martes, 5 de diciembre de 2017

SEMILLAS NOVIEMBRE

SEMILLAS NOVIEMBRE 
REZA Y COMPARTE PORTADA


SEMILLAS, COMENTARIOS NOVIEMBRE

1.            Rosa Roja1 de noviembre de 2017, 10:24
En la Eucaristía damos gracias por las personas que nos han acompañado y han partido al encuentro de Dios. El Padre los tenga con Él y les haga felices.
2.             
(Lc. 17,6)«Si tuvierais fe como un granito de mostaza, diríais a esa morera: "Arráncate de raíz y plántate en el mar." Y os obedecería.» La fe, un gran don. La pedimos y practicamos con humildad.
3.             
"Uno de ellos, viendo que estaba curado, se volvió alabando a Dios a grandes gritos y se echó por tierra a los pies de Jesús, dándole gracias" Los diez leprosos fueron curados y sólo uno dio gracias. Seamos agradecidos a Dios y a los que nos hacen el bien.
4.             
Hoy se nos habla de Zaqueo. Quería ver a Jesús y Jesús se invitó a su casa. Puede ser un ejemplo de lo que hará con nosotros si le queremos ver y conocer más. Jesús, aquí estamos.
5.             
Ya en la víspera de Cristo Rey, ponemos en marcha nuestros resortes de amor y fidelidad para estar con él. Necesitamos avanzar hacia el Padre Dios y hacia los hermanos que nos necesitan. Ánimo.
6.             
Primer domingo de Adviento. Tiempo de espera del Salvador, de Jesús. Velad porque no sabéis el día ni la hora en que llegará. La fe nos ayuda a mantenernos vigilantes. Aumenta, Señor, nuestra fe.



 ACCIÓN


·    Saborea cada semilla.

·    Da gracias a Dios, por su presencia.

·    Da gracias a la persona que las echó al surco, por su generosidad.

·    Siembra la tuya ¿Quieres?

 https://rezaycomparte.blogspot.com



viernes, 1 de diciembre de 2017

SALES AL ENCUENTRO



SALES AL ENCUENTRO

GUÍA DE ORACIÓN 3-12-17

GUÍA: Comenzamos el Año Litúrgico. Es Adviento. Dios viene a su pueblo. La Iglesia se prepara para la venida de Jesús en la Navidad. Los profetas llamaban al pueblo para constatar su situación y pedir a Dios que los acoja. Que olvide su culpa. En nuestro interior, reconocemos lo que somos, lo que podríamos ser. Dios nos espera. Nos sentimos faltos de Dios, le pedimos que venga. ¡Ven Señor! SILENCIO D ECONSCIENCIA, PERDÓN Y ESPERANZA


 Del libro de Isaías (63,16b-17.19b;64,2b-7):

Tú, Señor, eres nuestro padre, tu nombre de siempre es «Nuestro redentor». Señor, ¿por qué nos extravías de tus caminos y endureces nuestro corazón para que no te tema? Vuélvete, por amor a tus siervos y a las tribus de tu heredad. ¡Ojalá rasgases el cielo y bajases, derritiendo los montes con tu presencia! Bajaste y los montes se derritieron con tu presencia, jamás oído oyó ni ojo vio un Dios, fuera de ti, que hiciera tanto por el que espera en él. Sales al encuentro del que practica la justicia y se acuerda de tus caminos. Estabas airado, y nosotros fracasamos; aparta nuestras culpas, y seremos salvos. Todos éramos impuros, nuestra justicia era un paño manchado; todos nos marchitábamos como follaje, nuestras culpas nos arrebataban como el viento. Nadie invocaba tu nombre ni se esforzaba por aferrarse a ti; pues nos ocultabas tu rostro y nos entregabas en poder de nuestra culpa. Y, sin embargo, Señor, tú eres nuestro padre, nosotros la arcilla y tú el alfarero: somos todos  obra de tu mano.

GUÍA: Isaías presenta a Dios que sale al encuentro del que practica la justicia y recuerda el camino de Dios. Si nos miramos en este espejo ¿Qué podemos decir? ¿Invocamos su nombre? ¿Nos aferramos a Él? Padre Dios, nos sabemos duros ante tus mensajes. Derrite los montes y baja hasta nosotros. Somos tu pueblo. SILENCIO DE INTERIORIZACIÓN DE ESTAS FRASES, DE PETICIÓN, DE PERDÓN.

Lectura de la primera carta del apóstol san Pablo a los Corintios (1,3-9):

La gracia y la paz de parte de Dios, nuestro Padre, y del Señor Jesucristo sean con vosotros. En mi acción de gracias a Dios os tengo siempre presentes, por la gracia que Dios os ha dado en Cristo Jesús. Pues por él habéis sido enriquecidos en todo: en el hablar y en el saber; porque en vosotros se ha probado el testimonio de Cristo. De hecho, no carecéis de ningún don, vosotros que aguardáis la manifestación de nuestro Señor Jesucristo. Él os mantendrá firmes hasta el final, para que no tengan de qué acusaros en el día de Jesucristo, Señor nuestro. Dios os llamó a participar en la vida de su Hijo, Jesucristo, Señor nuestro. ¡Y él es fiel!
GUÍA: Ser cristiano es estar en actitud de espera. Dios sale al encuentro de cada uno de sus hijos. San Pablo da gracias a Dios por su gracia, derramada en los cristianos de Corinto. Con la manifestación en Jesús, no carecen de ningún don. Podemos aplicar estas palabras a los cristianos de hoy. Estamos llamados a participar en la vida de nuestro Señor Jesucristo y Él es fiel.
En silencio nos sentimos favorecidos por el don de la fe, la llamada a participar a favor de otros, con la ayuda de Jesús, y con la seguridad de que Dios es fiel. SILENCIO DE GRACIAS, DE ESCUCHA Y D EFIDELIDAD.

Del santo evangelio según san Marcos (13,33-37):


En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos: «Mirad, vigilad: pues no sabéis cuándo es el momento. Es igual que un hombre que se fue de viaje y dejó su casa, y dio a cada uno de sus criados su tarea, encargando al portero que velara. Velad entonces, pues no sabéis cuándo vendrá el dueño de la casa, si al atardecer, o a medianoche, o al canto del gallo, o al amanecer; no sea que venga inesperadamente y os encuentre dormidos. Lo que os digo a vosotros lo digo a todos: ¡Velad!»
GUÍA:  ¡Velad! Dios viene. Él deja sus encargos a cada persona. El estar despiertos, atentos a los signos de la llegada. Atentos a la realidad de la vida, para descubrir esos signos y también para encontrarlos en la paz y la justicia, la igualdad que cada uno promueve. Hacemos venir a Dios participando de sus gestos y acciones. SILENCIO DE RECONOCIMIENTO, DE IMPLICACIÓN EN LA VENIDA DE DIOS PARA NOSOTROS Y PARA LA HUMANIDAD

RECOGEMOS NUESTRA ORACIÓN, UNA FRASE NOS RECUERDA.

AGRADECEMOS, PEDIMOS, ADORAMOS

INVOCAMOS A MARÍA PARA EL CAMINO.

NOS DIRIGIMOS AL PADRE JUNTO CON JESÚS: PADRE NUESTRO

CANTAMOS


Ven, Salvador, ven sin tardar, danos tu gracia y tu paz.
Ven, Salvador, ven sin tardar, danos tu fuerza y verdad.
Nos diste tu palabra, es firme nuestra espera;
iremos tras tus huellas, sabemos que vendrás.
Ven, ven, Señor Jesús.
Ven, Salvador, ven sin tardar…

Los hombres de mi pueblo, esperan que Tú vengas,
que se abran horizontes, por donde caminar.
Ven, ven, Señor Jesús.
Ven, Salvador, ven sin tardar,

Vendrás con los que luchan, por una tierra nueva.
Vendrás con los que cantan: justicia y hermandad.
Ven, ven, Señor Jesús.
Ven, Salvador, ven sin tardar…
http://www.oblatos.com/ven-salvador-ven-sin-tardar

martes, 28 de noviembre de 2017

ALEGRÍA DEL AMOR 4




PAPA FRANCISCO

Capítulo primero
A LA LUZ DE LA PALABRA

La biblia presenta a la familia por una parte idílica en los puntos anteriores.
 Por otra parte, la que veremos hoy, tiene sus dificultades.  Los números 19 al 23 nos hablan de la presencia del dolor, del mal, de la violencia que rompen la vida de la familia y su íntima comunión de vida y de amor.
 Habla de ansia y dominio en la pareja.

Jesús en el Evangelio presenta situaciones familiares, algunas dificultades y el enfoque que Dios da.
Ya no habrá muerte, ni luto, ni llanto, ni dolor» (Ap 21,4).
La vida está envuelta en el trabajo, el medio empleado para sobrevivir y dominar la tierra.



Un sendero de sufrimiento y de sangre

19. El idilio que manifiesta el Salmo 128 no niega una realidad amarga que marca todas las Sagradas Escrituras. Es la presencia del dolor, del mal, de la violencia que rompen la vida de la familia y su íntima comunión de vida y de amor. Por algo el discurso de Cristo sobre el matrimonio (cf. Mt 19,3-9) está inserto dentro de una disputa sobre el divorcio. La Palabra de Dios es testimonio constante de esta dimensión oscura que se abre ya en los inicios cuando, con el pecado, la relación de amor y de pureza entre el varón y la mujer se transforma en un dominio: «Tendrás ansia de tu marido, y él te dominará» (Gn 3,16).

20. Es un sendero de sufrimiento y de sangre que atraviesa muchas páginas de la Biblia, a partir de la violencia fratricida de Caín sobre Abel y de los distintos litigios entre los hijos y entre las esposas de los patriarcas Abraham, Isaac y Jacob, llegando luego a las tragedias que llenan de sangre a la familia de David, hasta las múltiples dificultades familiares que surcan la narración de Tobías o la amarga confesión de Job abandonado: «Ha alejado de mí a mis parientes, mis conocidos me tienen por extraño [...] Hasta mi vida repugna a mi esposa, doy asco a mis propios hermanos» (Jb 19,13.17).

21. Jesús mismo nace en una familia modesta que pronto debe huir a una tierra extranjera. Él entra en la casa de Pedro donde su suegra está enferma (Mc 1,30-31), se deja involucrar en el drama de la muerte en la casa de Jairo o en el hogar de Lázaro (cf. Mc5,22-24.35-43); escucha el grito desesperado de la viuda de Naín ante su hijo muerto (cf. Lc 7,11-15), atiende el clamor del padre del epiléptico en un pequeño pueblo del campo (cf. Mt 9,9-13; Lc 19,1-10. Encuentra a publicanos como Mateo o Zaqueo en sus propias casas, y también a pecadoras, como la mujer que irrumpe en la casa del fariseo (cf. Lc 7,36-50). Conoce las ansias y las tensiones de las familias incorporándolas en sus parábolas: desde los hijos que dejan sus casas para intentar alguna aventura (cf. Lc15,11-32) hasta los hijos difíciles con comportamientos inexplicables (cf. Mt 21,28-31) o víctimas de la violencia (cf. Mc 12,1-9). Y se interesa incluso por las bodas que corren el riesgo de resultar bochornosas por la ausencia de vino (cf. Jn 2,1-10) o por falta de asistencia de los invitados (cf. Mt 22,1-10), así como conoce la pesadilla por la pérdida de una moneda en una familia pobre (cf. Lc15,8-10).

22. En este breve recorrido podemos comprobar que la Palabra de Dios no se muestra como una secuencia de tesis abstractas, sino como una compañera de viaje también para las familias que están en crisis o en medio de algún dolor, y les muestra la meta del camino, cuando Dios «enjugará las lágrimas de sus ojos. Ya no habrá muerte, ni luto, ni llanto, ni dolor» (Ap 21,4).

23. Al comienzo del Salmo 128, el padre es presentado como un trabajador, quien con la obra de sus manos puede sostener el bienestar físico y la serenidad de su familia: «Comerás del trabajo de tus manos, serás dichoso, te irá bien» (v. 2). Que el trabajo sea una parte fundamental de la dignidad de la vida humana se deduce de las primeras páginas de la Biblia, cuando se declara que «Dios tomó al hombre y lo colocó en el jardín de Edén, para que lo guardara y lo cultivara» (Gn 2,15). Es la representación del trabajador que transforma la materia y aprovecha las energías de lo creado, dando luz al «pan de vuestros sudores» (Sal 127,2), además de cultivarse a sí mismo.




ACCIÓN

¿Cómo enfocamos estos  problemas en nuestro proyecto vital?
¿Cómo afectan a nuestro vivir?

·        La familia ideal y las dificultades.
·        Haz tu descripción de la familia ideal.
·        Busca las soluciones mejores a las dificultades, al menos una.
·        Habla con Dios Padre, Hijo y Espíritu.
·        Exprésale  tus necesidades al respecto.





viernes, 24 de noviembre de 2017

CRISTO REY DEL UNIVERSO



CRISTO REY DEL UNIVERSO

GUÍA DE ORACIÓN 26-11-17

GUÍA: Celebramos la fiesta de Cristo Rey del Universo. Los profetas hablaron del pastor que cuida a sus ovejas. San Pablo habla de Cristo Rey. Nuestra oración contacta con el pastor que apacienta a su rebaño, al rey que cuida a su pueblo. Nos sentimos ante el pastor y el rey Jesús, Hijo de Dios, resucitado, que purifica todas las cosas. Imaginemos a Jesús, salvador de cada uno de nosotros. Le presentamos nuestros sentimientos. SILENCIO DE ACOGIDA, OFRENDA Y APERTURA

De la profecía de Ezequiel (34,11-12.15-17):

Así dice el Señor Dios: «Yo mismo en persona buscaré a mis ovejas, siguiendo su rastro. Como sigue el pastor el rastro de su rebaño, cuando las ovejas se le dispersan, así seguiré yo el rastro de mis ovejas y las libraré, sacándolas de todos los lugares por donde se desperdigaron un día de oscuridad y nubarrones. Yo mismo apacentaré mis ovejas, yo mismo las haré sestear –oráculo del Señor Dios–. Buscaré las ovejas perdidas, recogeré a las descarriadas; vendaré a las heridas; curaré a las enfermas: a las gordas y fuertes las guardaré y las apacentaré como es debido. Y a vosotras, mis ovejas, así dice el Señor: Voy a juzgar entre oveja y oveja, entre carnero y macho cabrío.»

GUÍA: Yo mismo apacentaré a mis ovejas, las buscaré y cuidaré. Ovejas queridas por Jesús con especial atención. Nos sentimos cuidados, buscados, escuchados. Dialogamos sobre nuestros fallos y escapadas. Jesús, cuida nuestro corazón inquieto y edúcanos en tu amor. SILENCIO QUE APRENDE Y PRACTICA, AGRADECE.

De la primera carta de san Pablo a los Corintios (15,20-26.28):

Cristo resucitó de entre los muertos: el primero de todos. Si por un hombre vino la muerte, por un hombre ha venido la resurrección. Si por Adán murieron todos, por Cristo todos volverán a la vida. Pero cada uno en su puesto: primero Cristo, como primicia; después, cuando él vuelva, todos los que son de Cristo; después los últimos, cuando Cristo devuelva a Dios Padre su reino, una vez aniquilado todo principado, poder y fuerza. Cristo tiene que reinar hasta que Dios haga de sus enemigos estrado de sus pies. El último enemigo aniquilado será la muerte. Y, cuando todo esté sometido, entonces también el Hijo se someterá a Dios, al que se lo había sometido todo. Y así Dios lo será todo para todos.

GUÍA: Cristo ha resucitado y someterá todo al poder del Padre Dios.  Nosotros, criaturas, hijos de Dios, en el mismo Jesucristo. Dios lo será todo en todos. Dios, Señor de toda la creación. Nosotros con Jesús unidos a Él. Nos situamos como elementos de unidad. Adoramos, reconocemos su amor para toda la humanidad y nos definimos a favor de Jesús, a favor de Dios Padre y del Espíritu que transforma todas las cosas. SILENCIO DE RECONOCIMIENTO, ENCUENTRO, ENTREGA

Lectura del santo evangelio según san Mateo (25,31-46)

En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos: «Cuando venga en su gloria el Hijo del hombre, y todos los ángeles con él, se sentará en el trono de su gloria, y serán reunidas ante él todas las naciones. Él separará a unos de otros, como un pastor separa las ovejas, de las cabras. Y pondrá las ovejas a su derecha y las cabras a su izquierda. Entonces dirá el rey a los de su derecha: "Venid vosotros, benditos de mi Padre; heredad el reino preparado para vosotros desde la creación del mundo. Porque tuve hambre y me disteis de comer, tuve sed y me disteis de beber, fui forastero y me hospedasteis, estuve desnudo y me vestisteis, enfermo y me visitasteis, en la cárcel y vinisteis a verme." Entonces los justos le contestarán: "Señor, ¿cuándo te vimos con hambre y te alimentamos, o con sed y te dimos de beber?; ¿cuándo te vimos forastero y te hospedamos, o desnudo y te vestimos?; ¿cuándo te vimos enfermo o en la cárcel y fuimos a verte?" Y el rey les dirá: "Os aseguro que cada vez que lo hicisteis con uno de éstos, mis humildes hermanos, conmigo lo hicisteis." Y entonces dirá a los de su izquierda: "Apartaos de mí, malditos, id al fuego eterno preparado para el diablo y sus ángeles. Porque tuve hambre y no me disteis de comer, tuve sed y no me disteis de beber, fui forastero y no me hospedasteis, estuve desnudo y no me vestisteis, enfermo y en la cárcel y no me visitasteis. Entonces también éstos contestarán: "Señor, ¿cuándo te vimos con hambre o con sed, o forastero o desnudo, o enfermo o en la cárcel, y no te asistirnos?" Y él replicará: "Os aseguro que cada vez que no lo hicisteis con uno de éstos, los humildes, tampoco lo hicisteis conmigo." Y éstos irán al castigo eterno, y los justos a la vida eterna.»

GUÍA: Venid vosotros… porque tuve hambre y me disteis de comer, venid porque estuve necesitado y me ayudasteis. Os aseguro que cuando lo hicisteis con mis hermanos, conmigo lo hicisteis.
Oigamos estas palabras dichas a nosotros. Veamos nuestras acciones y comportamientos. ¿Somos acogidos? Revisemos nuestro corazón inclinado al bien o mal hacer. Estimulamos nuestro corazón para acoger y recibir a los otros. SILENCIO DE ESCUCHA, REVISIÓN, COMPROMISO.

SINTETIZAMOS NUESTRA ORACIÓN. UNA FRASE PARA RECORDAR.

AGRADECEMOS, PEDIMOS, OFRECEMOS, NOS UNIMOS A TODA LA IGLESIA

INVOCAMOS A MARÍA NUESTRA MADRE

LLAMAMOS  A DIOS NUESTRO PADRE: PADRE NUESTRO…

CANTAMOS

LIBERTADOR DE NAZARET

Libertador de Nazaret ven junto a mí, ven junto a mí.
Libertador de Nazaret, ¿qué puedo hacer sin ti?
Yo sé que eres Camino, que eres la vida y la verdad.
Yo sé que el que te sigue sabe adónde va.
Quiero vivir tu vida, seguir tus huellas, tener tu luz,
quiero beber tu cáliz, quiero llevar tu cruz.
Quiero encender mi fuego,
alumbrar mi vida y seguirte a ti.
Quiero escucharte siempre, quiero luchar por ti.
Busco un mensaje nuevo, te necesito libertador,
no puedo estar sin rumbo, no puedo estar sin Dios.


https://www.youtube.com/watch?v=tm3K04sypFE 

  
                                                          

martes, 21 de noviembre de 2017

#ANIVERSARIO 3º



#REZA Y COMPARTE
 
#ANIVERSARIO 3º 


¡FELICIDADES Y ENHORABUENA !
POR VUESTRO TRABAJO Y EMPEÑO EN LA ORACIÓN.

Tres años recorriendo el camino de la ORACIÓN Y ENCUENTRO con el Padre, el Hijo  y el Espíritu Santo.

Ha sido una hermosa aventura. 
Jesús y María nos han acompañado con mucho cariño. Rezamos
SALMO 120
 Levanto mis ojos a los montes:
¿de dónde me vendrá el auxilio?
El auxilio me viene del Señor,
que hizo el cielo y la tierra.
El auxilio me viene del Señor,
que hizo el cielo y la tierra.
El auxilio me viene del Señor,
que hizo el cielo y la tierra.
No permitirá que resbale tu pie,
tu guardián no duerme;
no duerme ni reposa
el guardián de Israel.
El auxilio me viene del Señor...
El Señor te guarda a su sombra,
está a tu derecha;
de día el sol no te hará daño,
ni la luna de noche.
El auxilio me viene del Señor...
El Señor te guarda de todo mal,
él guarda tu alma;
Él guarda tus entradas y salidas,
ahora y por siempre.
El auxilio me viene del Señor…


miguel manzano, salmos para el pueblo


viernes, 17 de noviembre de 2017

ESA ES LA MUJER



ESA ES LA MUJER

GUÍA DE ORACIÓN 19-11-2017

GUÍA:   Nuevo día de encuentro con el Padre, el Hijo Jesús, y el Espíritu. La semana pasa con sus quehaceres y nos lanza hacia el domingo, día del Señor Resucitado. Jesús, aquí estamos. Te presentamos lo que somos con sus deseos y proyectos. Contamos contigo en el camino de cada día. Haz que te conozcamos mejor, que vivamos de acuerdo con tu Palabra y andemos la vida nueva de resucitados contigo, con el Padre y con el Espíritu Santo. Dejemos que nuestra mente y corazón se abra al Espíritu de Dios. SILENCIO DE APERTURA, ACOGIDA Y PAZ


Del libro de los Proverbios (31,10-13.19-20.30-31):

Una mujer hacendosa, ¿quién la hallará? Vale mucho más que las perlas. Su marido se fía de ella, y no le faltan riquezas. Le trae ganancias y no pérdidas todos los días de su vida. Adquiere lana y lino, los trabaja con la destreza de sus manos. Extiende la mano hacia el huso, y sostiene con la palma la rueca. Abre sus manos al necesitado y extiende el brazo al pobre. Engañosa es la gracia, fugaz la hermosura, la que teme al Señor merece alabanza. Cantadle por el éxito de su trabajo, que sus obras la alaben en la plaza.

GUÍA: El ideal de mujer se presenta hacendosa, dispuesta a cumplir sus deberes de esposa, abierta al necesitado, generosa y abierta a Dios.
Amar a Dios sobre todas las cosas y al prójimo como a sí mismo, es el ejemplo de persona. Mujer y varón se complementan y cada uno es don precioso en la casa del justo. ¿Nos respetamos mutuamente, colaboramos con rectitud  y amor en la realización del proyecto común, en unión con Dios Padre? SILENCIO DE CONFIANZA, ENTREGA, Y GENEROSIDAD

Lectura de la primera carta del apóstol san Pablo a los Tesalonicenses (5,1-6):

En lo referente al tiempo y a las circunstancias no necesitáis, hermanos, que os escriba. Sabéis perfectamente que el día del Señor llegará como un ladrón en la noche. Cuando estén diciendo: «Paz y seguridad», entonces, de improviso, les sobrevendrá la ruina, como los dolores de parto a la que está encinta, y no podrán escapar. Pero vosotros, hermanos, no vivís en tinieblas, para que ese día no os sorprenda como un ladrón, porque todos sois hijos de la luz e hijos del día; no lo sois de la noche ni de las tinieblas, Así, pues, no durmamos como los demás, sino estemos vigilantes y despejados.

GUÍA: El día del Señor llegará de improviso. Vivid en la luz, como hijos de la luz. ¿De verdad nos sentimos hijos de la luz?
Estad despiertos, preparados. El Señor está viniendo. Es necesario estar atentos para reconocerle. ¿Vivimos así, atentos, vigilantes para recibir al Señor que llega?. Valoremos nuestros comportamientos. SILENCIO DE COMPROBACIÓN, ILUMINACIÓN Y ACEPTACIÓN

Lectura del santo evangelio según san Mateo (25,14-30):

En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos esta parábola: «Un hombre, al irse de viaje, llamó a sus empleados y los dejó encargados de sus bienes: a uno le dejó cinco talentos de plata, a otro dos, a otro uno, a cada cual según su capacidad; luego se marchó. El que recibió cinco talentos fue en seguida a negociar con ellos y ganó otros cinco. El que recibió dos hizo lo mismo y ganó otros dos. En cambio, el que recibió uno hizo un hoyo en la tierra y escondió el dinero de su señor. Al cabo de mucho tiempo volvió el señor de aquellos empleados y se puso a ajustar las cuentas con ellos. Se acercó el que había recibido cinco talentos y le presentó otros cinco, diciendo: "Señor, cinco talentos me dejaste; mira, he ganado otros cinco." Su señor le dijo: "Muy bien. Eres un empleado fiel y cumplidor; como has sido fiel en lo poco, te daré un cargo importante; pasa al banquete de tu señor." Se acercó luego el que había recibido dos talentos y dijo: "Señor, dos talentos me dejaste; mira, he ganado otros dos." Su señor le dijo: "Muy bien. Eres un empleado fiel y cumplidor; como has sido fiel en lo poco, te daré un cargo importante; pasa al banquete de tu señor." Finalmente, se acercó el que había recibido un talento y dijo: "Señor, sabía que eres exigente, que siegas donde no siembras y recoges donde no esparces, tuve miedo y fui a esconder mi talento bajo tierra. Aquí tienes lo tuyo." El señor le respondió: "Eres un empleado negligente y holgazán. ¿Con que sabías que siego donde no siembro y recojo donde no esparzo? Pues debías haber puesto mi dinero en el banco, para que, al volver yo, pudiera recoger lo mío con los intereses. Quitadle el talento y dádselo al que tiene diez. Porque al que tiene se le dará y le sobrará, pero al que no tiene, se le quitará hasta lo que tiene. Y a ese empleado inútil echadle fuera, a las tinieblas; allí será el llanto y el rechinar de dientes."»

GUÍA: Dios da a sus hijos talentos para trabajar con ellos. Hay quien los guarda y no los hace productivos. Otros producen al ciento por uno. ¿En qué grupo nos encontramos?. Los talentos son para el bien común. Hemos de proporcionar lo que podemos para transformar la sociedad. ¿Aportamos al máximo? La realización personal de cada uno completa el engranaje de nuestro mundo. Cada persona tiene su misión. Somos responsables de realizar nuestra parte. SILENCIO D EIDENTIFICACIÓN, PETICIÓN, COMPROMISO.

SINTETIZAMOS NUESTRA ORACIÓN. Una frase o palabra nos ayuda a recordarla.

PRESENTAMOS, AGRADECEMOS, PEDIMOS PERDÓN.

INVOCAMOS A MARÍA PARA QUE ESTÉ CON NOSOTROS.

NOS DIRIGIMOS AL PADRE CON LA ORACIÓN DE JESÚS: PADRE NUESTRO

CANTAMOS

¿ Quién será la mujer
que a tantos inspiró
poemas bellos de amor?
 Le rinden honor la música y la luz,
 el mármol, la palabra y el color.

 ¿Quién será la mujer
 que el rey y el labrador
invocan en su dolor,
el sabio, el ignorante, el pobre y el señor,
el santo al igual que el pecador?

María es (María es) esa mujer (esa mujer)
 que desde siempre el Señor se preparó
 para nacer (para nacer)
 como una flor (como una flor)
 en el jardín que a Dios enamoró.

 ¿Quién será la mujer
 radiante como el sol,
vestida de resplandor?
 La luna a sus pies, el cielo en derredor,
 y ángeles cantándole su amor.

¿Quién será la mujer humilde
que vivió en un pequeño taller?
Amando sin milagros,
viviendo de su fe,
la esposa siempre alegre de José....