REZA
Y COMPARTE
ENVIADO-ENVIADOS
GUÍA
DE ORACIÓN 27-01-19
GUÍA: Un
nuevo día. Estamos contigo y tú, Padre con nosotros. Tu Espíritu alegra nuestra
vida y la marca para la unión, para la misión. Tu presencia es fuerza, es amor
que calienta nuestra oración y nos acerca a ti. Te necesitamos, enséñanos a
orar. SILENCIO DE COMUNICACIÓN, DE
CONFIANZA, DE APERTURA.
Del libro de Nehemías
(8,2-4a.5-6.8-10):
EN aquellos días, el día primero del mes séptimo, el sacerdote Esdras trajo el
libro de la ley ante la comunidad: hombres, mujeres y cuantos tenían uso de
razón. Leyó el libro en la plaza que está delante de la Puerta del Agua, desde
la mañana hasta el mediodía, ante los hombres, las mujeres y los que tenían uso
de razón. Todo el pueblo escuchaba con atención la lectura de la ley.
El escriba Esdras se puso en pie sobre una tribuna de madera levantada para la
ocasión.
Esdras abrió el libro en presencia de todo el pueblo, de modo que toda la
multitud podía verlo; al abrirlo, el pueblo entero se puso de pie. Esdras
bendijo al Señor, el Dios grande, y todo el pueblo respondió con las manos
levantadas:
«Amén, amén».
Luego se inclinaron y adoraron al Señor, rostro en tierra.
Los levitas leyeron el libro de la ley de Dios con claridad y explicando su
sentido, de modo que entendieran la lectura.
Entonces, el gobernador Nehemias, el sacerdote y escriba Esdras, y los levitas
que instruían al pueblo dijeron a toda la asamblea:
«Este día está consagrado al Señor, vuestro Dios: No estéis tristes ni lloréis»
(y es que todo el pueblo lloraba al escuchar las palabras de la ley).
Y añadieron:
«Andad, comed buenas tajadas, bebed vino dulce y enviad porciones a quien no
tiene, pues es un día consagrado a nuestro Dios. No estéis tristes, pues el
gozo en el Señor es vuestra fortaleza».
GUÍA: El
pueblo lloraba al escuchar la ley. Matatías, el sacerdote, les dice: No
lloréis. Este día está consagrado al Señor. El gozo de Dios es vuestra fuerza.
¿Qué os dicen estas palabras a nosotros, hoy?. El pueblo reconocía al señor en
las palabras de la ley. Las lágrimas eran de alegría por aquella manifestación
y de dolor, por el tiempo que habían estado lejos de Dios. Dolor y alegría
pueden ser nuestros sentimientos. Dolor por nuestra lejanía de lo que dios
quiere . Gozo porque él sigue con nosotros.
SILENCIO DE ACOGIDA A LA PRESENCIA DE DIOS, DE PERDÓN POR LAS INFIDELIDADES.
Lectura de la primera carta del
apóstol san Pablo a los Corintios (12,12-30):
Hermanos:
Lo mismo que el cuerpo es uno y tiene muchos miembros, y todos los miembros del
cuerpo, a pesar de ser muchos, son un solo cuerpo, así es también Cristo.
Pues todos nosotros, judíos y griegos, esclavos y libres, hemos sido bautizados
en un mismo Espíritu, para formar un solo cuerpo. Y todos hemos bebido de un
solo Espíritu.
Pues el cuerpo no lo forma un solo miembro sino muchos.
Si el pie dijera: «No soy mano, luego no formo parte del cuerpo», ¿dejaría por
eso de ser parte del cuerpo? Si el oído dijera: «No soy ojo, luego no formo
parte del cuerpo», ¿dejaría por eso de ser parte del cuerpo? Si el cuerpo
entero fuera ojo, ¿cómo oiría? Si el cuerpo entero fuera oído, ¿cómo olería?
Pues bien, Dios distribuyó el cuerpo y cada uno de los miembros como él quiso.
Si todos fueran un mismo miembro, ¿dónde estaría el cuerpo?
Los miembros son muchos, es verdad, pero el cuerpo es uno solo.
El ojo no puede decir a la mano: «No te necesito»; y la cabeza no puede decir a
los pies: «No os necesito». Más aún, los miembros que parecen más débiles son
más necesarios. Los que nos parecen despreciables, los apreciamos más. Los
menos decentes, los tratamos con más decoro. Porque los miembros más decentes
no lo necesitan.
Ahora bien, Dios organizó los miembros del cuerpo dando mayor honor a los que
menos valían.
Así, no hay divisiones en el cuerpo, porque todos los miembros por igual se
preocupan unos de otros.
Cuando un miembro sufre, todos sufren con él; cuando un miembro es honrado,
todos se felicitan.
Pues bien, vosotros sois el cuerpo de Cristo, y cada uno es un miembro.
Y Dios os ha distribuido en la Iglesia: en el primer puesto los apóstoles, en
el segundo los profetas, en el tercero los maestros, después vienen los
milagros, luego el don de curar, la beneficencia, el gobierno, la diversidad de
lenguas.
¿Acaso son todos apóstoles? ¿O todos son profetas? ¿O todos maestros? ¿O hacen
todos milagros? ¿Tienen todos don para curar? ¿Hablan todos en lenguas o todos
las interpretan?
GUÍA: Todos
bautizados por el mismo Espíritu, formamos el cuerpo de Cristo, presente en este
mundo en que habitamos. Interioricémoslo,
Por el bautismo formamos parte del cuerpo d e Cristo. Nuestra misión
actualizarlo. Jesús, clarifica, nuestras decisiones y comportamientos. Danos tu
Espíritu de amor. SILENCIO DE
ACEPTACIÓN, PETICIÓN Y ESPERANZA.
Del santo evangelio según san Lucas (1,1-4;4,14-21):
Ilustre Teófilo: Puesto que muchos han emprendido la tarea de componer un
relato de los hechos que se han cumplido entre nosotros, como nos los transmitieron
los que fueron desde el principio testigos oculares y servidores de la palabra,
también yo he resuelto escribírtelos por su orden, después de investigarlo todo
diligentemente desde el principio, para que conozcas la solidez de las
enseñanzas que has recibido.
En aquel tiempo, Jesús volvió a Galilea con la fuerza del Espíritu; y su fama
se extendió por toda la comarca. Enseñaba en las sinagogas, y todos lo
alababan.
Fue a Nazaret, donde se había criado, entró en la sinagoga, como era su
costumbre los sábados, y se puso en pie para hacer la lectura. Le entregaron el
rollo del profeta Isaías y, desenrollándolo, encontró el pasaje donde estaba
escrito:
«El Espíritu del Señor está sobre mí, porque él me ha ungido.
Me ha enviado a evangelizar a los pobres,
a proclamar a los cautivos la libertad, y a los ciegos, la vista;
a poner en libertad a los oprimidos; a proclamar el año de gracia del Señor».
Y, enrollando el rollo y devolviéndolo al que lo ayudaba, se sentó. Toda la
sinagoga tenía los ojos clavados en él.
Y él comenzó a decirles: «Hoy se ha cumplido esta Escritura que acabáis de
oír».
GUÍA: EL
Espíritu de Dios está sobre mí. Me ha ungido para un año de gracia. Jesús lo
vive cumplido en él. ¡Qué belleza! Admiramos su realidad, su año de gracia y
liberación de los oprimidos. Ungido para toda la humanidad y hoy para nosotros.
Salvados por su misericordia. También somos enviados a nuestro mundo y
colaboramos en la construcción de una vida humana y más feliz. SILENCIO DE ADMIRACIÓN, AGRADECIMIENTO,
COMPROMISO
RECOGEMOS
LO QUE NOS IMPRESIONA MÁS: UNA FRASE NOS LO RECUERDA.
NOS
SENTIMOS HIJOS DEL PADRE, AMADOS, ELEVADOS A SU PROVIDENCIA.
INVOCAMOS
A MARÍA DEFENSORA DE LA IGLESIA Y DE CADA UNO DE NOSOTROS.
NOS
DIRIGIMOS AL PADRE CON JESÚS: PADRE NUESTRO…
CANTAMOS
Evangelio es decir amigo, es decir hermano.
Evangelio es darte mi tiempo, es darte mi mano.
Evangelio es mirarte a los ojos, es reír contigo,
es compartir tu pena, es llevarte
a Cristo (bis)
Evangelio es llevar la paz siempre contigo.
Evangelio es amar de balde, hasta caer rendido.
Evangelio es decir "te
amo" a tu enemigo,
abandonar tu vida en manos de
Cristo (bis)
Evangelio es vivir como un pobre que todo lo espera.
Evangelio es mirar al cielo con ojos de niño.
Evangelio es dar gracias al Padre al nacer el día
y continuar cantando al hacer camino (bis)
Evangelio es sembrar libertad, es vivir unidos.
Es llevar esperanza a un mundo
que llora perdido.
Evangelio es romper cadenas, es
abrir sepulcros,
no le busques muerto que está entre los vivos (bis)