martes, 16 de abril de 2019

EVENTO ORACIÓN RC



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Hoy te presentamos un resumen del Evento de esta semana: Oración Grupo Reza y Comparte. pretendemos hacer la oración dirigidos por la Guía. Si sigues las indicaciones disfrutarás de la oración según se desarrolla. Ya me dirás tus impresiones.

1.       REZA Y Comparte compartió un enlace.
1 h · 
Hola, comenzamos el encuentro de oración Grupo Reza y comparte. Bienvenidos los que queréis acompañarnos.
En este día de Ramos, nos ponemos atentos al Espíritu y conectamos con la escena de la Entrada triunfal de Jesús en Jerusalén. en silencio tomamos conciencia de la presencia de Dios y nos sentimos hijos de tan buen Padre.


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Blog de oración y comunicación. Entra, te ayudará.
2.       REZA Y Comparte
56 min · 
Hacemos espacio al Rey que viene. Es el momento de avivar la fe, creer en él. Simplemente aceptarle y responder con palabras y sobre todo con hechos.

3.       REZA Y Comparte
53 min · 
La liturgia nos ayuda a vivir estos misterios. Jesús sobre un pollino entra en Jerusalén. Un rey humilde que viene en nombre del Señor. Nos unimos a la gente. Aclamamos a Jesús que está con el pueblo. tomamos conciencia de nuestra respuesta. Le presentamos nuestros deseos.

4.       REZA Y Comparte
49 min · 
" Nos sentimos súbditos de su reinado. Liberados de la esclavitud y gozosos de su victoria sobre el mal". Así estamos con él, realizamos la verdad en nosotros. Gracias Jesús.

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5.       REZA Y Comparte
45 min · 
Queremos estar contigo. Gloria, honor y alabanza al que viene en nombre del Señor. La oración nos da la oportunidad de estar un rato con Jesús y callar, o contarle nuestras preocupaciones.

6.       REZA Y Comparte
41 min · 
Silencio de gloria, de camino, de conversión. El camino nos ayuda a interiorizar quién es él y quiénes somos nosotros. El camino nos lleva a decisiones sencillas pero seguras. Hacemos camino con Jesús.

7.       REZA Y Comparte
35 min · 
"El Señor Dios me ha dado una lengua de discípulo; para saber decir al abatido una palabra de aliento" son palabras de Isaías. Se aplican a Jesús. y realmente Jesús hace uso de su lengua par curar, para decir al abatido una palabra de consuelo y sanación. Acogemos esa palabra dirigida a nosotros. Nos envuelve en su sentido y cercanía.

8.       REZA Y Comparte
30 min · 
El Señor Dios me abrió el oído; yo no resistí ni me eché atrás. Jesús reconoce al Padre y su camino para él. No se echa atrás. Contemplamos este momento de entrega, de presencia ante el Padre por parte de Jesús. Su silencio, su aceptación, su amor a la humanidad.

9.       REZA Y Comparte
24 min · 
"El Señor me ayuda, por eso no sentía los ultrajes; por eso endurecí el rostro como pedernal, sabiendo que no quedaría defraudado".Jesús lo hace en la oración del Huerto de los Olivos. Si es posible, Padre, aparta de mí este cáliz...pero que se haga como tú quieres. Nuestra posición es de admirar, contemplar, agradecer, ¿Qué te parece que puedes hacer tú?

18 min · 
" se despojó de si mismo tomando la condición de esclavo, hecho semejante a los hombres" dice San Pablo a los Filipenses. visualizamos a Jesús cerca de la gente, aclamado hoy y crucificado al poco tiempo. Una trayectoria tan distinta pero asumida por él para la salvación de la humanidad.

13 min · 

"toda lengua proclame: Jesucristo es Señor, para gloria de Dios Padre". Para el Padre y para los hermanos. Es el proyecto de Dios que cumple en su muerte y resurrección. Nos dejamos salvar, Le acogemos y a la vez compartimos su misión para salvar a otros. ¿Cómo podemos hacerlo? Seguro que hay cosas en las que podemos colaborar más y mejor.

5 min · 
«Padre, a tus manos encomiendo mi espíritu». Son palabras de Jesús en la cruz, en el momento de expirar. el Padre las acoge y al tercer día le devuelve a la vida. Confiamos en Jesús, confiamos en el Padre y en el Espíritu que hace nuevas todas las cosas. Nos ponemos en sus manos y recibimos su amor, su perdón, la nueva vida en Cristo. Silencio de confianza, de fe, de perdón.

3 min · 
Terminamos presentando nuestro corazón y persona en las palabras: Aquí estoy, Señor. Confío en ti.

3 min · 

Acompañamos a Jesús en la Eucaristía, escuchamos sus palabras, le contamos lo que necesitamos y necesita nuestro mundo. Saludos y Buena Semana.


viernes, 12 de abril de 2019

BENDITO EL REY QUE VIENE

REZA Y COMPARTE

BENDITO EL REY QUE VIENE

GUÍA DE ORACIÓN 14-04-19

GUÍA: Es en la oración donde hacemos espacio al Rey que viene. La liturgia nos ayuda a vivir estos misterios. Jesús sobre un pollino entra en Jerusalén. Un rey humilde que viene en nombre del Señor. Nos unimos a la gente. Aclamamos a Jesús. Nos sentimos súbditos de su reinado. Liberados de la esclavitud y gozosos de su victoria sobre el mal. Jesús, aquí estamos. Queremos estar contigo. SILENCIO DE GLORIA, DE CAMINO, DE CONVERSIÓN.

Del libro de Isaías (50,4-17):

El Señor Dios me ha dado una lengua de discípulo; para saber decir al abatido una palabra de aliento. Cada mañana me espabila el oído, para que escuche como los discípulos.
El Señor Dios me abrió el oído; yo no resistí ni me eché atrás. Ofrecí la espalda a los que me golpeaban, las mejillas a los que mesaban mi barba; no escondí el rostro ante ultrajes ni salivazos.
El Señor me ayuda, por eso no sentía los ultrajes; por eso endurecí el rostro como pedernal, sabiendo que no quedaría defraudado.

GUÍA: Bendito el que viene en nombre del Señor. Nuestra oración sigue acompañándote. Te vemos identificado con las palabras de Isaías: Yo no me resistí, ni me eché atrás. Contemplamos tu situación, estamos ahí contigo Nos alejamos de ti  con frecuencia. . Limpia nuestro pecado, conviértenos hacia el  Padre. SILENCIO DE ACLAMACIÓN, DE CONTEMPLACIÓN DE  PERDÓN.

De la carta del apóstol san Pablo a los Filipenses (2,6-11):

Cristo Jesús, siendo de condición divina, no retuvo ávidamente el ser igual a Dios; al contrario, se despojó de si mismo tomando la condición de esclavo, hecho semejante a los hombres.
Y así, reconocido como hombre por su presencia, se humilló a sí mismo, hecho obediente hasta la muerte, y una muerte de cruz.
Por eso Dios lo exaltó sobre todo y le concedió el Nombre-sobre-todo-nombre; de modo que al nombre de Jesús toda rodilla se doble en el cielo, en la tierra, en el abismo, y toda lengua proclame: Jesucristo es Señor, para gloria de Dios Padre.



GUÍA: Se despojó de sí mismo tomando condición de esclavo. Ahí muestras tu grandeza.  Te admiramos dispuesto a ser obediente al Padre. Nos unimos a tu obediencia. Reconocemos “tu nombre sobretodo nombre”. Acogemos  tu presencia salvadora y decimos: Jesucristo es el Señor,  para gloria de Dios Padre. SILENCIO DE ADMIRACIÓN DE UNIÓN Y DE RECONOCIMIENTO.
Pasión de nuestro Señor Jesucristo según san Lucas (22,14–23,56):

En aquel tiempo, los ancianos del pueblo, con los jefes de los sacerdotes y los escribas llevaron a Jesús a presencia de Pilato.
No encuentro ninguna culpa en este hombre
C. Y se pusieron a acusarlo diciendo
S. «Hemos encontrado que este anda amotinando a nuestra nación, y oponiéndose a que se paguen tributos
al César, y diciendo que él es el Mesías rey».
C. Pilatos le preguntó:
S. «¿Eres tú el rey de los judíos?».
C. El le responde:
+ «Tú lo dices».
C. Pilato dijo a los sumos sacerdotes y a la gente:
S. «No encuentro ninguna culpa en este hombre».
C. Toda la muchedumbre que había concurrido a este espectáculo, al ver las cosas que habían ocurrido, se volvía dándose golpes de pecho.
Todos sus conocidos y las mujeres que lo habían seguido desde Galilea se mantenían a distancia, viendo todo esto.
C. Pero ellos insitían con más fuerza, diciendo:
S. «Solivianta al pueblo enseñando por toda Judea, desde que comenzó en Galilea hasta llegar aquí».
C. Pilato, al oírlo, preguntó si el hombre era galileo; y, al enterarse de que era de la jurisdicción de Herodes,
que estaba precisamente en Jerusalén por aquellos días, se lo remitió.
Herodes, con sus soldados, lo trató con desprecio
C. Herodes, al ver a Jesús, se puso muy contento, pues hacía bastante tiempo que deseaba verlo, porque oía hablar de él y esperaba verle hacer algún milagro. Le hacía muchas preguntas con abundante verborrea; pero él no le contestó nada.
Estaban allí los sumos sacerdotes y los escribas acusándolo con ahínco.
Herodes, con sus soldados, lo trató con desprecio y, después de burlarse de él, poniéndole una vestidura blanca, se lo remitió a Pilato. Aquel mismo día se hicieron amigos entre sí Herodes y Pilato, porque antes estaban enemistados entre si.
Pilato entregó a Jesús a su voluntad 
. Pilato, después de convocar a los sumos sacerdotes, a los magistrados y al pueblo, les dijo:
S. «Me habéis traído a este hombre como agitador del pueblo; y resulta que yo lo he interrogado delante de vosotros y no he encontrado en este hombre ninguna de las culpas de que lo acusáis; pero tampoco Herodes, porque nos lo ha devuelto: ya veis que no ha hecho nada digno de muerte. Así que le daré un escarmiento y lo soltaré».
C. Ellos vociferaron en masa:
S. «¡Quita de en medio a ese! Suéltanos a Barrabás».
C. Este había sido metido en la cárcel por una revuelta acaecida en la ciudad y un homicidio.
Pilato volvió a dirigirles la palabra queriendo soltar a Jesús, pero ellos seguían gritando:
S. «¡Crucifícalo, crucifícalo!».
C. Por tercera vez les dijo:
S. «Pues ¿qué mal ha hecho este? No he encontrado en él ninguna culpa que merezca la muerte. Así que le daré un escarmiento y lo soltaré».
C. Pero ellos se le echaban encima, pidiendo a gritos que lo crucificara; e iba creciendo su griterío.
Pilato entonces sentenció que se realizara lo que pedían: soltó al que le reclamaban (al que había metido en la cárcel por revuelta y homicidio), y a Jesús se lo entregó a su voluntad.
Hijas de Jerusalén, no lloréis por mí.
C. Mientras lo conducían, echaron mano de un cierto Simón de Cirene, que volvía del campo, y le cargaron la cruz, para que la llevase detrás de Jesús.
Lo seguía un gran gentío del pueblo, y de mujeres que se golpeaban el pecho y lanzaban lamentos por él.
Jesús se volvió hacia ellas y les dijo:
+ «Hijas de Jerusalén, no lloréis por mí, llorad por vosotras y por vuestros hijos, porque mirad que vienen días en los que dirán: "Bienaventuradas las estériles y los vientres que no han dado a luz y los pechos que no han criado". Entonces empezarán a decirles a los montes: "Caed sobre nosotros", y a las colinas: "Cubridnos"; porque, si esto hacen con el leño verde, ¿que harán con el seco?».
C. Conducían también a otros dos malhechores para ajusticiarlos con él.
Padre, perdónalos, porque no saben lo que hacen
C. Y cuando llegaron al lugar llamado «La Calavera»,
 lo crucificaron allí, a él y a los malhechores, uno a la derecha y otro a la izquierda.
Jesús decía:+ «Padre, perdónalos, porque no saben lo que hacen».
C. Hicieron lotes con sus ropas y los echaron a suerte.
Este es el rey de los judíos
C. El pueblo estaba mirando, pero los magistrados le hacían muecas diciendo:
S. «A otros ha salvado; que se salve a sí mismo, si él es el Mesías de Dios, el Elegido».
C. Se burlaban de él también los soldados, que se acercaban y le ofrecían vinagre, diciendo:
S. «Si eres tú el rey de los judíos, sálvate a ti mismo».
C. Había también por encima de él un letrero: «Este es el rey de los judíos».
Hoy estarás conmigo en el paraíso
C. Uno de los malhechores crucificados lo insultaba diciendo:
S. «¿No eres tú el Mesías? Sálvate a ti mismo y a nosotros».
C. Pero el otro, respondiéndole e increpándolo, le decía:
S. «¿Ni siquiera temes tú a Dios, estando en la misma condena? Nosotros, en verdad, lo estamos justamente, porque recibimos el justo pago de lo que hicimos; en cambio, este no ha hecho nada».
C. Y decía:
S. «Jesús, acuérdate de mí cuando llegues a tu reino».
C. Jesús le dijo:
+ «En verdad te digo: hoy estarás conmigo en el paraíso».
Padre, a tus manos encomiendo mi espíritu
C. Era ya como la hora sexta, y vinieron las tinieblas sobre toda la tierra, hasta la hora nona, porque se oscureció el sol. El velo del templo se rasgó por medio. Y Jesús, clamando con voz potente, dijo:
+ «Padre, a tus manos encomiendo mi espíritu».
C. Y, dicho esto, expiró.
Todos se arrodillan, y se hace una pausa
C. El centurión, al ver lo ocurrido, daba gloria a Dios diciendo:
S. «Realmente, este hombre era justo».

GUÍA:  Las escenas se suceden: Traición, acusación, condena, camino del calvario, crucifixión. ¿Qué parte ponemos en cada una de ellas?  Nuestro pecado ha caído sobre ti. No merecemos ser llamados hijos. Cambia nuestro corazón .  Te acompañamos, aceptamos tu perdón y misericordia.
Danos fe para confesarte, amor para quererte, fortaleza para  estar contigo.  SILENCIO DE FE, DE AMOR, DE COMPROMISO.

RECOGEMOS NUESTRA ORACIÓN CON UNA FRASE PARA RECORDAR.

CON EL ESPÍRITU CONFIAMOS, DAMOS GRACIAS, OFRECEMOS

INVOCAMOS A MARÍA, MADRE QUE ENSEÑA.

NOS DIRIGIMOS AL PADRE CON LA ORACIÓN DE  JESÚS: PADRE NUESTRO

CANTAMOS

¡Qué alegría cuando me dijeron:
Vamos a la casa del Señor.
Ya están pisando nuestros pies,
 Tus umbrales, Jerusalén!

Jerusalén está fundada,
como ciudad bien compacta.
Allá suben las tribus,
 las tribus del Señor.

Según la costumbre de Israel,
 a celebrar  el nombre del Señor.
 En ella están los tribunales de justicia,
 en el palacio de David.
  

martes, 9 de abril de 2019

POESÍA: ALÉGRATE, DIOS ES ALEGRÍA



REZA Y COMPARTE
POESÍA
ALÉGRATE, DIOS ES ALEGRÍA

María Navarro descubre la alegría de Dios. Descúbrela tú.

Voy a contar y a cantar,
la alegría de Dios,
en el grano de mostaza,
es la semilla pequeña
que se hace la más grande.
Dios se alegra en lo pequeño.
Voy a cantar la bondad y la justicia
crece en el corazón de las personas.
Voy a exultar de gozo y alegría,
porque una moneda se había perdido
y más tarde fue encontrada.
Voy
 a cantar y a reír,
porque el sol brilla cada mañana,
y su luz nos ayuda a ver
el brote de una hoja.
Voy a dejarme tocar el corazón
por la sonrisa de los niños,
a través de ellos Dios me sonríe
y me llena de cariño.
Voy a mirar con ojos nuevos
ese acontecer de la vida,
en las gotas de lluvia
en el beso de los que se aman,
en el silencio de quien no habla,
en la caricia del viento
que roza mi cara
y en 
la mirada callada.
Voy a gozar del momento,
de una fiesta celebrada,
del abrazo que me llega
en la visita inesperada
del cariño y la sonrisa
y de una noche estrellada.
Voy a vivir este día
con el alma enamorada
de la mirada de Dios,
que contempla mi jornada.
María

REFLEXIÓN

“ALÉGRATE, DIOS ES ALEGRÍA”
                   
DIGO QUE…
                                         DICEN QUE…

          JESÚS DESCUBRE LA ALEGRÍA DE DIOS EN ALGUNAS DE ESTAS COSAS, ¿CUÁLES?


viernes, 5 de abril de 2019

¡EL SEÑOR HA ESTADO GRANDE!

REZA Y COMPARTE

¡ES SEÑOR HA ESTADO GRANDE!

GUÍA DE ORACIÓN 07-04-19

GUÍA: Buenos días, Señor. Estamos aquí. Somos tu pueblo, te escuchamos. Paz, alegría, amor son tus signos. Te acogemos en la paz del corazón y acogemos tu amor. Has sido grande con nosotros y estamos alegres. Valoramos tus acciones y hazañas a favor de tu pueblo. Te damos gracias por tu presencia en las cosas grandes y en las pequeñas. Estamos aquí admirando tus obras. SILENCIO DE ADMIRACIÓN, VALORACIÓN, DE GLORIA

Del libro de Isaías (43,16-21):

Esto dice el Señor, que abrió camino en el mar y una senda en las aguas impetuosas; que sacó a batalla carros y caballos, la tropa y los héroes: caían para no levantarse, se apagaron como mecha que se extingue. «No recordéis lo de antaño, no penséis en lo antiguo; mirad que realizo algo nuevo; ya está brotando, ¿no lo notáis? Abriré un camino por el desierto, corrientes en el yermo.
Me glorificarán las bestias salvajes, chacales y avestruces, porque pondré agua en el desierto, corrientes en la estepa, para dar de beber a mi pueblo elegido, a este pueblo que me he formado para que proclame mi alabanza».

GUÍA: El Señor abrió camino en el mar, nos libró del opresor, nos salvó de los enemigos. Isaías se lo recuerda al pueblo y también lo recordamos nosotros. Abrirá un camino por el desierto. Es la promesa del Señor. Algo nuevo está brotando. ¿Lo notamos?. Nos ponemos al alcance  de esos brotes nuevos y nos presentamos como esa tierra florecida. SILENCIO DE ESPERANZA, DE ACOGIDA Y PROMESA.

Lectura de la carta del apóstol san Pablo a los Filipenses (3,8-14):

Hermanos:
Todo lo considero pérdida comparado con la excelencia del conocimiento de Cristo Jesús, mi Señor.
Por él lo perdí todo, y todo lo considero basura con tal de ganar a Cristo y ser hallado en él, no con una
justicia mía, la de la ley, sino con la que viene de la fe de Cristo, la justicia que viene de Dios y se apoya en la fe.
Todo para conocerlo a él, y la fuerza de su resurrección, y la comunión con sus padecimientos, muriendo su misma muerte, con la esperanza de llegar a la resurrección de entre los muertos.
No es que ya haya conseguido o que ya sea perfecto: yo lo persigo, a ver si lo alcanzo como yo he sido alcanzado por Cristo.
Hermanos, yo no pienso haber conseguido el premio. Sólo busco una cosa: olvidándome de lo que queda atrás y lanzándome hacia lo que está por delante, corro hacia la meta, hacía el premio, al cual me llama Dios desde arriba en Cristo Jesús.

GUÍA: Estamos alegres por tu presencia. Tu ser nos acerca a ti y entre nosotros. Este momento de oración nos invita a sentirnos cerca y recibir tus palabras con alegría. Se extiende en cada uno de nosotros una justicia que viene de Dios y viene de la fe. Una esperanza: ser alcanzados por Cristo. Corremos hacia la meta: Dios en Cristo Jesús. Lo pensamos y verificamos en nuestra vida. SILENCIO DE FE, DE ESPERANZA DE VIDA Y DE ENCUENTRO EN SU AMOR.

Lectura del santo evangelio según san Juan (8,1-11):

En aquel tiempo, Jesús se retiró al monte de los Olivos. Al amanecer se presentó de nuevo en el templo, y todo el pueblo acudía a él, y, sentándose, les enseñaba.
Los escribas y los fariseos le traen una mujer sorprendida en adulterio, y, colocándola en medio, le dijeron:
- «Maestro, esta mujer ha sido sorprendida en flagrante adulterio. La ley de Moisés nos manda apedrear a las adúlteras; tú, ¿qué dices?».
Le preguntaban esto para comprometerlo y poder acusarlo.
Pero Jesús, inclinándose, escribía con el dedo en el suelo.
Como insistían en preguntarle, se incorporó y les dijo:
- «El que esté sin pecado, que le tire la primera piedra».
E inclinándose otra vez, siguió escribiendo.
Ellos, al oírlo, se fueron escabullendo uno a uno, empezando por los más viejos. Y quedó solo Jesús, con la mujer en medio, que seguía allí delante.
Jesús se incorporó y le preguntó:
- «Mujer, ¿dónde están tus acusadores?; ¿ninguno te ha condenado?».
Ella contestó:
- «Ninguno, Señor».
Jesús dijo:
- «Tampoco yo te condeno. Anda, y en adelante no peques más».


GUÍA: Presenciamos la escena de la mujer sorprendida en adulterio. Los fariseos y la gente la acusan. La mujer acusada. Jesús dice: El que está libre de pecado que tire la primera piedra. Todos se sienten implicados, también nosotros. Y queda la mujer ante Jesús. Sus palabras: Yo tampoco te condeno. Hemos acusado a otros. ¿Tiramos la primera piedra?. Jesús, ayúdanos a ponernos del lado de los débiles. Que no seamos jueces para otros. SILENCIO DE CONTEMPLACIÓN, DE EXAMEN, DE CONFIANZA.

SINTETIZAMOS NUESTRA ORACIÓN, UNA FRASE PARA RECORDAR.

PEDIMOS PERDÓN, AGRADECEMOS, INVOCAMOS AL ESPÍRITU.

MARÍA NUESTRA MADRE ESTÁ CERCA Y ACOMPAÑA.

NOS DIRIGIMOS AL PADRE CON LAS PALABRAS DE JESÚS: PADRE NUESTRO

CANTAMOS

Ant. : // El Señor ha estado grande
con nosotros, y estamos alegres. (Bis)
1. Cuando el Señor cambió la suerte de Sión,
nos parecía soñar:
La boca se nos llenaba de risas,
la lengua, de cantares,
2. Hasta los gentiles decían:
"El Señor ha estado
grande con ellos".
El Señor ha estado grande
con nosotros, y estamos alegres.
3. Que el Señor cambie nuestra suerte,
como los torrentes del Negueb.
Los que sembraban con lágrimas,
cosechan entre cantares.
4. Al ir, iban llorando,
llevando la semilla;
al volver, vuelven cantando,
trayendo sus gavillas.

https://www.youtube.com/watch?v=wCMsCF8HMuA