¡RESUCITÓ¡
GUÍA DE ORACIÓN 01-04-18
GUÍA: Ha resucitado el Señor. Eso
se comunicaban unos a otros los amigos de Jesús. La admiración y alegría brotaba
en sus almas. Hoy en nuestra oración también decimos: Ha resucitado el Señor. La
vida de Jesús se extiende a cada uno de
nosotros. Se le ha aparecido a Pedro, lo hemos visto. En silencio
dejemos que estas palabras y esta realidad inunde nuestro ser y transmitamos
nuestra adoración a Jesús salvador. SILENCIO CREYENTE Y ADORADOR.
De los Hechos de los Apóstoles (10,34a.37-43):
En aquellos días, Pedro tomó la palabra y dijo:
«Vosotros conocéis lo que sucedió en toda Judea, comenzando por Galilea, después del bautismo que predicó Juan. Me refiero a Jesús de Nazaret, ungido por Dios con la fuerza del Espíritu Santo, que pasó haciendo el bien y curando a todos los oprimidos por el diablo, porque Dios estaba con él.
Nosotros somos testigos de todo lo que hizo en la tierra de los judíos y en Jerusalén. A este lo mataron, colgándolo de un madero. Pero Dios lo resucitó al tercer día y le concedió la gracia de manifestarse, no a todo el pueblo, sino a los testigos designados por Dios: a nosotros, que hemos comido y bebido con él después de su resurrección de entre los muertos.
Nos encargó predicar al pueblo, dando solemne testimonio de que Dios lo ha constituido juez de vivos y muertos. De él dan testimonio todos los profetas: que todos los que creen en él reciben, por su nombre, el perdón de los pecados».
En aquellos días, Pedro tomó la palabra y dijo:
«Vosotros conocéis lo que sucedió en toda Judea, comenzando por Galilea, después del bautismo que predicó Juan. Me refiero a Jesús de Nazaret, ungido por Dios con la fuerza del Espíritu Santo, que pasó haciendo el bien y curando a todos los oprimidos por el diablo, porque Dios estaba con él.
Nosotros somos testigos de todo lo que hizo en la tierra de los judíos y en Jerusalén. A este lo mataron, colgándolo de un madero. Pero Dios lo resucitó al tercer día y le concedió la gracia de manifestarse, no a todo el pueblo, sino a los testigos designados por Dios: a nosotros, que hemos comido y bebido con él después de su resurrección de entre los muertos.
Nos encargó predicar al pueblo, dando solemne testimonio de que Dios lo ha constituido juez de vivos y muertos. De él dan testimonio todos los profetas: que todos los que creen en él reciben, por su nombre, el perdón de los pecados».
GUÍA: Pedro habla al pueblo recordando lo
que hizo Jesús, cómo fue crucificado y Dios lo resucitó al tercer día. La
fuerza de Dios resucita a Jesús y transforma a los discípulos. Estamos ante
este hecho, lo contemplamos y lo sentimos en nosotros como creyentes de hoy. De
hombre desilusionados, y temerosos pasan a ser creyentes y transmisores del
hecho de Jesús a todo el mundo. Por el Bautismo hemos muerto con Cristo y
resucitado con Él. EN SILENCIO
AGRADECEMOS SU AMOR, SU PRESENCIA RESUCITADA EN NOSOTROS. TESTIFICAMOS PARA OTROS
De la carta del apóstol san Pablo a los Colosenses
(3,1-4):
Hermanos:
Si habéis resucitado con Cristo, buscad los bienes de allá arriba, donde Cristo está sentado a la derecha de Dios; aspirad a los bienes de arriba, no a los de la tierra.
Porque habéis muerto; y vuestra vida está con Cristo escondida en Dios. Cuando aparezca Cristo, vida vuestra, entonces también vosotros apareceréis gloriosos, juntamente con él.
Hermanos:
Si habéis resucitado con Cristo, buscad los bienes de allá arriba, donde Cristo está sentado a la derecha de Dios; aspirad a los bienes de arriba, no a los de la tierra.
Porque habéis muerto; y vuestra vida está con Cristo escondida en Dios. Cuando aparezca Cristo, vida vuestra, entonces también vosotros apareceréis gloriosos, juntamente con él.
GUÍA: Si habéis resucitado con Cristo,
buscad los bienes de arriba. Nuestro resucitar tiene que llevarnos a vivir como
tales. El hombre y la mujer nuevos se miran en el espejo de Cristo para gloria
del Padre Dios. Nuestra vida con Cristo escondida en Dios. Estamos llamados a esto. Un imán que tiene
que atraer nuestro pensar, sentir y actuar
según el hombre nuevo Jesús. Nos adherimos a estas palabras para
hacerlas parte de nosotros. SILENCIO
CONTEMPLATIVO, AGRADECIDO Y DE UNIÓN.
Secuencia
Ofrezcan los cristianos/ofrendas de alabanza
a gloria de la Víctima/propicia de la Pascua.
Cordero sin pecado/que a las ovejas salva,
a Dios y a los culpables/unió con nueva alianza.
Lucharon vida y muerte/en singular batalla,
y, muerto el que es la Vida,/triunfante se levanta.
«¿Qué has visto de camino,/María, en la mañana?»
los ángeles testigos,/sudarios y mortaja.
¡Resucitó de veras/mi amor y mi esperanza!
Venid a Galilea,/allí el Señor aguarda;
allí veréis los suyos/la gloria de la Pascua.»
Primicia de los muertos,/sabemos por tu gracia
que estás resucitado;/la muerte en ti no manda.
Rey vencedor, apiádate/de la miseria humana
y da a tus fieles parte/en tu victoria santa.
Del santo evangelio según san Juan
(20,1-9):
El primer día de la semana, María la Magdalena fue al sepulcro al amanecer, cuando aún estaba oscuro, y vio la losa quitada del sepulcro.
Echó a correr y fue donde estaban Simón Pedro y el otro discípulo, a quien Jesús amaba, y les dijo:
«Se han llevado del sepulcro al Señor y no sabemos dónde lo han puesto».
Salieron Pedro y el otro discípulo camino del sepulcro. Los dos corrían juntos, pero el otro discípulo corría más que Pedro; se adelantó y llegó primero al sepulcro; e, inclinándose, vio los lienzos tendidos; pero no entró.
Llegó también Simón Pedro detrás de él y entró en el sepulcro: vio los lienzos tendidos y el sudario con que le habían cubierto la cabeza, no con los lienzos, sino enrollado en un sitio aparte.
Entonces entró también el otro discípulo, el que había llegado primero al sepulcro; vio y creyó.
Pues hasta entonces no habían entendido la Escritura: que él había de resucitar de entre los muertos.
GUÍA: El sepulcro
estaba vacío. El Señor resucitó. Unidos a los discípulos hemos recibido el
testimonio y la fe. Dios Padre ha
resucitado a Jesús. Momentos de interiorización, de encuentro, de fe y alegría.
Él vive, está entre nosotros. Sentimos su presencia y transmitimos al mundo
como ellos la presencia del resucitado. SILENCIO DE ENCUENTRO, PRESENCIA,
TESTIMONIO.
RECOGEMOS NUESTRO SENTIMIENTOS,
EXPRESAMOS, ADORAMOS, AGRADECEMOS
NOS ALEGRAMOS CON MARÍA EN LA RESURRECCIÓN DE SU HIJO
CON JESÚS DECIMOS AL PADRE: PADRE NUESTRO…
CANTAMOS
Hoy el Señor resucitó/y
de la muerte nos salvó.
¡ALEGRÍA Y PAZ, HERMANOS,/QUE EL SEÑOR RESUCITÓ!
Porque esperó, Dios le libró/y de la muerte lo sacó.
ESTRIBILLO.
El pueblo en Él vida encontró;
/la esclavitud ya terminó.
ESTRIBILLO.
La luz de Dios en Él brilló,/
la nueva vida nos llenó.
ESTRIBILLO.
Con gozo alzad el rostro a Dios,/que de Él nos llega la salvación.
ESTRIBILLO.
Todos cantad: «¡Aleluya!»./Todos gritad: «¡Aleluya!».
ESTRIBILLO.
¡ALEGRÍA Y PAZ, HERMANOS,/QUE EL SEÑOR RESUCITÓ!
Porque esperó, Dios le libró/y de la muerte lo sacó.
ESTRIBILLO.
El pueblo en Él vida encontró;
/la esclavitud ya terminó.
ESTRIBILLO.
La luz de Dios en Él brilló,/
la nueva vida nos llenó.
ESTRIBILLO.
Con gozo alzad el rostro a Dios,/que de Él nos llega la salvación.
ESTRIBILLO.
Todos cantad: «¡Aleluya!»./Todos gritad: «¡Aleluya!».
ESTRIBILLO.
https://www.youtube.com/watch?v=hrJ5FkXFs7c