REZA Y COMPARTE
¡BUENO ES EL SEÑOR!
GUÍA DE ORACIÓN 19-08-18
GUÍA: Qué bueno es el Señor, dice
el Salmo Responsorial de hoy. Estamos en
medio de las cosas, de las personas, y nuestra morada se alza a Dios para
reconocer la bondad. Nos alegramos en su bondad, en su perdón y su espíritu
para iluminar nuestra oración. SILENCIO DE RECONOCIMIENTO, PERDÓN, PRESENCIA
Del libro de los Proverbios (9,1-6):
La Sabiduría se ha construido su casa plantando siete columnas, ha preparado el banquete, mezclado el vino y puesto la mesa; ha despachado a sus criados para que lo anuncien en los puntos que dominan la ciudad: «Los inexpertos que vengan aquí, quiero hablar a los faltos de juicio: "Venid a comer de mi pan y a beber el vino que he mezclado; dejad la inexperiencia y viviréis, seguid el camino de la prudencia."»
La Sabiduría se ha construido su casa plantando siete columnas, ha preparado el banquete, mezclado el vino y puesto la mesa; ha despachado a sus criados para que lo anuncien en los puntos que dominan la ciudad: «Los inexpertos que vengan aquí, quiero hablar a los faltos de juicio: "Venid a comer de mi pan y a beber el vino que he mezclado; dejad la inexperiencia y viviréis, seguid el camino de la prudencia."»
GUÍA: La sabiduría se ha construido una
casa. Sentimos, que la sabiduría de Dios va construyendo paso a paso su morada en nosotros. Él
enseña a los inexpertos. Venid y comed mi pan. Dejad toda inexperiencia y
seguid el camino de la prudencia . Confiamos en ese pan, esa sabiduría que nos conduce
por los caminos de Dios. SILENCIO DE
CERCANÍA, ACEPTACIÓN, CONFIANZA.
De la carta del apóstol san Pablo a los Efesios (5,15-20):
Fijaos bien cómo andáis; no seáis insensatos, sino sensatos, aprovechando la ocasión, porque vienen días malos. Por eso, no estéis aturdidos, daos cuenta de lo que el Señor quiere. No os emborrachéis con vino, que lleva al libertinaje, sino dejaos llenar del Espíritu. Recitad, alternando, salmos, himnos y cánticos inspirados; cantad y tocad con toda el alma para el Señor. Dad siempre gracias a Dios Padre por todo, en nombre de nuestro Señor Jesucristo.
De la carta del apóstol san Pablo a los Efesios (5,15-20):
Fijaos bien cómo andáis; no seáis insensatos, sino sensatos, aprovechando la ocasión, porque vienen días malos. Por eso, no estéis aturdidos, daos cuenta de lo que el Señor quiere. No os emborrachéis con vino, que lleva al libertinaje, sino dejaos llenar del Espíritu. Recitad, alternando, salmos, himnos y cánticos inspirados; cantad y tocad con toda el alma para el Señor. Dad siempre gracias a Dios Padre por todo, en nombre de nuestro Señor Jesucristo.
GUÍA: No seáis insensatos…
aprovechad la ocasión. Toda ocasión es
un reto para escoger el bien. Que el Espíritu encauce nuestros
corazones en esa elección, para gloria del Padre Dios. Que el pan de Dios,
Jesús, nos fortalezca en el bien. SILENCIO
DE ESCUCHA, DE ESPERANZA, DE BÚSQUEDA.
Del santo evangelio según san Juan (6,51-58):
En aquel tiempo, dijo Jesús a la gente: «Yo soy el pan vivo que ha bajado del cielo; el que coma de este pan vivirá para siempre. Y el pan que yo daré es mi carne para la vida del mundo.»
Disputaban los judíos entre sí: «¿Cómo puede éste darnos a comer su carne?»
Entonces Jesús les dijo: «Os aseguro que si no coméis la carne del Hijo del hombre y no bebéis su sangre, no tenéis vida en vosotros. El que come mi carne y bebe mi sangre tiene vida eterna, y yo lo resucitaré en el último día. Mi carne es verdadera comida, y mi sangre es verdadera bebida. El que come mi carne y bebe mi sangre habita en mí y yo en él. El Padre que vive me ha enviado, y yo vivo por el Padre; del mismo modo, el que me come vivirá por mí. Éste es el pan que ha bajado del cielo: no como el de vuestros padres, que lo comieron y murieron;,el que come este pan vivirá para siempre.»
En aquel tiempo, dijo Jesús a la gente: «Yo soy el pan vivo que ha bajado del cielo; el que coma de este pan vivirá para siempre. Y el pan que yo daré es mi carne para la vida del mundo.»
Disputaban los judíos entre sí: «¿Cómo puede éste darnos a comer su carne?»
Entonces Jesús les dijo: «Os aseguro que si no coméis la carne del Hijo del hombre y no bebéis su sangre, no tenéis vida en vosotros. El que come mi carne y bebe mi sangre tiene vida eterna, y yo lo resucitaré en el último día. Mi carne es verdadera comida, y mi sangre es verdadera bebida. El que come mi carne y bebe mi sangre habita en mí y yo en él. El Padre que vive me ha enviado, y yo vivo por el Padre; del mismo modo, el que me come vivirá por mí. Éste es el pan que ha bajado del cielo: no como el de vuestros padres, que lo comieron y murieron;,el que come este pan vivirá para siempre.»
GUÍA: Yo soy el pan vivo…quien come de
este pan, vivirá para siempre. Jesús se siente pan para el mundo. Como yo vivo por el Padre, el que me come
vivirá por mí. La fe nos lleva a compartir el pan y vivir la vida de
resurrección. Guardamos , como María, la Palabra y la recreamos en nosotros. SILENCIO DE FE, DE RECONOCIMIENTO Y DE VIVENCIA
DE LA PALABRA.
SINTETIZAMOS NUESTRA ORACIÓN, UNA
FRASE.
ADORAMOS, AMAMOS, AGRADECEMOS.
INVOCAMOS A MARÍA, QUE GUARDÓ LA
PALABRA.
NOS DIRIGIMOS AL PADRE CON JESÚS:
PADRE NUESTRO
CANTAMOS
Donde reina la verdad,
donde existe la verdad,
donde hay paz,
esta presente el Señor.
Porque Dios es la verdad,
porque Dios es libertad,
porque Dios es
justicia y amor.
donde existe la verdad,
donde hay paz,
esta presente el Señor.
Porque Dios es la verdad,
porque Dios es libertad,
porque Dios es
justicia y amor.
Dios nos convoca en el amor.
Dios nos reúne en el amor
porque Dios es amor, es amor.
Dios nos reúne en el amor
porque Dios es amor, es amor.
Vino a nosotros en el amor,
vive en la tierra en el amor,
porque Dios es amor, es amor.
vive en la tierra en el amor,
porque Dios es amor, es amor.
Él nos conduce en el amor,
a un mundo nuevo en el amor,
porque Dios es amor, es amor.
a un mundo nuevo en el amor,
porque Dios es amor, es amor.
Después de unos días de vacaciones, volvemos a encontrarnos en la oración. Ésta es la del domingo pasado. Puede servirnos para unirnos a Jesús en su don y entrega. ¿Estáis bien? Saludos
ResponderEliminar"La sabiduría... ha despachado a sus criados para que lo anuncien en los puntos que dominan la ciudad" Acoger la sabiduría de Dios nos hace sabios, nos acerca a él. Ser pequeños puntos luminosos en nuestro mundo es importante. Buen día.
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