hagáis frente al que os agravia. Al contrario, si uno te abofetea en la mejilla derecha, preséntale la otra; al que quiera ponerte pleito para quitarte la túnica, dale también el manto; a quien te requiera para caminar una milla, acompáñale dos; a quien te pide, dale, y al que te pide prestado, no lo rehúyas.
Habéis oído que se dijo: “Amarás a tu prójimo y aborrecerás a tu enemigo”.
Pero yo os digo: amad a vuestros enemigos y rezad por los que os persiguen, para que seáis hijos de vuestro Padre celestial, que hace salir su sol sobre malos y buenos, y manda la lluvia a justos e injustos.
Porque, si amáis a los que os aman, ¿qué premio tendréis? ¿No hacen lo mismo también los publicanos? Y, si saludáis solo a vuestros hermanos, ¿qué hacéis de extraordinario? ¿No hacen lo mismo también los gentiles? Por tanto, sed perfectos, como vuestro Padre celestial es perfecto».

GUÍA: Nos hablas del amor incluso a los enemigos. Enséñanos a amar. Que no nos ocupe el deseo de venganza. El Padre es bueno con todos.  Quieres que seamos santos, llenos del amor que derrama en nosotros el Espíritu. Manifiesta tu gloria en nuestros corazones.  Hacemos nuestra esta oración, conviértenos a ti. SILENCIO DE PETICIÓN, CONVERSIÓN, AMOR

SINTETIZAMOS LA ORACIÓN  en varias palabras.

OFRECEMOS, PEDIMOS, DAMOS GRACIAS, ALABAMOS A DIOS

INVOCAMOS A MARÍA que nos enseñe a vivir la fe.

PADRE NUESTRO con toda la humanidad, con los jóvenes  y con Jesùs.

CANTAMOS.

Danos un corazón, grande para amar
Danos un corazón, fuerte para luchar.

- Pueblos nuevos, creadores de la historia
Constructores de nueva humanidad.
Pueblos nuevos, que viven la existencia
como riesgo de un largo caminar.

Pueblos nuevos, luchando en esperanza,
caminantes, sedientos de verdad.
Pueblos nuevos, sin frenos ni cadenas,
pueblos libres que exigen libertad.

Pueblos nuevos, amando sin fronteras,
por encima de razas y lugar.
Pueblos nuevos, al lado de los pobres,
compartiendo con ellos techo y pan.




martes, 14 de febrero de 2017

CARTA DE PAPA FRANCISCO A LOS JÓVENES






CARTA DEL 

PAPA FRANCISCO

A LOS JÓVENES


ANUNCIO de   un



           "Sínodo de los  Obispos,  sobre los jóvenes"                                                                         

 ….En Cracovia, durante la apertura de la última Jornada Mundial de la Juventud, les pregunté varias veces:

 «Las cosas, ¿se pueden cambiar?». Y ustedes exclamaron juntos a gran voz «sí». Esa es una respuesta que nace de un corazón joven que no soporta la injusticia y no puede doblegarse a la cultura del descarte, ni ceder ante la globalización de la indiferencia.

        ¡Escuchen ese grito que viene de lo más íntimo! También cuando adviertan, como el profeta Jeremías, la inexperiencia propia de la joven edad, Dios los estimula a ir donde Él los envía: «No les tengas miedo, que contigo estoy para salvarte» (Jer 1,8).

         Un mundo mejor se construye también gracias a ustedes, que siempre desean cambiar y ser generosos. No tengan miedo de escuchar al Espíritu que les sugiere opciones audaces, no pierdan tiempo cuando la conciencia les pida arriesgar para seguir al Maestro.

        También la Iglesia desea ponerse a la escucha de la voz, de la sensibilidad, de la fe de cada uno; así como también de las dudas y las críticas. Hagan sentir a todos el grito de ustedes, déjenlo resonar en las comunidades y háganlo llegar a los pastores. San Benito recomendaba a los abades consultar también a los jóvenes antes de cada decisión importante, porque «muchas veces el Señor revela al más joven lo que es mejor» (Regla de San Benito III, 3).


 
         Así, también a través del camino de este Sínodo, yo y mis hermanos Obispos queremos contribuir cada vez más a vuestro gozo (cfr. 2 Cor 1,24). Los proteja María de Nazaret, una joven como ustedes a quien Dios ha dirigido su mirada amorosa, para que los tome de la mano y los guíe a la alegría de un ¡heme aquí! pleno y generoso (cfr. Lc 1,38).

         Con paternal afecto,
FRANCISCO


RESPUESTA: Escribe tu carta al Papa. ¿Qué le puedes comentar?



viernes, 10 de febrero de 2017

SABIDURÍA ESCONDIDA





                                                                                                         ORACIÓN 12-02-17

GUÍA: La Liturgia del domingo sigue explicando el mensaje de Jesús. Nosotros le recibimos con corazón abierto. La luz y la sal que nos proponía la otra semana, sigue estando presente en nuestra mente y corazón. ¿Hemos sido luz y sal en medio de nuestro ambiente? En el interior, escuchamos la Palabra de Jesús, la Palabra de la escritura, sabiduría escondida y misteriosa que sala nuestro hacer y pensar. Abrimos el corazón y nos disponemos a orar, a comunicarnos con Dios Padre, Hijo y Espíritu. SILENCIO DE ENCUENTRO, ADORACIÓN, ACCIÓN DE GRACIAS.

Del libro del Eclesiástico (15,16-21):

SI quieres, guardarás los mandamientos y permanecerás fiel a su voluntad. Él te ha puesto delante fuego y agua, extiende tu mano a lo que quieras. Ante los hombres está la vida y la muerte, y a cada uno se le dará lo que prefiera. Porque grande es la sabiduría del Señor, fuerte es su poder y lo ve todo.
Sus ojos miran a los que le temen, y conoce todas las obras del hombre. A nadie obligó a ser impío,
y a nadie dio permiso para pecar.

GUÍA: Dios conoce todas nuestras acciones. Conoce nuestro corazón, Nada se pierde de cuanto hacemos con amor. Si somos fieles a Él somos encauzados hacia el bien y a la verdad. ¿Nos vemos inclinados al bien o buscamos la mentira y el mal? Ante el Señor nos presentamos en la verdad y con deseos de hacer su voluntad. Le pedimos fuerza para seguir adelante por los caminos que Él quiere. SILENCIO DE ATENCIÓN, DE APERTURA, DE VERDAD.

 De la primera carta del apóstol san Pablo a los Corintios (2,6-10):

Hermanos:
Hablamos de sabiduría entre los perfectos; pero una sabiduría que no es de este mundo ni de los príncipes de este mundo, condenados a perecer, sino que enseñamos una sabiduría divina, misteriosa, escondida, predestinada por Dios antes de los siglos para nuestra gloria.
Ninguno de los príncipes de este mundo la ha conocido, pues, si la hubiesen conocido, nunca hubieran crucificado al Señor de la gloria. Sino que, como está escrito: «Ni el ojo vio, ni el oído oyó, ni el hombre puede pensar lo que Dios ha preparado para los que lo aman».
Y Dios nos lo ha revelado por el Espíritu; pues el Espíritu lo sondea todo, incluso lo profundo de Dios.

GUÍA: Ahí, en nuestro interior nos encontramos con la sabiduría de Dios. Una sabiduría que está oculta a los ojos de este mundo. Dios nos cubre con su ser y con su Espíritu. El Espíritu lo sondea todo. Aquí estamos Padre. Que tu luz nos ilumine, que nos fortalezca en la fe y la esperanza, que nos asegure y haga crecer en el amor verdadero. SILENCIO DE PETICIÓN, DE ILUMINACIÓN,  DE GRACIAS, DE OFRENDA..

Del santo evangelio según san Mateo (5,17-37):

En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos:
«No creáis que he venido a abolir la Ley y los Profetas: no he venido a abolir, sino a dar plenitud.
Os digo que antes pasarán el cielo y la tierra que deje de cumplirse hasta la última letra o tilde de la ley.
El que se salte uno solo de los preceptos menos importantes y se lo enseñe así a los hombres será el menos importante en el reino de los cielos.
Pero quien los cumpla y enseñe será grande en el reino de los cielos.
Porque os digo que si vuestra justicia no es mayor que la de los escribas y fariseos, no entraréis en el reino de los cielos.
Habéis oído que se dijo a los antiguos: “No matarás”, y el que mate será reo de juicio.
Pero yo os digo: todo el que se deja llevar de la cólera contra su hermano será procesado. Y si uno llama a su hermano “imbécil”, tendrá que comparecer ante el Sanedrín, y si lo llama “necio”, merece la condena de la “gehenna” del fuego.
Por tanto, si cuando vas a presentar tu ofrenda sobre el altar, te acuerdas allí mismo de que tu hermano tiene quejas contra ti, deja allí tu ofrenda ante el altar y vete primero a reconciliarte con tu hermano, y entonces vuelve a presentar tu ofrenda.
Con el que te pone pleito procura arreglarte enseguida, mientras vais todavía de camino, no sea que te entregue al juez y el juez al alguacil, y te metan en la cárcel. En verdad te digo que no saldrás de allí hasta que hayas pagado el último céntimo.
Habéis oído que se dijo: “No cometerás adulterio”.
Pero yo os digo: todo el que mira a una mujer deseándola, ya ha cometido adulterio con ella en su corazón.
Si tu ojo derecho te induce a pecar, sácatelo y tíralo. Más te vale perder un miembro que ser echado entero en la “gehenna”.
Si tu mano derecha te induce a pecar, córtatela y tírala, porque más te vale perder un miembro que ir a parar entero a la “gehenna”.
Se dijo: “El que repudie a su mujer, que le dé acta de repudio”. Pero yo os digo que si uno repudia a su mujer —no hablo de unión ilegítima— la induce a cometer adulterio, y el que se casa con la repudiada comete adulterio.
También habéis oído que se dijo a los antiguos: “No jurarás en falso” y “Cumplirás tus juramentos al Señor”.
Pero yo os digo que no juréis en absoluto: ni por el cielo, que es el trono de Dios; ni por la tierra, que es estrado de sus pies; ni por Jerusalén, que es la ciudad del Gran Rey. Ni jures por tu cabeza, pues no puedes volver blanco o negro un solo cabello. Que vuestro hablar sea sí, sí, no, no. Lo que pasa de ahí viene del Maligno».

GUÍA: Varios puntos: Enseñar a cumplir la ley, repudiar a su esposa, cólera contra el hermano, hablar en verdad. En cada uno podemos detenernos y valorar nuestro comportamiento. Amar a Dios y al prójimo se nos dice otras veces. El tejido de la convivencia y de las relaciones personales, expresado de distintas maneras. Hablamos con Jesús sobre nuestros comportamientos, y situaciones  referentes a estos puntos. SILENCIO DE COMPRENSIÓN, DE CONOCIMIENTO PERSONAL, DE ACCIÓN PARA EL FUTURO.

SINTETIZAMOS la oración hecha.

PETICIÓN, PERDÓN, ACCIÓN DE GRACIAS, ALABANZA

INVOCAMOS A MARÍA , nuestra Madre

PADRE NUESTRO con Jesús y toda la humanidad.

CANTAMOS


ESTRIBILLO 

Con vosotros está y no lo conocéis 
con vosotros está, su nombre es El Señor.(bis) 

Su nombre es El Señor y pasa hambre 
y clama por la boca del hambriento, 
y muchos que lo ven pasan de largo 
acaso por llegar temprano al templo. 

Su nombre es el Señor y sed soporta 
y está en quien de justicia va sediento, 
y muchos que lo ven pasan de largo, 
a veces ocupados en sus rezos. 

Su nombre es El Señor y está desnudo, 
la ausencia del amor hiela sus huesos, 
y muchos que lo ven pasan de largo, 
seguros y al calor de su dinero. 








viernes, 3 de febrero de 2017

¡ACCIÓN !

                                      




          ORACIÓN 05-02-17

                                                                                

GUÍA: Domingo 5º .Tiempo Ordinario. Ciclo A.  Nos preparamos para la oración de esta semana. Las lecturas pueden coincidir en “la  acción de Dios está con nosotros”. Entramos en el corazón, silenciamos todo el ser. Nos disponemos a descubrir a Dios y escucharle. Padre, aquí estoy. Aquí estamos. Habla, Señor, que tu siervo escucha. Dejemos que su silencio nos cubra y escuchemos su Palabra. SILENCIO DE ACOGIDA Y DESCUBRIMIENTO DE SU  PRESENCIA.

Del libro de Isaías (58,7-10):

Esto dice el Señor: «Parte tu pan con el hambriento, hospeda a los pobres sin techo, cubre a quien ves desnudo y no te desentiendas de los tuyos.
Entonces surgirá tu luz como la aurora, enseguida se curarán tus heridas, ante ti marchará la justicia, detrás de ti la gloria del Señor.
Entonces clamarás al Señor y te responderá; pedirás ayuda y te dirá: “Aquí estoy”.
Cuando alejes de ti la opresión, el dedo acusador y la calumnia, cuando ofrezcas al hambriento de lo tuyo y sacies al alma afligida, brillará tu luz en las tinieblas,
tu oscuridad como el mediodía».


GUÍA: Isaías llama a compartir, a alejar la opresión, a saciar al alma afligida. Entonces surgirá la luz, delante irá la justicia, detrás la gloria del Señor, te dirá: Aquí estoy. Tu luz brillará en las tinieblas. El deseo de Dios cumplido por el creyente va precedido por  la justicia y seguido de su gloria. Sintamos esta Palabra y cómo se realiza la luz en nosotros. SILENCIO DE ADORACIÓN, DE ILUMINACIÓN.

De la primera carta del apóstol san Pablo a los Corintios (2,1-5):

Yo  mismo, hermanos, cuando vine a vosotros a anunciaros el misterio de Dios, no lo hice con sublime elocuencia o sabiduría, pues nunca entre vosotros me precié de saber cosa alguna, sino a Jesucristo, y este crucificado.
También yo me presenté a vosotros débil y temblando de miedo; mi palabra y mi predicación no fue con persuasiva sabiduría humana, sino en la manifestación y el poder del Espíritu, para que vuestra fe no se apoye en la sabiduría de los hombres, sino en el poder de Dios.

GUÍA: San Pablo, ante los corintios, comunica su experiencia de anuncio del misterio de  Dios. Se siente débil, no con sabiduría humana sino con el poder de Espíritu. Como cristianos, hacemos ejercicio de la fe en Jesús y de la confianza en su resurrección. En nuestro interior reconocemos su presencia y le pedimos que avive nuestra fe, nuestra esperanza y nuestro amor. SILENCIO CONTEMPLATIVO, CREYENTE, CONFIADO.

Del santo evangelio según san Mateo (5,13-16):

En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos:
«Vosotros sois la sal de la tierra. Pero si la sal se vuelve sosa, ¿con qué la salarán?
No sirve más que para tirarla fuera y que la pise la gente.
Vosotros sois la luz del mundo. No se puede ocultar una ciudad puesta en lo alto de un monte.
Tampoco se enciende una lámpara para meterla debajo del celemín, sino para ponerla en el candelero y que alumbre a todos los de casa.
Brille así vuestra luz ante los hombres, para que vean vuestras buenas obras y den gloria a vuestro Padre que está en los cielos».


GUÍA: Estamos tomando conciencia de nuestra fe en Jesús, Vamos dándonos cuenta de su presencia y de su empeño en formarnos verdaderos amigos, testigos de su resurrección. Quiere que seamos sal de la tierra. Quiere que seamos luz del mundo. Sembrar  la fe y la esperanza en la parcela en que vivimos. Ser sal que sale, luz que brille. SILENCIO DE ILUMINACIÓN, ENCUENTRO CON JESÚS Y LOS HERMANOS.

SINTETIZAMOS la oración.

PEDIMOS, OFRECEMOS, AGRADECEMOS,

COMPROMISO y frase de recuerdo.

INVOCAMOS A MARÍA

CANTAMOS

LA SAL Y LA LUZ    

 El que me sigue en la vida,
 sal de la tierra será,
mas si la sal se adultera
los hombres la pisarán.

Que sea mi vida la sal,
que sea mi vida la luz,
sal que sala, luz que brilla,
sal y fuego es Jesús.

Sois como la luz del mundo
que a la ciudad alumbra,
ésta se pone en la senda
donde el monte se encumbra.

Que brille a sí vuestra luz
ante los hombres del mundo,
que pasen las buenas obras
de lo externo a lo profundo.                                                                                                                                             



miércoles, 1 de febrero de 2017

¿QUÉ ES LA EUCARISTÍA?




                                     EUCARISTÍA


                 ¿Qué es la Eucaristía?




En los primeros tiempos de la Iglesia, los Hechos de los apóstoles nos presentan una comunidad que se reunía para la enseñanza de los Apóstoles, la comunión, la fracción del pan y la oración.

La Iglesia sigue reuniéndose para estos momentos: Eucaristía, enseñanza del Evangelio y vida cristiana, la oración, los sacramentos.

Al instituir al Eucaristía, Jesús ofrece su cuerpo y su sangre, adelantando el tiempo del Calvario. En el sacrificio sacramental se ofrece al Padre,  aquel primer Jueves Santo y se ofrece en el pan y el vino en cada Eucaristía sobre el altar.

La Eucaristía es por tanto  Sacrificio.

Se celebró en la Cena Pascual y se entrega para ser alimento. Decimos que es Banquete, en torno a la mesa del altar.

También es presencia, puesto que Jesús está en el pan y en el vino. Es presencia del Hijo de Dios que se ofrece al Padre y que se ofrece como pan y vino, a sus hermanos. Su estar en las especies sacramentales nos acompaña en el viaje de la vida y también en el viaje hacia el más allá, como viático.

En el sagrario queda como presencia, amigo, hermano. La iglesia apoya la devoción de las visitas al Santísimo, favoreciendo un crecimiento en la fe, por medio de su compañía,  la oración y adoración. También es presencia en la persona que le recibe en la Comunión. Presencia que con el Espíritu, da gloria al Padre, y cuida de los hermanos.

Muchos sagrarios son visitados por los fieles, pero muchos quedan solos en las iglesias. Favorecer las visitas y compañía a Jesús Sacramentado en todas las capillas y sagrarios del mundo, es tarea cristiana y de adoradores que aman, agradecen, piden gracia para el mundo, junto con Jesús.

Es Sacramento también. Los signos del pan y el vino alimentan la vida cristiana por la fe, la comunión. El cristiano por su fe y la Eucaristía se transforma en el cuerpo de Cristo, como decía San Pablo. 

Es tiempo de interiorizar la fe de la Iglesia.
Es tiempo de vivir la fe que nos dio el Bautismo. 

SACRIFICIO

 BANQUETE 

PRESENCIA  
       
 SACRAMENTO


                                                 EUCARISTÍA
 

viernes, 27 de enero de 2017

UN RESTO HUMILDE

                                                              






                                                                                                    ORACIÓN 29-01-17
GUÍA: Vamos a hacer la oración con Jesús, como siempre, pero vamos al monte las Bienaventuranzas. ¿Cómo ha ido la semana, estás contento? En nuestro interior vemos variedad de sentimientos, de ideas. La Semana de la Unidad de las iglesias nos ha movido el corazón hacia lo que Jesús quería: Que sean uno. Interioricemos esta oración de Jesús y  veamos cómo la cumplimos. Nos disponemos a hacerla nuestra. SILENCIO DE CONOCIMIENTO, DE ENCUENTRO, DE PRESENCIA.

De la profecía de Sofonías (2,3;3,12-13):

Buscad al Señor los humildes de la tierra, los que practican su derecho, buscad la justicia, buscad la humildad, quizá podáis resguardaros el día de la ira del Señor.
Dejaré en ti un resto, un pueblo humilde y pobre que buscará refugio en el nombre del Señor.
El resto de Israel no hará más el mal, no mentirá ni habrá engaño en su boca. Pastarán y descansarán, y no habrá quien los inquiete.

GUÍA: ¿Qué te sugiere esta Palabra? Nos invita a buscar al Señor. Un resto humilde y pobre buscará al Señor. ¿Estamos en ese grupo? Clarifiquemos nuestra situación ante Dios, ante los hermanos, ante nosotros mismos. El resto de Israel, el grupo que cree en el señor, no hará el mal, no mentirá. Señor, haz que seamos limpios de corazón y acogedores de tu verdad. SILENCIO DE PRESENCIA EN LA VERDAD Y EN EL BIEN.

De la primera carta del apóstol san Pablo a los Corintios (1,26-31):

Fijaos en vuestra asamblea, hermanos: no hay en ella muchos sabios en lo humano, ni muchos poderosos, ni muchos aristócratas; sino que, lo necio del mundo lo ha escogido Dios para humillar a los sabios, y lo débil del mundo lo ha escogido Dios para humillar lo poderoso.
Aún más, ha escogido la gente baja del mundo, lo despreciable, lo que no cuenta, para anular a lo que cuenta, de modo que nadie pueda gloriarse en presencia del Señor.
A él se debe que vosotros estéis en Cristo Jesús, el cual se ha hecho para nosotros sabiduría de parte de Dios, justicia, santificación y redención.
Y así —como está escrito—: «el que se gloríe, que se gloríe en el Señor».


GUÍA: Desde ese resto que se fía de Dios, nos encontramos unidos a Él. Jesús se ha hecho para nosotros sabiduría de parte de Dios, justificación y redención. En Él somos salvados y damos gloria al  Padre. Escoge lo que no cuenta, lo débil y aleja al soberbio. Te adoramos, Padre, Hijo y Espíritu. Conviértenos a ti. SILENCIO DE ADORACIÓN Y AGRADECIMIENTO.

Del santo evangelio según san Mateo (5,1-12a):

En aquel tiempo, al ver Jesús el gentío, subió al monte, se sentó y se acercaron sus discípulos; y, abriendo su boca, les enseñaba diciendo:
«Bienaventurados los pobres en el espíritu, porque de ellos es el reino de los cielos.
Bienaventurados los mansos, porque ellos heredarán la tierra.
Bienaventurados los que lloran, porque ellos serán consolados.
Bienaventurados los que tienen hambre y sed de la justicia, porque ellos quedarán saciados.
Bienaventurados los misericordiosos, porque ellos alcanzarán misericordia.
Bienaventurados los limpios de corazón, porque ellos verán a Dios.
Bienaventurados los que trabajan por la paz, porque ellos serán llamados hijos de Dios.
Bienaventurados los perseguidos por causa de la justicia, porque de ellos es el reino de los cielos.
Bienaventurados vosotros cuando os insulten y os persigan y os calumnien de cualquier modo por mi causa. Alegraos y regocijaos, porque vuestra recompensa será grande en el cielo».


GUÍA: Oímos las palabras de Jesús y las acogemos en nuestro corazón. Pobres, mansos, misericordiosos, deseosos de justicia, limpios de corazón, pacificadores, son sus seguidores. ¿Nos encontramos nosotros con esas cualidades de los seguidores de Jesús? Son los testigos del Reino de  Dios. Venga a nosotros tu reino, Señor
SILENCIO DE IDENTIFICACIÓN, DE COMPROMISO.

SINTETIZAMOS  nuestra oración.

OFRECEMOS. PEDIMOS. 

AGRADECEMOS.

PADRE NUESTRO con Jesús y toda la humanidad.

INVOCAMOS A MARÍA.

CANTAMOS

Tu reino es vida, tu reino es verdad;
tu reino es justicia, tu reino es paz;
tu reino es gracia, tu reino es amor:
venga a nosotros tu reino, Señor;
venga a nosotros tu reino, Señor.