REZA Y COMPARTE
PAPA FRANCISCO: MISIONES 3, 19
MENSAJE DEL SANTO PADRE FRANCISCO
PARA LA JORNADA MUNDIAL DE LAS MISIONES 2019
Bautizados y enviados: la Iglesia de Cristo en
misión en el mundo
Fragmento 3
…
Te presentamos este fragmento para completar
el mensaje del Papa. Así puedes ver sus preocupaciones por todos los pueblos,
por el ser humano y por la Iglesia. Estamos llamados a construir un mundo más
humanos y más justo. Cada uno aportamos nuestra parte, confiando en Jesús y en
María nuestra Madre.
La coincidencia providencial con la celebración del Sínodo especial de los obispos para la región Panamazónica me
lleva a destacar que la misión confiada por Jesús, con el don de su cerrada en
sí misma y ningún pueblo se quede aislado, sino que se abran a la comunión
universal de la fe. Que nadie se quede encerrado en el propio yo, en la espíritu,
sigue siendo actual y necesaria también para los habitantes de esas tierras. Un
Pentecostés renovado abre las puertas de la Iglesia para que ninguna cultura
permanezca autorreferencialidad de la propia pertenencia étnica y religiosa. La pascua de Jesús rompe los
estrechos límites de mundos, religiones y culturas, llamándolos a crecer en el
respeto por la dignidad del hombre y de la mujer, hacia una conversión
cada vez más plena a la verdad del Señor resucitado que nos da a todos la vida
verdadera.
A este respecto, me vienen a la
mente las palabras del papa Benedicto XVI al comienzo del encuentro de
obispos latinoamericanos en Aparecida, Brasil, en el año 2007, palabras que
deseo aquí recordar y hacer mías: «¿Qué ha significado la aceptación de la fe cristiana para los pueblos
de América Latina y del Caribe? Para ellos ha significado conocer y
acoger a Cristo, el Dios desconocido que sus antepasados, sin saberlo, buscaban
en sus ricas tradiciones religiosas. Cristo era el Salvador que anhelaban silenciosamente. Ha significado
también haber recibido, con las aguas del bautismo, la vida divina que los hizo
hijos de Dios por adopción; haber recibido, además, el Espíritu Santo
que ha venido a fecundar sus culturas, purificándolas y desarrollando los
numerosos gérmenes y semillas que el Verbo encarnado había puesto en ellas,
orientándolas así por los caminos del Evangelio. [...]
El Verbo de Dios,
haciéndose carne en Jesucristo, se hizo también historia y cultura. La utopía
de volver a dar vida a las religiones precolombinas, separándolas de Cristo y de la Iglesia universal,
no sería un progreso, sino un retroceso. En realidad sería una
involución hacia un momento histórico anclado en el pasado» (Discurso en la Sesión inaugural, 13 mayo 2007).
Confiemos a María, nuestra Madre, la misión de la Iglesia. La
Virgen, unida a su Hijo desde la encarnación, se puso en movimiento, participó
totalmente en la misión de Jesús, misión que a los pies de la cruz se convirtió
también en su propia misión: colaborar
como Madre de la Iglesia que en el Espíritu y en la fe engendra nuevos hijos e
hijas de Dios.
Quisiera concluir con unas
breves palabras sobre las Obras Misionales Pontificias, ya propuestas como
instrumento misionero en la Maximum illud. Las OMP manifiestan
su servicio a la universalidad eclesial en la forma de una red global que apoya al Papa en su
compromiso misionero mediante la oración, alma de la misión, y la caridad de
los cristianos dispersos por el mundo entero. Sus donativos ayudan al
Papa en la evangelización de las Iglesias particulares (Obra de la Propagación
de la Fe), en la formación del clero local (Obra de San Pedro Apóstol), en la
educación de una conciencia misionera de los niños de todo el mundo (Obra de la
Infancia Misionera) y en la formación misionera de la fe de los cristianos
(Pontificia Unión Misional). Renovando mi apoyo a dichas obras, deseo que el
Mes Misionero Extraordinario de Octubre 2019 contribuya a la renovación de su
servicio a mi ministerio misionero.
A los misioneros, a las misioneras y a todos los que en virtud del
propio bautismo participan de algún modo en la misión de la Iglesia, les envío
de corazón mi bendición.
Nos unimos al Papa para hacer vivo el
mensaje de Jesús, en nosotros y allí donde podemos testimoniar y apoyar su
realización .
No faltes a la cita.