viernes, 22 de julio de 2016

ORACIÓN 24-07-16



GUÍA: Domingo 17 del Tiempo Ordinario C. Estamos ante Tí, Señor. Un nuevo día nos llama a tu presencia. Tú acompañas nuestras vidas y las sacias de tu misericordia. Acogemos tu presencia y tu palabra. Ven Espíritu de Dios, ilumina nuestra oración, Jesús, contigo invocamos al Padre y nos sentimos hijos. Hagamos nuestros estos sentimientos y nos preparamos para el encuentro con la Palabra. SILENCIO DE ACOGIDA, DE ENCUENTRO FILIAL, DE AMOR AGRADECIDO.

Del libro del Génesis (18,20-32):

Abrahán se acercó y dijo a Dios: «¿Es que vas a destruir al inocente con el culpable? Si hay cincuenta inocentes en la ciudad, ¿los destruirás y no perdonarás al lugar por los cincuenta inocentes que hay en él? ¡Lejos de ti hacer tal cosa!, matar al inocente con el culpable, de modo que la suerte del inocente sea como la del culpable; ¡lejos de ti! El juez de todo el mundo, ¿no hará justicia?»
El Señor contestó: «Si encuentro en la ciudad de Sodoma cincuenta inocentes, perdonaré a toda la ciudad en atención a ellos.» Abrahán respondió: «Me he atrevido a hablar a mi Señor, yo que soy polvo y ceniza. Si faltan cinco para el número de cincuenta inocentes, ¿destruirás, por cinco, toda la ciudad?»
...
Abrahán continuó: «Que no se enfade mi Señor si hablo una vez más. ¿Y si se encuentran diez?»
Contestó el Señor: «En atención a los diez, no la destruiré.»

GUÍA: Nos hablas de tu misericordia. En atención a los justos no destruirás la ciudad.Gracias, Señor, por tu amor. Tienes en cuenta a los justos aunque eres Tú quien regala la justicia, al ser humano. ¿Con quién nos identificamos? ¿Seremos como Abrahán que immplora perdón para los alejados,los culpables?  A veces se habla de faros en la noche como imagen de los inocentes frente a los culpables. Nuestro mundo necesita esos faros que iluminan, que alejan las tinieblas y el mal, por medio de los cuales Dios cambia su ira y perdona.Imaginemos cantidad de faros luminosos que atraen la mirada misericordiosa de Dios y el perdón. Sintámonos perdonados y aportemos algo de luz, para que todos lleguen al conocimiento de la Verdad. SILENCIO AGRADECIDO, ABIERTO A LA LUZ, ILUMINADOR.

De la carta del apóstol san Pablo a los Colosenses (2,12-14):

Por el bautismo fuisteis sepultados con Cristo, y habéis resucitado con él, porque habéis creído en la fuerza de Dios que lo resucitó de entre los muertos. Estabais muertos por vuestros pecados, porque no estabais circuncidados; pero Dios os dio vida en él, perdonándoos todos los pecados. Borró el protocolo que nos condenaba con sus cláusulas y era contrario a nosotros; lo quitó de en medio, clavándolo en la cruz.

GUÍA: Con san Pablo reconocemos la acción de Dios en el creyente. Sepultados con Cristo, somos resucitados con él por la fe en su resurrección, por la fe en la fuerza de Dios. Perdona nuestros pecados y nos llama a la vida del resucitado. Hacemos eco de estos pasos en nuestro interior. EN SILENCIO reconocemos la acción de Dios, dador de plenitud. Adoramos y agradecemos. 

Del santo evangelio según san Lucas (11,1-13):

Una vez que estaba Jesús orando en cierto lugar, cuando terminó, uno de sus discípulos le dijo: «Señor, enséñanos a orar, como Juan enseñó a sus discípulos.»
Él les dijo: «Cuando oréis decid: "Padre, santificado sea tu nombre, venga tu reino, danos cada día nuestro pan del mañana, perdónanos nuestros pecados, porque también nosotros perdonamos a todo el que nos debe algo, y no nos dejes caer en la tentación."»
Y les dijo: «Si alguno de vosotros tiene un amigo, y viene durante la medianoche para decirle: "Amigo, préstame tres panes, pues uno de mis amigos ha venido de viaje y no tengo nada que ofrecerle." Y, desde dentro, el otro le responde: "No me molestes; la puerta está cerrada; mis niños y yo estamos acostados; no puedo levantarme para dártelos." Si el otro insiste llamando, yo os digo que, si no se levanta y se los da por ser amigo suyo, al menos por la importunidad se levantará y le dará cuanto necesite. Pues así os digo a vosotros: Pedid y se os dará, buscad y hallaréis, llamad y se os abrirá; porque quien pide recibe, quien busca halla, y al que llama se le abre. ¿Qué padre entre vosotros, cuando el hijo le pide pan, le dará una piedra? ¿O si le pide un pez, le dará una serpiente? ¿O si le pide un huevo, le dará un escorpión? Si vosotros, pues, que sois malos, sabéis dar cosas buenas a vuestros hijos, ¿cuánto más vuestro Padre celestial dará el Espíritu Santo a los que se lo piden?»

GUÍA: En la oración de Jesús encontramos el amor al Padre, darle gloria, buscar su reino. Se fija en las necesidades de cada día. Nos enseña a reconocer nuestros pecados, pedir perdón y perdonar. Pide que nos libre del mal. Detengámonos en cada una de las partes y sintiéndonos hijos de Dios, hermanos entre nosotros, abramos el corazón a la esperanza.  El Padre está dispuesto a dar su Espíritu al que se lo  pida. Pidamos ese don tan preciado. SILENCIO CONFIADO, AMOROSO, FIEL.

SÍNTESIS DE NUESTRA ORACIÓN

AGRADECEMOS AL ESPÍRITU

PEDIMOS

PADRE NUESTRO con Jesús y toda la humanidad.

CANTAMOS


Padre nuestro tu que estás
en los que aman la verdad,
has que el reino que por Ti se dio
llegue pronto a nuestro corazón,
que el amor, que tu hijo,
nos dejó, ese amor...
habite en nosotros.

(Se reza la oración tradicional del Padre Nuestro)

Y en el pan de la unidad,
Cristo danos Tu la paz
y olvidate de nuestro mal,
si olvidamos el de los demás,
no permitas, que caigamos
en tentación...
oh señor...
y ten piedad...
del mundo.

viernes, 15 de julio de 2016

ORACIÓN 17-07-16





GUÍA: Gracias, Señor por tus misericordias, me cercan en número mayor que las arenas de los anchos mares. Podemos hacer nuestras estas palabras de una canción. Al comenzar nuestra oración, nos ponemos ante el Señor y reconocemos su acción en nuestra vida y en el mundo. Agradecemos su presencia y le pedimos nos acompañe en este encuentro con Él. Jesús, Hijo de Dios, te bendecimos y alabamos. Espíritu santo ilumina nuestra mente y nuestro corazón para reconocerte y estar junto a Tí. SILENCIO ADORADOR, AGRADECIDO, ABIERTO A LA VOZ DE DIOS. 

Del libro del Génesis (18,1-10a):

En aquellos días, el Señor se apareció a Abrahán junto a la encina de Mambré, mientras él estaba sentado a la puerta de la tienda, porque hacía calor. Alzó la vista y vio a tres hombres en pie frente a él.
Al verlos, corrió a su encuentro desde la puerta de la tienda y se prosternó en tierra, diciendo: «Señor, si he alcanzado tu favor, no pases de largo junto a tu siervo. Haré que traigan agua para que os lavéis los pies y descanséis junto al árbol. Mientras, traeré un pedazo de pan para que cobréis fuerzas antes de seguir, ya que habéis pasado junto a vuestro siervo.»
Contestaron: «Bien, haz lo que dices.» 
Abrahán entró corriendo en la tienda donde estaba Sara y le dijo: «Aprisa, tres cuartillos de flor de harina, amásalos y haz una hogaza.» 
Él corrió a la vacada, escogió un ternero hermoso y se lo dio a un criado para que lo guisase en seguida. Tomó también cuajada, leche, el ternero guisado y se lo sirvió. Mientras él estaba en pie bajo el árbol, ellos comieron. 


Después le dijeron: «¿Dónde está Sara, tu mujer?»
Contestó: «Aquí, en la tienda.» 
Añadió uno: «Cuando vuelva a ti, dentro del tiempo de costumbre, Sara habrá tenido un hijo.» 


GUÍA: Abrahán recibe al Señor en esos tres hombres.Se esmera en hospedarlos. El Señor les promete un hijo.Puede ser una imagen de lo oración del creyente. Dios que viene, le recibimos y agasajamos, Él se nos entrega en su promesa y su presencia.Estudiemos cómo son estos pasos en nuestro encuentro.Cuál nuestra actitud y cuál la promesa y acción del Señor. Gracias Padre, Hijo y Espíritu,haz que te reconozcamos,te alabemos y recibamos tu promesa. SILENCIO ORANTE, DISPONIBLE.

De la carta del apóstol san Pablo a los Colosenses (1,24-28):

Ahora me alegro de sufrir por vosotros: así completo en mi carne los dolores de Cristo, sufriendo por su cuerpo que es la Iglesia, de la cual Dios me ha nombrado ministro, asignándome la tarea de anunciaros a vosotros su mensaje completo: el misterio que Dios ha tenido escondido desde siglos y generaciones y que ahora ha revelado a sus santos. A éstos ha querido Dios dar a conocer la gloria y riqueza que este misterio encierra para los gentiles: es decir, que Cristo es para vosotros la esperanza de la gloria. Nosotros anunciamos a ese Cristo; amonestamos a todos, enseñamos a todos, con todos los recursos de la sabiduría, para que todos lleguen a la madurez en su vida en Cristo.


GUÍA: San Pablo está dedicado al anuncio de Jesús Resucitado. Completa en sí mismo los dolores de Cristo, añadiendo su vida entregada y sus dolores. Todos somos llamados a unirnos a Cristo con nuestra vida actual. Completamos la Pasión de cristo con nuestro ser y vivir, unidos a Él.Nuestras palabras y acciones en favor de la evangelización, acompañan a Pablo y a todos los cristianos pero en la fuente que es Cristo.SILENCIO DE INTERIORIZACIÓN,CREYENTE.

Del santo evangelio según san Lucas (10, 38-42):

En aquel tiempo, entró Jesús en una aldea, y una mujer llamada Marta lo recibió en su casa. Ésta tenía una hermana llamada Maria, que, sentada a los pies del Señor, escuchaba su palabra. 
Y Marta se multiplicaba para dar abasto con el servicio; hasta que se paró y dijo: «Señor, ¿no te importa que mi hermana me haya dejado sola con el servicio? Dile que me eche una mano.» 
Pero el Señor le contestó: «Marta, Marta, andas inquieta y nerviosa con tantas cosas; sólo una es necesaria. María ha escogido la parte mejor, y no se la quitarán.»  


GUÍA: Jesús visita a Marta y a María.Las dos le reciben. Una prepara lo necesario y la otra le escucha, le atiende. Las dos cosas son necesarias. Jesús ve la forma de actuar de cada una. Ante la queja de Marta, Jesús disculpa a María y reconoce que ha escogido la mejor parte.En nuestra oración y en nuestra vida habrá momentos de Marta y de María. Escuchar al Señor y atender sus palabras nos hará activos y contemplativos. SILENCIO QUE ESCUCHA Y PONE EN PRÁCTICA.

RECOPILAMOS LA ORACIÓN.

SACAMOS CONCLUSIONES.AGRADECEMOS.

COMPARTIMOS.

CANTAMOS

Gracias, Señor por tus misericordias 
que me cercan en número mayor, 
que las arenas de los anchos mares, 
y que los rayos de la luz del sol.
Porque yo no existía y me creaste, 
porque me amaste sin amarte yo, 
porque antes de nacer me redimiste...
¡Gracias Señor!

jueves, 7 de julio de 2016

ORACIÓN 10-07- 16


GUÍA: Es el domingo 15 Tiempo Ordinario, Ciclo C. El encuentro con Jesús hoy nos hace acercarnos a la Palabra y dejamos que nuestro ser se impregne totalmente. En el silencio, avivamos la fe y comprendemos que se entrega a nosotros para que le reconozcamos  y seamos sus amigos. ¿Nos sentimos creyentes, confiados y obedientes? Preparamos nuestra escucha. SILENCIO DE ACOGIDA A JESÚS QUE NOS ACOGE.

Lectura del libro del Deuteronomio (30,10-14):

Moisés habló al pueblo, diciendo: «Escucha la voz del Señor, tu Dios, guardando sus preceptos y mandatos, lo que está escrito en el código de esta ley; conviértete al Señor, tu Dios, con todo el corazón y con toda el alma. Porque el precepto que yo te mando hoy no es cosa que te exceda, ni inalcanzable; no está en el cielo, no vale decir: "¿Quién de nosotros subirá al cielo y nos lo traerá y nos lo proclamará, para que lo cumplamos?"; ni está más allá del mar, no vale decir: "¿Quién de nosotros cruzará el mar y nos lo traerá y nos lo proclamará, para que lo cumplamos?" El mandamiento está muy cerca de ti: en tu corazón y en tu boca. Cúmplelo.»

GUÍA: Escuchamos la voz del Señor en este rato de oración ¿Qué nos sugiere? Moisés dice al pueblo que escuche y guarde sus preceptos y mandatos. El tiempo pasa y nos lleva tras él. El mandamiento está en tu corazón y tu boca. Cúmplelo. Si oímos la Palabra de Dios, Pidamos al Espíritu que active nuestro oído, para poder comprenderlo. Dejemos espacio para la acogida y para estudiar la forma de practicarlo. Si estáis conmigo, yo estaré con vosotros y el fruto será verdadero. Analicemos nuestro estar con Jesús y nuestros frutos. SILENCIO DE AMISTAD Y ENCUENTRO.

Lectura de la carta del apóstol san Pablo a los Colosenses (1,15-20):

Cristo Jesús es imagen de Dios invisible, primogénito de toda criatura; porque por medio de él fueron creadas todas las cosas: celestes y terrestres, visibles e invisibles, Tronos, Dominaciones, Principados, Potestades; todo fue creado por él y para él. Él es anterior a todo, y todo se mantiene en él. Él es también la cabeza del cuerpo: de la Iglesia. Él es el principio, el primogénito de entre los muertos, y así es el primero en todo. Porque en él quiso Dios que residiera toda la plenitud. Y por él quiso reconciliar consigo todos los seres: los del cielo y los de la tierra, haciendo la paz por la sangre de su cruz.
GUÍA: San Pablo escribe a los Colosenses. Presenta lo que ha recibido de Jesús. Primogénito de toda criatura. Todo se mantiene en él. Dios quiso que residiera en él toda la plenitud. En él se crean todas las cosas. Cabeza del cuerpo de la Iglesia.  Cada una de estas  afirmaciones nos ayuda a conocerle mejor, a profundizar. SILENCIO  VALORATIVO, MEDITATIVO.

Lectura del santo evangelio según san Lucas (10,25-37):

En aquel tiempo, se presentó un maestro de la Ley y le preguntó a Jesús para ponerlo a prueba: «Maestro, ¿qué tengo que hacer para heredar la vida eterna?»
Él le dijo: «¿Qué está escrito en la Ley? ¿Qué lees en ella?» 
Él contestó: «Amarás al Señor, tu Dios, con todo tu corazón y con toda tu alma y con todas tus fuerzas y con todo tu ser. Y al prójimo como a ti mismo.» 
Él le dijo: «Bien dicho. Haz esto y tendrás la vida.» 
Pero el maestro de la Ley, queriendo justificarse, preguntó a Jesús: «¿Y quién es mi prójimo?» 
Jesús dijo: «Un hombre bajaba de Jerusalén a Jericó, cayó en manos de unos bandidos, que lo desnudaron, lo molieron a palos y se marcharon, dejándolo medio muerto. Por casualidad, un sacerdote bajaba por aquel camino y, al verlo, dio un rodeo y pasó de largo. Y lo mismo hizo un levita que llegó a aquel sitio: al verlo dio un rodeo y pasó de largo. Pero un samaritano que iba de viaje, llegó a donde estaba él, y, al verlo, le dio lástima, se le acercó, le vendó las heridas, echándoles aceite y vino, y, montándolo en su propia cabalgadura, lo llevó a una posada y lo cuidó. Al día siguiente, sacó dos denarios y, dándoselos al posadero, le dijo: "Cuida de él, y lo que gastes de más yo te lo pagaré a la vuelta." ¿Cuál de estos tres te parece que se portó como prójimo del que cayó en manos de los bandidos?» 
Él contestó: «El que practicó la misericordia con él.» 
Díjole Jesús: «Anda, haz tú lo mismo.»

GUÍA: La parábola del Samaritano recoge con detalles todo lo que la persona comprometida lleva a cabo. Unos pasan de largo pero él le recoge, le lleva a la posada, paga los gastos. Se encarga de de aquel hombre. ¿Con cuál de los personajes  podemos  identificarnos? ¿Nos hacemos cargo de la persona que está a nuestro lado y salimos al paso de sus necesidades? Ya preguntó Dios a Caín ¿Dónde está tu hermano? Dejémonos preguntar y vayamos viendo las respuestas que damos. SILENCIO DE BÚSQUEDA Y COMPROMISO.

RECOGEMOS los sentimientos de la oración.

OFRECEMOS las respuestas.

PETICIONES

PADRE NUESTRO con Jesús y María


               CANTAMOS

Danos un corazón grande para amar,
danos un corazón fuerte para luchar.
 1. Hombres nuevos, creadores de la historia,
constructores de nueva humanidad;
 hombres nuevos que viven la existencia,
 como riesgo de un largo caminar.
 2. Hombres nuevos luchando en esperanza,
caminantes sedientos de verdad.
 Hombres nuevos, sin frenos ni cadenas,
hombres libres que exigen libertad.
 3. Hombres nuevos, amando sin fronteras,
 por encima de razas y lugar.
Hombres nuevos, al lado de los pobres,

 compartiendo con ellos techo y pan....


viernes, 1 de julio de 2016

ORACIÓN 03-07-16









GUÍA: Domingo 14 Ciclo C.
 Una semana envueltos en las lecturas del domingo y en el ambiente de la llamada. Hemos ido haciendo eco a sus palabras en el día a día y con  los comentarios de los que participan.  Hoy de nuevo nos encontramos ante Ti, Jesús. El silencio nos cubre y anima a estar junto a Ti, a conocerte un poco más. Todo es gracia por tu parte: la acogida y el don. El Espíritu es quien actúa y se nos comunica. HAGAMOS SILENCIO DE ADORACIÓN, DE APERTURA A LA GRACIA Y AL DON DE DIOS.De la profecía de Isaías (66,10-14c):

Festejad a Jerusalén, gozad con ella, todos los que la amáis, alegraos de su alegría, los que por ella llevasteis luto. Mamaréis a sus pechos y os saciaréis de sus consuelos, y apuraréis las delicias de sus ubres abundantes. Porque así dice el Señor: «Yo haré derivar hacia ella, como un río, la paz, como un torrente en crecida, las riquezas de las naciones. Llevarán en brazos a sus criaturas y sobre las rodillas las acariciarán; como a un niño a quien su madre consuela, así os consolaré yo, y en Jerusalén seréis consolados. Al verlo, se alegrará vuestro corazón, y vuestros huesos florecerán como un prado; la mano del Señor se manifestará a sus siervos.»

GUÍA: Jerusalén, la amada del Señor, está de fiesta. El Señor dirige hacia ella las riquezas de las naciones, sus hijos serán consolados, sus huesos florecerán como un prado. Toda la imagen representa el amor de Dios a su pueblo. Traslademos los hechos a la realidad de nuestro mundo, a la realidad de nosotros mismos. Dejemos que su amor nos acompañe. Dios ama a su pueblo y le defiende. EN NUESTRO SILENCIO VISUALIZAMOS TODO ESE AMOR A NOSOTROS Y A CADA UNA DE SUS CRIATURAS. AGRADEZCAMOS.

De la carta de san Pablo a los Gálatas (6,14-18):

Dios me libre de gloriarme si no es en la cruz de nuestro Señor Jesucristo, en la cual el mundo está crucificado para mí, y yo para el mundo. Pues lo que cuenta no es circuncisión o incircuncisión, sino una criatura nueva. La paz y la misericordia de Dios vengan sobre todos los que se ajustan a esta norma; también sobre el Israel de Dios. En adelante, que nadie me venga con molestias, porque yo llevo en mi cuerpo las marcas de Jesús. La gracia de nuestro Señor Jesucristo esté con vuestro espíritu, hermanos. Amén.
GUÍA: Una criatura nueva es lo importante en nuestra vida. Pablo ha cambiado. La paz y la misericordia vengan sobre todos los salvados en Cristo. La fe en Jesús va transformando la vida del creyente. ¿Aplicado a nuestra vida vemos esta realidad y transformación? SILENCIO DE AMISTAD, DE COMPROMISO.

Del santo evangelio según san Lucas (10,1-12.17-20):

En aquel tiempo, designó el Señor otros setenta y dos y los mandó por delante, de dos en dos, a todos los pueblos y lugares adonde pensaba ir él. Y les decía: «La mies es abundante y los obreros pocos; rogad, pues, al dueño de la mies que mande obreros a su mies. ¡Poneos en camino! Mirad que os mando como corderos en medio de lobos. No llevéis talega, ni alforja, ni sandalias; y no os detengáis a saludar a nadie por el camino. Cuando entréis en una casa, decid primero: "Paz a esta casa." Y si allí hay gente de paz, descansará sobre ellos vuestra paz; si no, volverá a vosotros. Quedaos en la misma casa, comed y bebed de lo que tengan, porque el obrero merece su salario. No andéis cambiando de casa. Si entráis en un pueblo y os reciben bien, comed lo que os pongan, curad a los enfermos que haya, y decid: "Está cerca de vosotros el reino de Dios." Cuando entréis en un pueblo y no os reciban, salid a la plaza y decid: "Hasta el polvo de vuestro pueblo, que se nos ha pegado a los pies, nos lo sacudimos sobre vosotros. De todos modos, sabed que está cerca el reino de Dios." Os digo que aquel día será más llevadero para Sodoma que para ese pueblo.»
Los setenta y dos volvieron muy contentos y le dijeron: «Señor, hasta los demonios se nos someten en tu nombre.»
Él les contestó: «Veía a Satanás caer del cielo como un rayo. Mirad: os he dado potestad para pisotear serpientes y escorpiones y todo el ejército del enemigo. Y no os hará daño alguno. Sin embargo, no estéis alegres porque se os someten los espíritus; estad alegres porque vuestros nombres están inscritos en el cielo.»

GUÍA:  ¿Qué subrayas y destacas en esta Palabra? Jesús va preparando a los discípulos para predicar el reino de Dios. Detalla algunas formas de hacer y relacionarse. Ellos hacen  la experiencia y vuelven contentos. Jesús se alegra, más bien, porque sus nombres están escritos en el libro de la vida.  EN SILENCIO ACOGEMOS LAS RECOMENDACIONES QUE  JESÚS HACE.

AGRADECEMOS el don del Espíritu.

PRESENTAMOS nuestra oración y  determinaciones.

PETICIONES

PADRE NUESTRO con Jesús.

INVOCAMOS a María.

CANCIÓN        -TESTIGOS-

Nos envías por el mundo, a anunciar la Buena Nueva.
Mil antorchas encendidas, y una nueva primavera.

Si la sal se vuelve sosa, ¿quién podrá salar el mundo?
Nuestra vida es levadura, nuestro amor será fecundo.

 Siendo siempre tus testigos, cumpliremos el destino.
Sembraremos de esperanza, y alegría los caminos.

Cuanto soy y cuanto tengo, la ilusión y el desaliento.

            Yo te ofrezco mi semilla, y Tú pones el fermento.

viernes, 24 de junio de 2016

ENCUENTRO CON DIOS







GUÍA: Nos disponemos a hacer nuestra oración, encuentro con Dios, amistad con el amigo. Aquí estamos, Señor. Te encontramos y reconocemos tu presencia en nuestro interior. Sabemos que nos acompañas paso a paso. Nos olvidamos a veces y volvemos a Ti. Nos conoces hasta el fondo de nuestro ser y nuestras sendas te son familiares, como dice el Salmo. Recibe nuestro espíritu humilde y abre nuestro corazón a tu Palabra. SILENCIO PREPARATORIO, CREYENTE Y CONFIADO

 Del primer libro de los Reyes (19,16b.19-21):

En aquellos días, el Señor dijo a Elías: «Unge profeta sucesor tuyo a Eliseo, hijo de Safat, de Prado Bailén.»
Elías se marchó y encontró a Eliseo, hijo de Safat, arando con doce yuntas en fila, él con la última. Elías pasó a su lado y le echó encima el manto. 
Entonces Eliseo, dejando los bueyes, corrió tras Elías y le pidió: «Déjame decir adiós a mis padres; luego vuelvo y te sigo.»
Elías le dijo: «Ve y vuelve; ¿quién te lo impide?»
Eliseo dio la vuelta, cogió la yunta de bueyes y los ofreció en sacrificio; hizo fuego con los aperos, asó la carne y ofreció de comer a su gente; luego se levantó, marchó tras Elías y se puso a su servicio.

GUÍA: Una llamada a ser profeta. Elías llama a Eliseo de parte del Señor. Eliseo no pone reparos y deja todo y se va con Elías. Dios actúa en él, no cabe duda.  La respuesta es de totalidad. Pidamos al Espíritu que ilumine nuestra mente para conocer lo que Dios quiere de nosotros y  dé fuerza a nuestra voluntad para llevarlo a cabo. ¿Nos imaginamos invitados por Elías, por Jesús…y cómo reaccionaríamos? Expresemos nuestro diálogo. SILENCIO DE ESCUCHA Y ADORACIÓN

De la carta del apóstol san Pablo a los Gálatas (5,1.13-18):

Para vivir en libertad, Cristo nos ha liberado. Por tanto, manteneos firmes, y no os sometáis de nuevo al yugo de la esclavitud. Hermanos, vuestra vocación es la libertad: no una libertad para que se aproveche la carne; al contrario, sed esclavos unos de otros por amor. Porque toda la Ley se concentra en esta frase: «Amarás al prójimo como a ti mismo.» Pero, atención: que si os mordéis y devoráis unos a otros, terminaréis por destruiros mutuamente. Yo os lo digo: andad según el Espíritu y no realicéis los deseos de la carne; pues la carne desea contra el espíritu y el espíritu contra la carne. Hay entre ellos un antagonismo tal que no hacéis lo que quisierais. En cambio, si os guía el Espíritu, no estáis bajo el dominio de la Ley.

GUÍA: Llamados a la libertad. Guiados por el Espíritu. Nos lo dice a cada uno de nosotros. Sentimos esa libertad. Fuera  del mal, del egoísmo, de la violencia, del orgullo. ¡Cuánta luz y belleza!  Guiados por el Espíritu en este mundo que nos rodea. Todo es posible para Dios. Si os dejáis guiar por el Espíritu. SILENCIO DE PRESENCIA Y COMPROMISO



Del santo evangelio según san Lucas (9,51-62):

Cuando se iba cumpliendo el tiempo de ser llevado al cielo, Jesús tomó la decisión de ir a Jerusalén. Y envió mensajeros por delante. De camino, entraron en una aldea de Samaría para prepararle alojamiento. Pero no lo recibieron, porque se dirigía a Jerusalén. 
Al ver esto, Santiago y Juan, discípulos suyos, le preguntaron: «Señor, ¿quieres que mandemos bajar fuego del cielo que acabe con ellos?»
Él se volvió y les regañó. Y se marcharon a otra aldea. Mientras iban de camino, le dijo uno: «Te seguiré adonde vayas.»
Jesús le respondió: «Las zorras tienen madriguera, y los pájaros nido, pero el Hijo del hombre no tiene donde reclinar la cabeza.»
A otro le dijo: «Sígueme.»
Él respondió: «Déjame primero ir a enterrar a mi padre.»
Le contestó: «Deja que los muertos entierren a sus muertos; tú vete a anunciar el reino de Dios.»
Otro le dijo: «Te seguiré, Señor. Pero déjame primero despedirme de mi familia.»
Jesús le contestó: «El que echa mano al arado y sigue mirando atrás no vale para el reino de Dios.»


GUÍA: Distintas reacciones, la de Santiago y Juan que quieren hacer bajar fuego del cielo. La del que quiere seguirle pero todavía no. La de Jesús, que lo da todo. ¿A cuál nos parecemos? Jesús envía mensajeros por delante. En nuestra oración ¿nos sentimos sus mensajeros alguna vez? Sin duda que Jesús resucitado va con nosotros, si nos ponemos en camino. Él prepara lo necesario pero cuenta con nuestras manos y nuestro corazón. Veamos cómo lo hacemos, qué nos pide. SILENCIO REFLEXIVO, DE AMIGO, CREYENTE, COMPROMETIDO.

HACEMOS SÍNTESIS de la oración. ¿Qué nos queda de ella?

OFRECEMOS, AGRADECEMOS.

PEDIMOS

INVOCAMOS A MARÍA Le confiamos nuestra semana.

PADRE NUESTRO con todas las personas del mundo.

TU ME LLAMAS, SEÑOR, Y ME QUIERES



Tú me llamas, Señor, y me quieres mandar,
 a llevar tu palabra por tierra y por mar,
pero yo no podré anunciar tu verdad,
porque soy como un niño que no sabe hablar.

Ya, antes que hubieras nacido
por siempre pensaba yo en ti,
no habías nacido y ya eras profeta,
no habías nacido y te consagré.
No, no digas que eres un niño, 

un niño que no sabe hablar,
no sientas tristeza; no temas al mundo, 
pues siempre en la lucha contigo estaré.

Tú, serás mi antorcha radiante
que lleve a los hombres la luz.
Serás mi profeta que hable a las gentes
y que lleve en sus labios palabras de amor.

Yo te doy poder sobre el mundo,

 poder sobre toda nación. 
Extirpa y destruye, prepara la siembra 
y planta en los hombres semillas de amor.

jueves, 16 de junio de 2016

ORACIÓN 19-06-16



GUÍA: Domingo 12 Ciclo C, Tiempo Ordinario. Estamos ante Ti, Señor. Venimos a la oración llamados por el Espíritu. Hemos respondido y queremos reconocer tu presencia en nosotros. Te ofrecemos la semana pasada, todos los percances y las esperanzas. ¿Qué nos dices de todo ello? ¿En qué situación estamos en cuanto a la fe? La avivamos contigo y esperamos que crezcas en cada uno de nosotros. El encuentro con los demás a veces nos enriquece y otras nos hace  ver lo débil de nuestras actuaciones. Pedimos que aumente nuestra fe, nuestra esperanza y nos envuelva en un amor más fuerte. SILENCIO DE FE, PETICIÓN, CONFIANZA

De la profecía de Zacarías (12,10-11;13,1):

Así dice el Señor: «Derramaré sobre la dinastía de David y sobre los habitantes de Jerusalén un espíritu de gracia y de clemencia. Me mirarán a mí, a quien traspasaron, harán llanto como llanto por el hijo único, y llorarán como se llora al primogénito. Aquel día será grande el luto en Jerusalén, como el luto de Hadad-Rimón en el valle de Meguido.» Aquel día, se alumbrará un manantial, a la dinastía de David y a los habitantes de Jerusalén, contra pecados e impurezas.

GUÍA: ¿Qué nos dice el Espíritu personalmente, después de leer el texto?  Derramaré un espíritu de gracia y de clemencia. Me mirarán a mí, a quien traspasaron. Aquel día se alumbrará un manantial contra pecados e impurezas.  Que cada una de estas frases penetre en nosotros. Que llegue el Espíritu derramado, que la gracia y la clemencia llenen nuestros corazones. Miremos al traspasado. Demos espacio en nuestro interior para reconocer cada fragmento en nosotros. La acción de Dios sigue viva y taladra toda dureza. SILENCIO ABIERTO A LA GRACIA Y AL DON DE DIOS.



De la carta del apóstol san Pablo a los Gálatas (3,26-29): 

Todos sois hijos de Dios por la fe en Cristo Jesús. Los que os habéis incorporado a Cristo por el bautismo os habéis revestido de Cristo. Ya no hay distinción entre judíos y gentiles, esclavos y libres, hombres y mujeres, porque todos sois uno en Cristo Jesús. Y, si sois de Cristo, sois descendencia de Abrahán y herederos de la promesa.

GUÍA: En nuestro interior, nos sentimos hijos de Dios, por la fe en Jesús. Revestidos de Cristo.  Todos unidos  y herederos de su promesa. La comunión de Jesús con cada uno de los creyentes nos fortalece en la fe que profesamos y transforma nuestra vida. Tenemos que admitir su presencia y ampliar la mirada allí donde está. SILENCIO CREYENTE, DE COMUNIÓN Y ADORACIÓN.

Del santo evangelio según san Lucas (9,18-24):

Una vez que Jesús estaba orando solo, en presencia de sus discípulos, les preguntó: «¿Quién dice la gente que soy yo?» 
Ellos contestaron: «Unos que Juan el Bautista, otros que Elías, otros dicen que ha vuelto a la vida uno de los antiguos profetas.» 
Él les preguntó: «Y vosotros, ¿quién decís que soy yo?» 
Pedro tomó la palabra y dijo: «El Mesías de Dios.»
Él les prohibió terminantemente decírselo a nadie. Y añadió: «El Hijo del hombre tiene que padecer mucho, ser desechado por los ancianos, sumos sacerdotes y escribas, ser ejecutado y resucitar al tercer día.» 
Y, dirigiéndose a todos, dijo: «El que quiera seguirme, que se niegue a sí mismo, cargue con su cruz cada día y se venga conmigo. Pues el que quiera salvar su vida la perderá; pero el que pierda su vida por mi causa la salvará.»

GUÍA: ¿Quién dice la gente que soy yo? Demos algunas contestaciones. También nos lo pregunta a nosotros. Respondamos centrando lo que significa Jesús en nuestra vida. Hablemos con Jesús presentando nuestros sentimientos y confesión de fe. Al reconocerle como Mesías, no quiere hacerse la publicidad. Anuncia que tiene que sufrir y resucitar. Luego invita a seguirle y estar con él. Entremos en la conversación, dejémonos interpelar y demos respuesta. ¿Con quién estamos? SILENCIO  DE  CONFIANZA,  ESPERANZA., COMPROMISO.

OFRECEMOS el encuentro, el diálogo, el compromiso. AGRADECEMOS

PEDIMOS por las necesidades del mundo

INVOCAMOS A MARÍA
ESTRELLA Y CAMINO
(Espinosa)
CORO
Estrella y camino, prodigio de amor.
De tu mano, Madre, hallamos Dios.
Todos los siglos están mirando hacia Tí,
todos escuchan tu voz temblando en un sí.
Cielos y tierra se dan en tu corazón,
como un abrazo de paz, ternura y perdón.
CORO
Tú nos lo diste en Belén, en pobre portal,
en tu regazo lo ven el rey y el zagal.
Tú nos lo diste en la cruz, altar de dolor,
muerto en tus brazos está un Dios Redentor.
CORO
Toda la Iglesia con fe eleva un clamor,
puestos los ojos en Tí, la Madre de Dios.
Puente y sendero de amor, sublime misión,
la de traernos a Dios en tu corazón.
CORO 
Visite www.miscancionescatolicas.com