viernes, 17 de julio de 2020

ERES BUENO Y CLEMENTE



REZA Y COMPARTE
ERES BUENO Y CLEMENTE

GUÍA DE ORACIÓN 18-07-20

GUÍA: Señor, eres bueno y clemente. Aquí estamos. Tu presencia es la que nos dirige y santifica. Tu llamada a la oración, el encuentro nos hace conocerte y caminar. Tu diestra es poderosa y tu perdón nos lleva a ti. Perdona lo que nos separa de ti. Conviértenos en hijos fieles y hermanos verdaderos. SILENCIO DE CONSIDERACIÓN, DE VER TUS ACCIONES Y CÓMO LAS REALIZAS.

Del libro de la Sabiduría (12,13.16-19):

Fuera de ti, no hay otro dios al cuidado de todo, ante quien tengas que justificar tu sentencia. Tu poder es el principio de la justicia, y tu soberanía universal te hace perdonar a todos. Tú demuestras tu fuerza a los que dudan de tu poder total, y reprimes la audacia de los que no lo conocen. Tú, poderoso soberano, juzgas con moderación y nos gobiernas con gran indulgencia, porque puedes hacer cuanto quieres. Obrando así, enseñaste a tu pueblo que el justo debe ser humano, y diste a tus hijos la dulce esperanza de que, en el pecado, das lugar al arrepentimiento.

GUÍA: Juzgas con moderación y nos gobiernas con amor, nos incluyes en tu proyecto de amor. Eres bueno y clemente. Danos fe firme, esperanza alegre, amor sincero.  Enseñas a tu pueblo  que el justo ha de ser humanos. Queremos vivir esa humanidad que nos acerca a ti. Humanidad que nos hace semejantes a ti. Nos creaste a imagen y semejanza tuya. SILENCIO DE TOMA DE CONCIENCIA, DE ANÁLISIS Y DE PROPUESTA.

De la carta del apóstol san Pablo a los Romanos (8,26-27):

El Espíritu viene en ayuda de nuestra debilidad, porque nosotros no sabemos pedir lo que nos conviene, pero el Espíritu mismo intercede por nosotros con gemidos inefables. Y el que escudriña los corazones sabe cuál es el deseo del Espíritu, y que su intercesión por los santos es según Dios.

GUÍA: El Espíritu viene en ayuda de nuestra debilidad. La rectitud y el amor nos conducen a tu camino. Abrimos nuestro diálogo y escuchamos tu voz que va haciendo en nosotros una vida nueva. Tú que escudriña los corazones sabes que el Espíritu influye en nosotros según tu deseo. Visualizamos al Padre, al Hijo y al Espíritu, confiamos en su amor. SILENCIO DE ESCUCHA, DE CONFIANZA, DE AMOR.

Del santo evangelio según san Mateo (13,24-43):

En aquel tiempo, Jesús propuso otra parábola a la gente: «El reino de los cielos se parece a un hombre que sembró buena semilla en su campo; pero, mientras la gente dormía, su enemigo fue y sembró cizaña en medio del trigo y se marchó. Cuando empezaba a verdear y se formaba la espiga apareció también la cizaña. Entonces fueron los criados a decirle al amo: "Señor, ¿no sembraste buena semilla en tu campo? ¿De dónde sale la cizaña?" Él les dijo: "Un enemigo lo ha hecho." Los criados le preguntaron: "¿Quieres que vayamos a arrancarla?" Pero él les respondió: "No, que, al arrancar la cizaña, podríais arrancar también el trigo. Dejadlos crecer juntos hasta la siega y, cuando llegue la siega, diré a los segadores: Arrancad primero la cizaña y atadla en gavillas para quemarla, y el trigo almacenadlo en mi granero."»
Les propuso esta otra parábola: «El reino de los cielos se parece a un grano de mostaza que uno siembra en su huerta; aunque es la más pequeña de las semillas, cuando crece es más alta que las hortalizas; se hace un arbusto más alto que las hortalizas y vienen los pájaros a anidar en sus ramas.»
Les dijo otra parábola: «El reino de los cielos se parece a la levadura; una mujer la amasa con tres medidas de harina y basta para que todo fermente.»
Jesús expuso todo esto a la gente en parábolas y sin parábolas no les exponía nada. Así se cumplió el oráculo del profeta: «Abriré mi boca diciendo parábolas; anunciaré los secretos desde la fundación del mundo.»
Luego dejó a la gente y se fue a casa. Los discípulos se le acercaron a decirle: «Acláranos la parábola de la cizaña en el campo.»
Él les contestó: «El que siembra la buena semilla es el Hijo del Hombre; el campo es el mundo; la buena semilla son los ciudadanos del reino; la cizaña son los partidarios del maligno; el enemigo que la siembra es el diablo; la cosecha es el fin del tiempo, y los segadores los ángeles. Lo mismo que se arranca la cizaña y se quema, así será el fin del tiempo: el Hijo del Hombre enviará sus ángeles y arrancarán de su reino a todos los corruptos y malvados y los arrojarán al horno encendido; allí será el llanto y el rechinar de dientes. Entonces los justos brillarán como el sol en el reino de su padre. El que tenga oídos, que oiga.»

GUÍA: Sembró la semilla en su campo. El enemigo siembra cizaña. La buena semilla crece pero también crece la cizaña. Sus trabajadores quieren cortarla, él prefiere no perjudicar a la buena semilla, Quiere que crezcan juntas y se separarán al final de la cosecha. Vemos nuestro campo, la buena semilla que recibimos, la cizaña que aparece. ¿A cuál de las dos apoyamos más? SILENCIO DE CONTEMPLACIÓN, DE EXAMEN Y DE DECISIÓN.

RECOGEMOS LA ORACIÓN RECORDANDO UNA FRASE.

ALABAMOS, DAMOS GRACIAS, OFRECEMOS, PEDIMOS.

INVOCAMOS A MARÍA, MADRE Y MAESTRA DE ORACIÓN.
NOS DIRIGIMOS AL PADRE CON LA ORACIÓN DE JESÚS: PADRE NUESTRO.

CANTAMOS

Oí tu voz

1. Oí tu voz, en los gritos de la noche, oí tu voz.
Oí tu voz, en el llanto de los hombres, oí tu voz.
Oí tu voz, anunciando a los pobres la justicia de Dios.

ERES EL CAMINO, ERES LA VERDAD, ERES LA VIDA
ERES EL CAMINO, ERES LA VERDAD, ERES LA VIDA

2. Oí tu voz, en el buen samaritano, oí tu voz.
Oí tu voz, al servir a mis hermanos, oí tu voz.
Oí tu voz, me sentí tu invitado, compartí tu amistad.

3. Oí tu voz, en los guetos del hambre,
oí tu voz, llevaré tu mensaje
de la liberación.




6 comentarios:

  1. "Eres bueno y clemente" con nuestra oración confiamos en tu misericordia, Señor. Te esperamos y buscamos tu rostro. Unidos en la oración. Saludos y comparte.

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  2. "Tu llamada a la oración, el encuentro nos hace conocerte y caminar." Venid a mí los que estáis cansados y agobiados, yo os aliviaré, escuchamos en la Escritura.Jesús, ven con nosotros.

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  3. "«El que siembra la buena semilla es el Hijo del Hombre; el campo es el mundo; la buena semilla son los ciudadanos del reino; la cizaña son los partidarios del maligno; el enemigo que la siembra es el diablo; la cosecha es el fin del tiempo," ¿Qué nos dice a nosotros? Cuidar nuestro campo y el de los demás... Podemos hacerlo...

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  4. "El Espíritu viene en ayuda de nuestra debilidad. La rectitud y el amor nos conducen a tu camino. Abrimos nuestro diálogo y escuchamos tu voz que va haciendo en nosotros una vida nueva."Danos, Señor, tu Espíritu. Aviva nuestra fe.

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  5. "No, que, al arrancar la cizaña, podríais arrancar también el trigo. Dejadlos crecer juntos hasta la siega" Hemos de convivir en un mundo plural. No confundamos la cizaña con el trigo. Pedimos la luz del Espíritu y su fortaleza.

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  6. "Fuera de ti, Padre Dios,no hay otro dios al cuidado de todo, ante quien tengas que justificar tu sentencia. Tu poder es el principio de la justicia, y tu soberanía universal te hace perdonar a todos" Nos confiamos a tu providencia y amor. Ayuda nuestro esfuerzo en la búsqueda del bien y la verdad.

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