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viernes, 27 de marzo de 2020

LO DIGO Y LO HAGO



 
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LO DIGO Y LO HAGO

GUÍA DE ORACIÓN 29-03-20

GUÍA: “Sabréis que yo el Señor, lo digo y lo hago” Hoy nos ponemos ante  el Padre y oímos su voz. Jesús,  Palabra del Padre, cumple su voluntad. Nos unimos a él. Todo queda glorificado y restaurado en Jesús, por el Espíritu. Pedimos su presencia y confiamos que se cumpla en la vida su proyecto de amor. SILENCIO DE COMPRENSIÓN, UNIÓN, PETICIÓN.

De la profecía de Ezequiel (37,12-14):

Así dice el Señor: «Yo mismo abriré vuestros sepulcros, y os haré salir de vuestros sepulcros, pueblo mío, y os traeré a la tierra de Israel. Y, cuando abra vuestros sepulcros y os saque de vuestros sepulcros, pueblo mío, sabréis que soy el Señor. Os infundiré mi espíritu, y viviréis; os colocaré en vuestra tierra y sabréis que yo, el Señor, lo digo y lo hago.» Oráculo del Señor.

GUÍA: Os  haré salir de vuestros sepulcros. Salir de la muerte y volver a la vida del  resucitado. Comportamientos nuevos que revitalicen nuestra vida y la de los demás. ¿Los vemos en nosotros y en otras personas?
  Os infundiré mi Espíritu y viviréis. Confiamos en ti, Jesús, en tu gracia para avanzar por el bien.  Ven Espíritu Santo. SILENCIO DE FE, DE ESPERANZA, DE AMOR.

De la carta del apóstol san Pablo a los Romanos (8,8-11):

Los que viven sujetos a la carne no pueden agradar a Dios. Pero vosotros no estáis sujetos a la carne, sino al espíritu, ya que el Espíritu de Dios habita en vosotros. El que no tiene el Espíritu de Cristo no es de Cristo. Pues bien, si Cristo está en vosotros, el cuerpo está muerto por el pecado, pero el espíritu vive por la justificación obtenida. Si el Espíritu del que resucitó a Jesús de entre los muertos habita en vosotros, el que resucitó de entre los muertos a Cristo Jesús vivificará también vuestros cuerpos mortales, por el mismo Espíritu que habita en vosotros.

GUÍA: El Espíritu de Dios habita en vosotros. Vuestra vida está unida al Espíritu de Cristo. Nuestro actuar es fruto de ese mismo Espíritu. Lo dice y lo hace. Que el Bautismo nos injerte en Cristo y su savia recorra el pensamiento, las palabras y las obras. Saboreamos el significado de estas palabras y nos dejamos transformar por ellas. SILENCIO DE TOMA DE CONCIENCIA, DE ACEPTACIÓN, DE APERTURA.

Del santo evangelio según san Juan (11,3-7.17.20-27.33b-45):

En aquel tiempo, las hermanas de Lázaro mandaron recado a Jesús, diciendo: «Señor, tu amigo está enfermo.»Jesús, al oírlo, dijo: «Esta enfermedad no acabará en la muerte, sino que servirá para la gloria de Dios, para que el Hijo de Dios sea glorificado por ella.»
Jesús amaba a Marta, a su hermana y a Lázaro. Cuando se enteró de que estaba enfermo, se quedó todavía dos días en donde estaba. Sólo entonces dice a sus discípulos: «Vamos otra vez a Judea.»
Cuando Jesús llegó, Lázaro llevaba ya cuatro días enterrado. Cuando Marta se enteró de que llegaba Jesús, salió a su encuentro, mientras María se quedaba en casa.
Y dijo Marta a Jesús: «Señor, si hubieras estado aquí no habría muerto mi hermano. Pero aún ahora sé que todo lo que pidas a Dios, Dios te lo concederá.»Jesús le dijo: «Tu hermano resucitará.»Marta respondió: «Sé que resucitará en la resurrección del último día.»
Jesús le dice: «Yo soy la resurrección y la vida: el que cree en mí, aunque haya muerto, vivirá; y el que está vivo y cree en mí, no morirá para siempre. ¿Crees esto?»Ella le contestó: «Sí, Señor: yo creo que tú eres el Mesías, el Hijo de Dios, el que tenía que venir al mundo.»
Jesús sollozó y, muy conmovido, preguntó: «¿Dónde lo habéis enterrado?»Le contestaron: «Señor, ven a verlo.»Jesús se echó a llorar. Los judíos comentaban: «¡Cómo lo quería!»
Pero algunos dijeron: «Y uno que le ha abierto los ojos a un ciego, ¿no podía haber impedido que muriera éste?»Jesús, sollozando de nuevo, llega al sepulcro. Era una cavidad cubierta con una losa.
Dice Jesús: «Quitad la losa.»Marta, la hermana del muerto, le dice: «Señor, ya huele mal, porque lleva cuatro días.»Jesús le dice: «¿No te he dicho que si crees verás la gloria de Dios?»
Entonces quitaron la losa. Jesús, levantando los ojos a lo alto, dijo: «Padre, te doy gracias porque me has escuchado; yo sé que tú me escuchas siempre; pero lo digo por la gente que me rodea, para que crean que tú me has enviado.»Y dicho esto, gritó con voz potente: «Lázaro, ven afuera.»
El muerto salió, los pies y las manos atados con vendas, y la cara envuelta en un sudario.
Jesús les dijo: «Desatadlo y dejadlo andar.»Y muchos judíos que habían venido a casa de María, al ver lo que había hecho Jesús, creyeron en él.

 GUÍA: Si hubieras estado aquí, no habría muerto mi hermano. Se lo decimos a Jesús, junto con la hermana de Lázaro. Por otra parte confesamos nuestra fe y también nuestra debilidad y la de los hermanos. Los problemas, la enfermedad, están ahí. Te necesitamos, Jesús, para superarlos. Tu presencia vencerá a la muerte y nos dará nueva vida. Visualizamos tu victoria sobre el mal y la muerte. SILENCIO DE CONFIANZA, VISUALIZACIÓN, ACCIÓN.

SINTETIZAMOS LA ORACIÓN, UNA FRASE NOS AYUDA A RECORDAR.

CONFIANZA, PRESENCIA, AMOR, ACCIÓN.

INVOCAMOS A MARÍA, NUESTRA MADRE Y MAESTRA DE ORACIÓN.

NOS DIRIGIMOS AL PADRE CON LAS PALABRAS DE JESÚS: PADRE
NUESTRO.

CANTAMOS

1. Dios es fiel, guarda siempre su Alianza;/libra al pueblo de toda esclavitud.                        
  Su Palabra resuena en los profetas,/reclamando el bien y la virtud.

2. Pueblo en marcha por el desierto ardiente/horizontes de paz y libertad. Asamblea de Dios,/ eterna fiesta; tierra nueva, perenne heredad.

3. Si al mirar hacia atrás somos tentados/de volver al Egipto seductor,    
    el Espíritu empuja /con su fuerza a avanzar por la vía del amor.

4. El maná es un don que cielo envía,/pero el pan hoy se come con sudor. Leche y miel nos dará la tierra nueva,/ si el trabajo es fecundo y redentor.



viernes, 13 de marzo de 2020

NO ENDUREZCÁIS VUESTRO CORAZÓN



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NO ENDUREZCÁIS VUESTRO CORAZÓN

GUÍA DE ORACIÓN 15-03-20

GUÍA: De nuevo estamos ante ti, Señor. A veces, nuestro corazón es duro y  rechaza tu gracia. Vemos las dificultades y nos sentimos abrumados. Conduce, Padre, la vida y cambia el duro corazón obscurecido por la culpa y la lejanía de tus mandatos. SILENCIO DE HUMILDAD, RECONOCIMIENTO Y ENCUENTRO.

Del libro del Éxodo (17,3-7):
En aquellos días, el pueblo, torturado por la sed, murmuró contra Moisés: «¿Nos has hecho salir de Egipto para hacernos morir de sed a nosotros, a nuestros hijos y a nuestros ganados?»
Clamó Moisés al Señor y dijo: «¿Qué puedo hacer con este pueblo? Poco falta para que me apedreen.»
Respondió el Señor a Moisés. «Preséntate al pueblo llevando contigo algunos de los ancianos de Israel; lleva también en tu mano el cayado con que golpeaste el río, y vete, que allí estaré yo ante ti, sobre la peña, en Horeb; golpearás la peña, y saldrá de ella agua para que beba el pueblo.»
Moisés lo hizo así a la vista de los ancianos de Israel. Y puso por nombre a aquel lugar Masá y Meribá, por la reyerta de los hijos Israel y porque habían tentado al Señor, diciendo: «¿Está o no está el Señor en medio de nosotros?»

GUÍA: “No endurezcáis el corazón” nos dices. Hemos protestado como los israelitas por el hambre y la sed del desierto. Te ha presentado Moisés nuestras quejas. Tú has escuchado, nos has escuchado   y nos das agua en la roca. Somos rebeldes, cuida nuestro corazón y nuestra mente, para  que te conozcamos mejor y nos fiemos de ti. Guárdanos en tu paz para  que podamos avanzar por el desierto y reconocer tu mano protectora. SILENCIO DE PAZ, PERDÓN, CONFIANZA.

De la carta del apóstol san Pablo a los Romanos (5,1-2.5-8):
Ya que hemos recibido la justificación por la fe, estamos en paz con Dios, por medio de nuestro Señor Jesucristo. Por él hemos obtenido con la fe el acceso a esta gracia en que estamos: y nos gloriamos, apoyados en la esperanza de alcanzar la gloria de Dios. Y la esperanza no defrauda, porque el amor de Dios ha sido derramado en nuestros corazones con el Espíritu Santo que se nos ha dado. En efecto, cuando nosotros todavía estábamos sin fuerza, en el tiempo señalado, Cristo murió por los impíos; en verdad, apenas habrá quien muera por un justo; por un hombre de bien tal vez se atrevería uno a morir; mas la prueba de que Dios nos ama es que Cristo, siendo nosotros todavía pecadores, murió por nosotros.

GUÍA: Estamos en paz con Dios por medio de Jesucristo. Nos dice san Pablo. Él muere por nosotros.  El  amor de Dios ha sido derramado en nuestros corazones. Gozamos de paz y de amor por parte de Dios. Nuestras relaciones con él  son torpes y desconfiadas. Padre te damos gracias por tu amor, por la entrega  de tu Hijo. Te damos gracias por derramar  en nosotros tu amor y tu  Espíritu Santo. SILENCIO DE VISUALIZACIÓN, CONTEMPLACIÓN, AGRADECIMIENTO.

Del santo evangelio según san Juan (4,5-42):
En aquel tiempo, llegó Jesús a un pueblo de Samaria llamado Sicar, cerca del campo que dio Jacob a su hijo José; allí estaba el manantial de Jacob. Jesús, cansado del camino, estaba allí sentado junto al manantial. Era alrededor del mediodía.
Llega una mujer de Samaria a sacar agua, y Jesús le dice: «Dame de beber.» Sus discípulos se habían ido al pueblo a comprar comida.
La samaritana le dice: «¿Cómo tú, siendo judío, me pides de beber a mí, que soy samaritana?» Porque los judíos no se tratan con los samaritanos.
Jesús le contestó: «Si conocieras el don de Dios y quién es el que te pide de beber, le pedirías tú, y él te daría agua viva.»
La mujer le dice: «Señor, si no tienes cubo, y el pozo es hondo, ¿de dónde sacas agua viva?; ¿eres tú más que nuestro padre Jacob, que nos dio este pozo, y de él bebieron él y sus hijos y sus ganados?»
Jesús le contestó: «El que bebe de esta agua vuelve a tener sed; pero el que beba del agua que yo le daré nunca más tendrá sed: el agua que yo le daré se convertirá dentro de él en un surtidor de agua que salta hasta la vida eterna.»
La mujer le dice: «Señor, dame de esa agua así no tendré más sed ni tendré que venir aquí a sacarla.»
Él le dice: «Anda, llama a tu marido y vuelve.»
La mujer le contesta: «No tengo marido».
Jesús le dice: «Tienes razón que no tienes marido; has tenido ya cinco y el de ahora no es tu marido. En eso has dicho la verdad.»
La mujer le dijo: «Señor, veo que tú eres un profeta. Nuestros padres dieron culto en este monte, y vosotros decís que el sitio donde se debe dar culto está en Jerusalén.»
Jesús le dice: «Créeme, mujer: se acerca la hora en que ni en este monte ni en Jerusalén daréis culto al Padre. Vosotros dais culto a uno que no conocéis; nosotros adoramos a uno que conocemos, porque la salvación viene de los judíos. Pero se acerca la hora, ya está aquí, en que los que quieran dar culto verdadero adorarán al Padre en espíritu y verdad, porque el Padre desea que le den culto así Dios es espíritu, y los que le dan culto deben hacerlo en espíritu y verdad.»
La mujer le dice: «Sé que va a venir el Mesías, el Cristo; cuando venga, él nos lo dirá todo.»
Jesús le dice: «Soy yo, el que habla contigo.»
En aquel pueblo muchos creyeron en él. Así, cuando llegaron a verlo los samaritanos, le rogaban que se quedara con ellos. Y se quedó allí dos días. Todavía creyeron muchos más por su predicación, y decían a la mujer: «Ya no creemos por lo que tú dices; nosotros mismos lo hemos oído y sabemos que él es de verdad el Salvador del mundo.»

GUÍA:  Junto  con la samaritana, escuchamos: “Dame de beber” . Jesús sediento de cercanía y amor en cada cristiano, en cada persona. Él nos da el agua viva que salta hasta la vida eterna. Aceptamos esa agua viva que nos da y dejamos que  cale nuestros corazones, nuestra vida. Que lleguemos a descubrir a Jesús, como el salvador que habla contigo o conmigo. SILENCIO DE CONTEMPLACIÓN, DE FE, DE ENTREGA Y DON

RECOGEMOS LA SÍNTESIS DE NUESTRA ORACIÓN: UNA FRASE PARA RECORDAR.

PRESENCIA, FE, AGRADECIMIENTO, RESPUESTA.  
    
INVOCAMOS A MARÍA, NUESTRA MADRE, PARA QUE NOS ACOMPAÑE EN EL CAMINO.

CON JESÚS NOS DIRIGIMOS AL PADRE: PADRE NUESTRO…

CANTAMOS.
Sólo Dios es grande. (Canción del astronauta).
Cesáreo Gabaráin.
Yo pensaba que el hombre era /grande por su poder,
grande por su saber,/grande por su valor;
yo pensaba que el mundo era /grande y me equivoqué,
pues grande sólo es Dios.

Sube hasta el cielo y lo verás, /que pequeñito el mundo es.
Sube hasta el cielo y lo verás, /como  un juguete de cristal
que con cariño hay que cuidar./Sube hasta el cielo y lo verás.

Muchas veces el hombre /buscaba ser como Dios,
quería ser como Dios, /soñaba ser como Dios.
Muchas veces el hombre/soñaba y se despertó,
pues grande sólo es Dios.

Caminando por la vida /hay veces que encontrarás
cosas que extrañarás, /hombres que admirarás.
Caminando por la vida /hay veces que pensarás
que el hombre es como Dios.


viernes, 28 de febrero de 2020

SERÉIS COMO DIOSES


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SERÉIS  COMO  DIOSES

GUÍA  DE ORACIÓN 01-03-20

GUÍA:   Seréis como dioses es la tentación del primer hombre y la primera mujer. Nos llama la atención, puede ser apetecible. Aquí estamos, ante ti . Queremos ser hijos que acogen tu verdad, tu sabiduría y amor. Tú eres el Padre y distribuyes tus Bienes y tu gracia. Tú eres el Dios que nos salva en tu Hijo Jesús. Su misterio nos eleva hasta ti y nos perdona, SILENCIO DE COMPRENSIÓN, VERDAD, PERDÓN

Del libro del Génesis (2,7-9;3,1-7):      
 
EL Señor Dios modeló al hombre del polvo del suelo e insufló en su nariz aliento de vida; y el hombre se convirtió en ser vivo.
Luego el Señor Dios plantó un jardín en Edén, hacia oriente, y colocó en él al hombre que había modelado. El Señor Dios hizo brotar del suelo toda clase de árboles hermosos para la vista y buenos para comer; además, el árbol de la vida en mitad del jardín, y el árbol del conocimiento del bien y el mal. La serpiente era más astuta que las demás bestias del campo que el Señor había hecho. Y dijo a la mujer: «¿Conque Dios os ha dicho que no comáis de ningún árbol del jardín?».
La mujer contestó a la serpiente: «Podemos comer los frutos de los árboles del jardín; pero del fruto del árbol que está en mitad del jardín nos ha dicho Dios: “No comáis de él ni lo toquéis, de lo contrario moriréis”».
La serpiente replicó a la mujer: «No, no moriréis; es que Dios sabe que el día en que comáis de él, se os abrirán los ojos, y seréis como Dios en el conocimiento del bien y el mal».
Entonces la mujer se dio cuenta de que el árbol era bueno de comer, atrayente a los ojos y deseable para lograr inteligencia; así que tomó de su fruto y comió. Luego se lo dio a su marido, que también comió. Se les abrieron los ojos a los dos y descubrieron que estaban desnudos; y entrelazaron hojas de higuera y se las ciñeron.

 GUÍA: El Señor modeló de arcilla al hombre. Le dio el soplo de vida. Le da sus órdenes. Pero el seréis como dioses les deslumbra y también sigue deslumbrando al ser humano en ocasiones. No comáis de ese árbol. Se sienten atraído por él. Hoy nos sentimos atraídos por distintos frutos y sobre todo por el poder. El seréis como dioses, todavía nos engaña. Reflexionamos, dejamos que la humildad transforme los deseos. SILENCIO DE HUMILDAD,  DE  PERDÓN, DE PETICIÓN.

De la carta del apóstol san Pablo a los Romanos (5,12-19):

HERMANOS: Lo mismo que por un hombre entró el pecado en el mundo, y por el pecado la muerte, y así la muerte se propagó a todos los hombres, porque todos pecaron...
Pues, hasta que llegó la ley había pecado en el mundo, pero el pecado no se imputaba porque no había ley. Pese a todo, la muerte reinó desde Adán hasta Moisés, incluso sobre los que no habían pecado con una transgresión como la de Adán, que era figura del que tenía que venir.
Sin embargo, no hay proporción entre el delito y el don: si por el delito de uno solo murieron todos, con mayor razón la gracia de Dios y el don otorgado en virtud de un hombre, Jesucristo, se han desbordado sobre todos.
Y tampoco hay proporción entre la gracia y el pecado de uno: pues el juicio, a partir de uno, acabó en condena, mientras que la gracia, a partir de muchos pecados, acabó en justicia.
Si por el delito de uno solo, la muerte inauguró su reinado a través de uno solo, con cuánta más razón los que reciben a raudales el don gratuito de la justificación reinarán en la vida gracias a uno solo, Jesucristo.
En resumen, lo mismo que por un solo delito resultó condena para todos, así también por un acto de justicia resultó justificación y vida para todos.
Pues, así como por la desobediencia de un solo hombre, todos fueron constituidos pecadores, así también por la obediencia de uno solo, todos serán constituidos justos.

GUÍA: La transgresión de uno   nos trajo el pecado. La gracia de otro nos trae la vida y el perdón de los pecados. Por él vivirán los que reciban su gracia. Concédenos recibir el derroche de tu amor  y el don de la justificación. Nos sentimos perdonados. SILENCIO DE AGRADECIMIENTO, CONTEMPLACIÓN, AMOR.

Del santo evangelio según san Mateo (4,1-11):

EN aquel tiempo, Jesús fue llevado al desierto por el Espíritu para ser tentado por el diablo. Y después de ayunar cuarenta días con sus cuarenta noches, al fin sintió hambre.
El tentador se le acercó y le dijo: «Si eres Hijo de Dios, di que estas piedras se conviertan en panes».
Pero él le contestó: «Está escrito: “No solo de pan vive el hombre, sino de toda palabra que sale de la boca de Dios”».
Entonces el diablo lo llevó a la ciudad santa, lo puso en el alero del templo y le dijo: «Si eres Hijo de Dios, tírate abajo, porque está escrito: “Ha dado órdenes a sus ángeles acerca de ti y te sostendrán en sus manos, para que tu pie no tropiece con las piedras”».
Jesús le dijo: «También está escrito: “No tentarás al Señor, tu Dios”».
De nuevo el diablo lo llevó a un monte altísimo y le mostró los reinos del mundo y su gloria, y le dijo: «Todo esto te daré, si te postras y me adoras».
Entonces le dijo Jesús: «Vete, Satanás, porque está escrito: “Al Señor, tu Dios, adorarás y a él solo darás culto”».
Entonces lo dejó el diablo, y he aquí que se acercaron los ángeles y lo servían.

GUÍA: Jesús fue llevado al desierto, ayuna cuarenta días y tiene hambre. En esa necesidad  es tentado: Que las piedras se conviertan en pan. Pero, no sólo de pan vive el hombre, sino de toda palabra que sale de Dios.
Luego: No tentarás al Señor tu Dios y a él sólo servirás. Al Señor adorarás. Tres grandes tentaciones. ¿Cómo sufrimos nosotros las tentaciones? ¿Cuáles nuestras respuestas? Padre Dios, líbranos del mal, no nos dejes caer en la tentación. SILENCIO DE CONFIANZA, DE FE, DE ADORACIÓN.

HACEMOS SÍNTESIS DE NUESTRA ORACIÓN: UNA FRASE NOS AYUDA A RECORDAR.

AGRADECEMOS, OFRECEMOS, PEDIMOS, ALABAMOS AL SEÑOR.

MARÍA NOS ACOMPAÑA, LA INVOCAMOS.

NOS DIRIGIMOS AL PADRE CON AMOR DE HIJOS: PADRE NUESTRO.

LETRA:         
                     
   El pueblo de Dios
El Pueblo de Dios por el desierto andaba/pero junto a él alguien caminaba.
El pueblo de Dios era rico en nada,/esperanza y polvo en sus pies llevaba.
También soy tu pueblo Señor, y estoy en la marcha/Tan solo tu gracia me basta y más nada.
El pueblo de Dios también vacilaba/y a veces costaba creer en el amor.
El pueblo de Dios llorando rezaba/pedía perdón y recomenzaba.
También... Perdona si a veces no creo ya en nada.
El pueblo de Dios también tuvo hambre/y tu le mandaste el pan desde el cielo.
El pueblo de Dios cantando dio gracias/probó tu amor, tu amor que no pasa.
También... Tú eres mi alimento en cada jornada.



viernes, 5 de abril de 2019

¡EL SEÑOR HA ESTADO GRANDE!

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¡ES SEÑOR HA ESTADO GRANDE!

GUÍA DE ORACIÓN 07-04-19

GUÍA: Buenos días, Señor. Estamos aquí. Somos tu pueblo, te escuchamos. Paz, alegría, amor son tus signos. Te acogemos en la paz del corazón y acogemos tu amor. Has sido grande con nosotros y estamos alegres. Valoramos tus acciones y hazañas a favor de tu pueblo. Te damos gracias por tu presencia en las cosas grandes y en las pequeñas. Estamos aquí admirando tus obras. SILENCIO DE ADMIRACIÓN, VALORACIÓN, DE GLORIA

Del libro de Isaías (43,16-21):

Esto dice el Señor, que abrió camino en el mar y una senda en las aguas impetuosas; que sacó a batalla carros y caballos, la tropa y los héroes: caían para no levantarse, se apagaron como mecha que se extingue. «No recordéis lo de antaño, no penséis en lo antiguo; mirad que realizo algo nuevo; ya está brotando, ¿no lo notáis? Abriré un camino por el desierto, corrientes en el yermo.
Me glorificarán las bestias salvajes, chacales y avestruces, porque pondré agua en el desierto, corrientes en la estepa, para dar de beber a mi pueblo elegido, a este pueblo que me he formado para que proclame mi alabanza».

GUÍA: El Señor abrió camino en el mar, nos libró del opresor, nos salvó de los enemigos. Isaías se lo recuerda al pueblo y también lo recordamos nosotros. Abrirá un camino por el desierto. Es la promesa del Señor. Algo nuevo está brotando. ¿Lo notamos?. Nos ponemos al alcance  de esos brotes nuevos y nos presentamos como esa tierra florecida. SILENCIO DE ESPERANZA, DE ACOGIDA Y PROMESA.

Lectura de la carta del apóstol san Pablo a los Filipenses (3,8-14):

Hermanos:
Todo lo considero pérdida comparado con la excelencia del conocimiento de Cristo Jesús, mi Señor.
Por él lo perdí todo, y todo lo considero basura con tal de ganar a Cristo y ser hallado en él, no con una
justicia mía, la de la ley, sino con la que viene de la fe de Cristo, la justicia que viene de Dios y se apoya en la fe.
Todo para conocerlo a él, y la fuerza de su resurrección, y la comunión con sus padecimientos, muriendo su misma muerte, con la esperanza de llegar a la resurrección de entre los muertos.
No es que ya haya conseguido o que ya sea perfecto: yo lo persigo, a ver si lo alcanzo como yo he sido alcanzado por Cristo.
Hermanos, yo no pienso haber conseguido el premio. Sólo busco una cosa: olvidándome de lo que queda atrás y lanzándome hacia lo que está por delante, corro hacia la meta, hacía el premio, al cual me llama Dios desde arriba en Cristo Jesús.

GUÍA: Estamos alegres por tu presencia. Tu ser nos acerca a ti y entre nosotros. Este momento de oración nos invita a sentirnos cerca y recibir tus palabras con alegría. Se extiende en cada uno de nosotros una justicia que viene de Dios y viene de la fe. Una esperanza: ser alcanzados por Cristo. Corremos hacia la meta: Dios en Cristo Jesús. Lo pensamos y verificamos en nuestra vida. SILENCIO DE FE, DE ESPERANZA DE VIDA Y DE ENCUENTRO EN SU AMOR.

Lectura del santo evangelio según san Juan (8,1-11):

En aquel tiempo, Jesús se retiró al monte de los Olivos. Al amanecer se presentó de nuevo en el templo, y todo el pueblo acudía a él, y, sentándose, les enseñaba.
Los escribas y los fariseos le traen una mujer sorprendida en adulterio, y, colocándola en medio, le dijeron:
- «Maestro, esta mujer ha sido sorprendida en flagrante adulterio. La ley de Moisés nos manda apedrear a las adúlteras; tú, ¿qué dices?».
Le preguntaban esto para comprometerlo y poder acusarlo.
Pero Jesús, inclinándose, escribía con el dedo en el suelo.
Como insistían en preguntarle, se incorporó y les dijo:
- «El que esté sin pecado, que le tire la primera piedra».
E inclinándose otra vez, siguió escribiendo.
Ellos, al oírlo, se fueron escabullendo uno a uno, empezando por los más viejos. Y quedó solo Jesús, con la mujer en medio, que seguía allí delante.
Jesús se incorporó y le preguntó:
- «Mujer, ¿dónde están tus acusadores?; ¿ninguno te ha condenado?».
Ella contestó:
- «Ninguno, Señor».
Jesús dijo:
- «Tampoco yo te condeno. Anda, y en adelante no peques más».


GUÍA: Presenciamos la escena de la mujer sorprendida en adulterio. Los fariseos y la gente la acusan. La mujer acusada. Jesús dice: El que está libre de pecado que tire la primera piedra. Todos se sienten implicados, también nosotros. Y queda la mujer ante Jesús. Sus palabras: Yo tampoco te condeno. Hemos acusado a otros. ¿Tiramos la primera piedra?. Jesús, ayúdanos a ponernos del lado de los débiles. Que no seamos jueces para otros. SILENCIO DE CONTEMPLACIÓN, DE EXAMEN, DE CONFIANZA.

SINTETIZAMOS NUESTRA ORACIÓN, UNA FRASE PARA RECORDAR.

PEDIMOS PERDÓN, AGRADECEMOS, INVOCAMOS AL ESPÍRITU.

MARÍA NUESTRA MADRE ESTÁ CERCA Y ACOMPAÑA.

NOS DIRIGIMOS AL PADRE CON LAS PALABRAS DE JESÚS: PADRE NUESTRO

CANTAMOS

Ant. : // El Señor ha estado grande
con nosotros, y estamos alegres. (Bis)
1. Cuando el Señor cambió la suerte de Sión,
nos parecía soñar:
La boca se nos llenaba de risas,
la lengua, de cantares,
2. Hasta los gentiles decían:
"El Señor ha estado
grande con ellos".
El Señor ha estado grande
con nosotros, y estamos alegres.
3. Que el Señor cambie nuestra suerte,
como los torrentes del Negueb.
Los que sembraban con lágrimas,
cosechan entre cantares.
4. Al ir, iban llorando,
llevando la semilla;
al volver, vuelven cantando,
trayendo sus gavillas.

https://www.youtube.com/watch?v=wCMsCF8HMuA


martes, 2 de abril de 2019

SEMILLAS MARZO 19

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SEMILLAS MARZO 19

Comentarios y oraciones del  MES DE MARZO. Entrada 4º Aniversario

La oración y silencio te llevarán  a interiorizar estas frases y aplicarlas a tu vida.
Visualiza tus sentimientos: Agradece, perdona, alaba a Dios, ofrece tu compromiso.
Únelo al sacrificio de Jesús en la Eucaristía.

La Eucaristía es la mejor forma de dar gracias a Dios. En ella Jesús se ofrece al Padre y nos da su pan como alimento para el camino de la vida. No faltemos a la cita.
"Maestro bueno, ¿Qué haré para heredar la vida eterna?" Se lo preguntamos como aquel joven. Escuchemos en el interior, su respuesta para nosotros: Darse a los pobres y estar con él, le dijo entonces.
"Miércoles de Ceniza" Conviértete y cree en el Evangelio. Estas palabras son camino par recorrer en la Cuaresma. Nos unimos para esta marcha hacia la Pascua. Oración, ayuno, limosna...reconciliación.
"Si alguno quiere venir en pos de mí, que coja su cruz y me siga". Coger la cruz es el ser de cada día. Seguirle es estar con él, acompañarle en su proyecto para Dios y para los hermanos. Confiamos en ti.
Día de la Mujer Trabajadora. Apoyamos la igualdad en el respeto. ¡Feliz día!
Cuaresma, tiempo de Dios. Que le dejemos actuar y no pongamos obstáculos a su gracia. Oración, ayuno, limosna, Eucaristía.
Hoy se nos habla de Jonás. No quería ir a Nínive. Al fin va, anuncia el mensaje de Dios, se convierten y Dios los perdona. ¿Qué nos dice esto? el perdón de Dios, la necesidad del anuncio, la obediencia de Jonás y nuestra...¿Dónde estamos nosotros?
"Si vosotros dais cosas buenas a vuestros hijos, ¿Cómo no dará Dios Padre cosas buenas a los que las piden" Nos paramos un momento ante Dios que nos ama como hijos y cuida de nosotros. Agradecemos su presencia y amor.
"Reconcíliate con tu hermano y luego vuelve a presentar tu ofrenda en el altar". Dios nos quiere reconciliados con él y con los hermanos. Preparemos ese encuentro o reencuentro. Estaremos en paz y felices.
"Sed perfectos como vuestro Padre celestial es perfecto" Un poco difícil... pero él puede ir transformando nuestro corazón, si se lo pedimos. Lo aceptamos hecho realidad.
"Sed misericordiosos, como vuestro padre es misericordioso. No juzguéis y no seréis juzgados" Jesús nos lo dice hoy. Escuchamos y actuamos.
Hoy San José. Le invocamos protector de la oración, del seminario, de los padres de familia, de la buena muerte, de las familias y algunos más... ¿Cuáles? Amigo y padre para Jesús nos enseña a ser humilde y obediente a Dios. ¿Le pedimos ayuda?
"Los grandes los oprimen ...no será así entre vosotros... El grande será servidor..." Que aprendamos la lección. ¿Verdad?
Hoy el padre espera al hijo que se ha ido de casa. Hoy nos espera a cada uno de nosotros. ¿Cómo respondemos? Volveré junto a mi padre?
"La salvación, la gloria y el poder son de nuestro Dios, porque sus juicios son verdaderos y justos" Una oración de alabanza y comprobación La hacemos nuestra.
"¿Cuántas veces he de perdonar? Jesús contesta: No siete, sino setenta veces siete", Es decir siempre. Es la forma de vivir en paz, día a día.
"Quien cumple los mandamientos y los enseña, será grande en el reino de los cielos". Jesús valora a quien enseña el camino del bien. ¿Nos vemos incluidos entre ellos?
"El que no está conmigo está contra mí; el que no recoge conmigo desparrama».Nos preguntamos si estamos con Jesús o no. Que confiando en su amor vayamos adelante con él.
El fariseo y el publicano van a orar al templo. El primero se cree mejor que los demás. el Segundo acude a la misericordia de Dios con humildad. Sólo éste salió justificado. ¿A cuál se parece nuestra oración?

ACCIÓN            


Cada frase tiene su valor.

El Espíritu de Dios se manifiesta en ella.



                Párate en cada una y escucha las resonancias en tu conciencia.




Escribe otra. Te gustará.