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viernes, 9 de febrero de 2024

¡IMPURO, IMPURO!

 

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¡IMPURO, IMPURO!



GUÍA DE ORACIÓN  11 de febrero de 2024, Domingo 6º del Tiempo Ordinario - Ciclo B

 

GUÍA:  Entramos a la presencia de Dios. Nos acercamos a  ti, Padre. Somos tus hijos y objeto de tu misericordia. No necesitas que llevemos el cartel de impuros. Tu poder nos desarma de todo mal y de todo pecado. Acogemos tu perdón y nos sentimos perdonados. SILENCIO DE RECONOCIMIENTOJ, DE PERDÓN, DE DISPONIBILIDAD.

 

Lectura del libro del Levítico (13,1-2.44-46):

El Señor dijo a Moisés y a Aarón: «Cuando alguno tenga una inflamación, una erupción o una mancha en la piel, y se le produzca la lepra, será llevado ante Aarón, el sacerdote, o cualquiera de sus hijos sacerdotes. Se trata de un hombre con lepra: es impuro. El sacerdote lo declarará impuro de lepra en la cabeza. El que haya sido declarado enfermo de lepra andará harapiento y despeinado, con la barba tapada y gritando: "¡Impuro, impuro!" Mientras le dure la afección, seguirá impuro; vivirá solo y tendrá su morada fuera del campamento.»

 

GUÍA: La protección ante la lepra, lleva a separar a los afectados por ella. La señal de impuro se hacia ver para prevenir, ante el peligro de ser contagiado. Entonces  se alejaban de la ciudad. Padre, estamos manchados con el mal. Limpia nuestro ser  y haz que vivamos purificados. SILENCIO DE PETICIÓN, DE APERTURA, DE CONVERSIÓN.

Salmo

Sal 31,1-2.5.11

R/.
 Tú eres mi refugio, me rodeas de cantos de liberación

Dichoso el que está absuelto de su culpa,
a quien le han sepultado su pecado;
dichoso el hombre a quien el Señor
no le apunta el delito. R/.

Había pecado, lo reconocí,
no te encubrí mi delito;
propuse: «Confesaré al Señor mi culpa»
y tú perdonaste mi culpa y mi pecado. R/.

Alegraos, justos, y gozad con el Señor;
aclamadlo, los de corazón sincero. R/.

 

Lectura de la primera carta del apóstol san Pablo a los Corintios (10,31–11,1):

Cuando comáis o bebáis o hagáis cualquier otra cosa, hacedlo todo para gloria de Dios. No deis motivo de escándalo a los judíos, ni a los griegos, ni a la Iglesia de Dios, como yo, por mi parte, procuro contentar en todo a todos, no buscando mi propio bien, sino el de la mayoría, para que se salven. Seguid mi ejemplo, como yo sigo el de Cristo.

GUÍA: Hacedlo todo para gloria de Dios, dice Pablo. No deis motivo de escándalo a nadie. Visualizamos nuestra situación ante el Señor. Reconocemos nuestros momento difíciles y pedimos fortaleza en la fe para seguir en el camino de Cristo, Jesús. Buscar el bien de todos es el medio para ganarlos a todos. SILENCIO DE GRACIA, DE CONCILIACIÓN, DE APOYO.

 

Lectura del santo evangelio según san Marcos (1,40-45):

En aquel tiempo, se acercó a Jesús un leproso, suplicándole de rodillas: «Si quieres, puedes limpiarme.»
Sintiendo lástima, extendió la mano y lo tocó, diciendo: «Quiero: queda limpio.»
La lepra se le quitó inmediatamente, y quedó limpio.
Él lo despidió, encargándole severamente: «No se lo digas a nadie; pero, para que conste, ve a presentarte al sacerdote y ofrece por tu purificación lo que mandó Moisés.»
Pero, cuando se fue, empezó a divulgar el hecho con grandes ponderaciones, de modo que Jesús ya no podía entrar abiertamente en ningún pueblo, se quedaba fuera, en descampado; y aun así acudían a él de todas partes.

GUÍA: Un leproso acude a Jesús. Si quieres puedes curarme, le dice. Y Jesús conmovido, extiende su mano y le toca: Queda limpio. Agradecemos con aquel hombre la curación de nuestras heridas. Limpia, Señor, nuestra enfermedad, sánanos, crea en nosotros un corazón generoso y esperanzado. SILENCIO DE CONFIANZA, DE ÁNIMO, DE ALABANZA.

 

SILENCIO  DE ADMIRACIÓN, ILUMINACIÓN, AMOR RENOVADO.

 

RECOGEMOS LA ORACIÓN: UNA FRASE NOS AYUDA A RECORDAR.

 

ADORACIÓN, CONFIANZA, ILUMINACIÓN, AGRADECIMIENTO.

 

INVOCAMOS A MARÍA, NUESTRA MADRE, MUJER DE ESPERANZA.

 

NOS DIRIGIMOS AL PADRE, CON JESÚS Y DECIMOS: PADRE NUESTRO.

 

CANTAMOS:

Juan A. Espinosa

Danos un corazón, grande para amar
Danos un corazón, fuerte para luchar
Hombres nuevos, creadores de la historia
Constructores de nueva humanidad

Hombres nuevos, que viven la existencia

Como riesgo de un largo caminar
Hombres nuevos, luchando en esperanza
Caminantes, sedientos de verdad

Hombres nuevos, sin frenos ni cadenas
Hombres libres que exigen libertad
Hombres nuevos, amando sin fronteras
Por encima de razas y lugar

Hombres nuevos, al lado de los pobres
Compartiendo con ellos techo y pan

 https://www.youtube.com/watch?v=Z5CB3gA2AZE

viernes, 2 de febrero de 2024

SURGIRÁ TU LUZ COMO LA AURORA

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SURGIRÁ TU LUZ COMO LA AURORA


GUÍA DE ORACIÓN 4-02-24   Domingo 5º del Tiempo Ordinario - Ciclo A


GUÍA: Estamos aquí, Padre. Tu Palabra nos habla y nos muestra el camino. Te reconocemos como Padre y nos sentimos hijos. Queremos ser fieles y hacer que tu misericordia sea efectiva en nuestra vida. Tu palabra nos conduce y lleva a cumplir tu voluntad. SLENCIO DE RECONOCIMENTO, DE ESCUCHA, DE CERCANÍA.

Lectura del libro de Isaías (58,7-10):


ESTO dice el Señor:

«Parte tu pan con el hambriento,

hospeda a los pobres sin techo,

cubre a quien ves desnudo

y no te desentiendas de los tuyos.

Entonces surgirá tu luz como la aurora,

enseguida se curarán tus heridas,

ante ti marchará la justicia,

detrás de ti la gloria del Señor.

Entonces clamarás al Señor y te responderá;

pedirás ayuda y te dirá: “Aquí estoy”.

Cuando alejes de ti la opresión,

el dedo acusador y la calumnia,

cuando ofrezcas al hambriento de lo tuyo

y sacies al alma afligida,

brillará tu luz en las tinieblas,

tu oscuridad como el mediodía».


GUÍA: Surgirá tu luz como la aurora. Esa luz nace del corazón fiel que cumple tus mandatos. Parte tu pan con el hambriento. Surgirá tu luz como en mediodía. Ponemos nuestros pensamientos y decisiones en tus manos. Purifica nuestro actuar y transforma el corazón y la voluntad. SILENCIO DE CONVERSIÓN, DE CAMBIO, DE NUEVO ANDAR.


Sal 111,4-5.6-7.8a.9


R/. El justo brilla en las tinieblas como una luz

V/. En las tinieblas brilla como una luz

el que es justo, clemente y compasivo.

Dichoso el que se apiada y presta,

y administra rectamente sus asuntos. R/.


V/. Porque jamás vacilará.

El recuerdo del justo será perpetuo.

No temerá las malas noticias,

su corazón está firme en el Señor. R/.


V/. Su corazón está seguro, sin temor.

Reparte limosna a los pobres;

su caridad dura por siempre

y alzará la frente con dignidad. R/.


Lectura de la primera carta del apóstol san Pablo a los Corintios (2,1-5):


YO mismo, hermanos, cuando vine a vosotros a anunciaros el misterio de Dios, no lo hice con sublime elocuencia o sabiduría, pues nunca entre vosotros me precié de saber cosa alguna, sino a Jesucristo, y este crucificado.

También yo me presenté a vosotros débil y temblando de miedo; mi palabra y mi predicación no fue con persuasiva sabiduría humana, sino en la manifestación y el poder del Espíritu, para que vuestra fe no se apoye en la sabiduría de los hombres, sino en el poder de Dios.


GUÁ: Vine a vosotros no con gran elocuencia sino con el poder y sabiduría del Señor. Recibimos esa Palabra con humildad y sencillez. Sabemos que el Padre se manifiesta en su Hijo Jesucristo. Él es quien llama y conduce la vida. Acoge, Padre, nuestro ser y obrar. Haz que obremos con corazón sincero y filial. SILENCIO DE ENCUENTRO, DE DESCUBRIMIENTO, DE CONFIANZA.


Lectura del santo evangelio según san Mateo (5,13-16):


EN aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos:

«Vosotros sois la sal de la tierra. Pero si la sal se vuelve sosa, ¿con qué la salarán?

No sirve más que para tirarla fuera y que la pise la gente.

Vosotros sois la luz del mundo. No se puede ocultar una ciudad puesta en lo alto de un monte.

Tampoco se enciende una lámpara para meterla debajo del celemín, sino para ponerla en el candelero y que alumbre a todos los de casa.

Brille así vuestra luz ante los hombres, para que vean vuestras buenas obras y den gloria a vuestro Padre que está en los cielos».

GUÍA: Oímos tu voz que indica y propone. Sois la luz del mundo, sois la sal de la tierra. Queremos asumirlo, alcanzarlo. Enséñanos, Jesús, a ser luz y sal. Que nuestra vida no sea inútil. Tu presencia es la que da sabor y da luz. ¿Cómo puede haber luz sin ti? Ayúdanos a vivir en tus caminos y en tu compañía. SILENCIO DE PRESENCIA, DE APERTURA, DE BONDAD.


RECOGEMOS LA SÍNTESIS DE NUESTRA ORACIÓN: UNA FRASE PARA RECORDAR.

PRESENCIA, FE, AGRADECIMIENTO, RESPUESTA.

INVOCAMOS A MARÍA, NUESTRA MADRE, PARA QUE NOS ACOMPAÑE EN EL CAMINO.

CON JESÚS NOS DIRIGIMOS AL PADRE: PADRE NUESTRO…


CANTAMOS. 

ENVÍAME Luz para mis sombras, eso pido yo. Enciende mi mirada con la luz de tu amor. Gentes que iluminen, eso pides Tú, que alumbren esta tierra. Que prendan con tu luz.

 Aquí estoy, Señor envíame. Aquí estoy, Señor, aquí estoy. Sal para mi vida, eso pido yo, que la monotonía no da ningún sabor. Gentes como sal, eso pides Tú, que salen esta tierra, que sean sal y luz. 

Paz para mis guerras eso pido yo, que el odio no me venza ni me ciegue el rencor. Paz para la tierra, eso pides Tú. Que se abran las fronteras que separan norte y sur.

https://www.youtube.com/watch?v=IbL7gIwxoaA

  

viernes, 26 de enero de 2024

UN PROFETA


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UN PROFETA

 

GUÍA DE ORACIÓN 28 -01-24  Domingo 4º del Tiempo Ordinario - Ciclo B

 

GUÍA: Dios quiere escoger un profeta nuevo que guíe al pueblo. Abrimos la mente y el corazón para recibir su Palabra. Tomamos conciencia de la presencia de Dios. En silencio le reconocemos  Señor de la vida y de la historia. Nos disponemos a recibir su Espíritu Santo que ilumina y da su gracia.  SILENCIO DE TOMA DE CONCIENCIA, DE ACOGIDA, DE CLARIFICACIÓN.

 

Lectura del Deuteronomio (18,15-20):

Moisés habló al pueblo, diciendo: «Un profeta, de entre los tuyos, de entre tus hermanos, como yo, te suscitará el Señor, tu Dios. A él lo escucharéis. Es lo que pediste al Señor, tu Dios, en el Horeb, el día de la asamblea: "No quiero volver a escuchar la voz del Señor, mi Dios, ni quiero ver más ese terrible incendio; no quiero morir." El Señor me respondió: "Tienen razón; suscitaré un profeta de entre sus hermanos, como tú. Pondré mis palabras en su boca, y les dirá lo que yo le mande. A quien no escuche las palabras que pronuncie en mi nombre, yo le pediré cuentas. Y el profeta que tenga la arrogancia de decir en mi nombre lo que yo no le haya mandado, o hable en nombre de dioses extranjeros, ese profeta morirá”.»

 

GUÍA: El Señor ofrece un profeta salido del pueblo. Profetizará en nombre del Señor. Será escuchado por el pueblo. Moisés lo comunica. Hoy la Palabra habla para todos y somos invitados a actuarla en nuestro mundo. Reflexionamos cómo es nuestra fe y dedicación a esa palabra. DE ADMIRACIÓN, DE FE, DE CUMPLIMIENTO.


Salmo

Sal 94,1.2.6-7.8-9

R/.
 Ojalá escuchéis hoy la voz del Señor:
«No endurezcáis vuestro corazón»


Venid, aclamemos al Señor,
demos vítores a la Roca que nos salva;
entremos a su presencia dándole gracias,
aclamándolo con cantos. R/.

Entrad, postrémonos por tierra,
bendiciendo al Señor, creador nuestro.
Porque él es nuestro Dios, y nosotros su pueblo,
el rebaño que él guía. R/.

Ojalá escuchéis hoy su voz:
«No endurezcáis el corazón como en Meribá,
como el día de Masá en el desierto;
cuando vuestros padres me pusieron a prueba
y me tentaron, aunque habían visto mis obras.» R/.

 

Lectura de la primera carta de san Pablo a los Corintios (7,32-35):

Quiero que os ahorréis preocupaciones: el soltero se preocupa de los asuntos del Señor, buscando contentar al Señor; en cambio, el casado se preocupa de los asuntos del mundo, buscando contentar a su mujer, y anda dividido. Lo mismo, la mujer sin marido y la soltera se preocupan de los asuntos del Señor, consagrándose a ellos en cuerpo y alma; en cambio, la casada se preocupa de los asuntos del mundo, buscando contentar a su marido. Os digo todo esto para vuestro bien, no para poneros una trampa, sino para induciros a una cosa noble y al trato con el Señor sin preocupaciones.

 

GUÍA: San Pablo recomienda la libertad de espíritu para vivir la fe, y dedicarse a Dios.  Las preocupaciones pueden entorpecer el trato y la dedicación a la Palabra. Dios llama según su voluntad.  Cada persona ha de discernir lo que es su camino. SILENCIO DE BÚSQUEDA, DE CONOCIMIENTO PERSONAL, CONOCIMIENTO DE DIOS.


Lectura del santo evangelio según san Marcos (1,21-28):

En aquel tiempo, Jesús y sus discípulos entraron en Cafarnaún, y cuando el sábado siguiente fue a la sinagoga a enseñar, se quedaron asombrados de su doctrina, porque no enseñaba como los escribas, sino con autoridad.
Estaba precisamente en la sinagoga un hombre que tenía un espíritu inmundo, y se puso a gritar: «¿Qué quieres de nosotros, Jesús Nazareno? ¿Has venido a acabar con nosotros? Sé quién eres: el Santo de Dios.»
Jesús lo increpó: «Cállate y sal de él.»
El espíritu inmundo lo retorció y, dando un grito muy fuerte, salió. Todos se preguntaron estupefactos: «¿Qué es esto? Este enseñar con autoridad es nuevo. Hasta a los espíritus inmundos les manda y le obedecen.»
Su fama se extendió en seguida por todas partes, alcanzando la comarca entera de Galilea.

 

RECOGEMOS NUESTRA ORACIÓN: Una frase nos ayuda a recordarla.

INVOCAMOS A MARÍA, MADRE Y AMIGA, QUE NOS AYUDE. 

NOS DIRIGIMOS AL PADRE COMO JESÚS: PADRE NUESTRO…

CANTAMOS

 Somos un pueblo que camina

 

Somos un pueblo que camina

y juntos caminando

podremos alcanzar

otra ciudad que no se acaba

sin penas ni tristezas

ciudad de eternidad.

 

Somos un pueblo que camina

que marcha por el mundo

buscando otra ciudad.

Somos errantes peregrinos

en busca de un destino

destino de unidad.

Siempre seremos caminantes

pues sólo caminando

podremos alcanzar

otra ciudad que no se acaba

sin penas ni tristezas

ciudad de eternidad.

 

Danos valor para la lucha

valor en las tristezas

valor en nuestro afán.

Danos la luz de tu Palabra

que guíe nuestros pasos

en este caminar.

Marcha Señor junto a nosotros

pues sólo en tu presencia

podremos alcanzar

otra ciudad que no se acaba

sin penas ni tristezas

ciudad de eternidad.

 

Dura se hace nuestra marcha

andando entre las sombras

y en tanta oscuridad.

Todos los cuerpos desatados

ya sienten el cansancio

de tanto caminar.

Pero tenemos la esperanza

de que nuestras fatigas

al fin alcanzarán

otra ciudad que no se acaba

sin penas ni tristezas

ciudad de eternidad.

https://www.youtube.com/watch?v=QBc-flg_Eso

viernes, 12 de enero de 2024

TU SIERVO ESCUCHA

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TU SIERVO ESCUCHA

GUÍA DE ORACIÓN 14-04-24  Domingo 2º del Tiempo Ordinario - Ciclo B

 

GUÍA: Oración que es escucha de Samuel en el templo. Oración en el propio cuerpo, templo  del Espíritu Santo. Escucha de los primeros discípulos llamados por Jesús. Abre, Señor, nuestros oídos para conocer tu voz, para seguirla y anunciarla. Visualizamos nuestro momento de oración y de escucha. SILENCIO DE ESCUCHA, DE ADMIRACIÓN, DE ACOGIDA.

 

Lectura del primer libro de Samuel (3,3b-10. 19):

En aquellos días, Samuel estaba acostado en el templo del Señor, donde estaba el arca de Dios. El Señor llamó a Samuel, y él respondió: «Aquí estoy.»
Fue corriendo a donde estaba Elí y le dijo: «Aquí estoy; vengo porque me has llamado.»
Respondió Elí: «No te he llamado; vuelve a acostarte.»
Samuel volvió a acostarse. Volvió a llamar el Señor a Samuel.
Él se levantó y fue a donde estaba Elí y le dijo: «Aquí estoy; vengo porque me has llamado.»
Respondió Elí: «No te he llamado, hijo mío; vuelve a acostarte.»
Aún no conocía Samuel al Señor, pues no le había sido revelada la palabra del Señor.
Por tercera vez llamó el Señor a Samuel, y él se fue a donde estaba Elí y le dijo: «Aquí estoy; vengo porque me has llamado.»
Elí comprendió que era el Señor quien llamaba al muchacho, y dijo a Samuel: «Anda, acuéstate; y si te llama alguien, responde: "Habla, Señor, que tu siervo te escucha."»
Samuel fue y se acostó en su sitio.
El Señor se presentó y le llamó como antes: «¡Samuel, Samuel!»
Él respondió: «Habla, que tu siervo te escucha.»
Samuel crecía, y el Señor estaba con él; ninguna de sus palabras dejó de cumplirse.

GUÍA: Visualizamos a Samuel, llamado por Dios. Nos visualizamos ante el Señor que llama a nuestro corazón, a nuestra vida. ¿Qué escuchamos? Prestamos atención a nuestro ser, al ser de otras personas, al mundo. Padre, Dios, condúcenos por tus sendas y que comprendamos tus acciones, tus llamadas. Que vayamos hacia ti. SILENCIO DE OBSERVACIÓN, DE COMPRENSIÓN, DE RESPUESTA.

Salmo

Sal 39,2.4ab.7.8-9.10

R/.
 Aquí estoy, Señor, para hacer tu voluntad

Yo esperaba con ansia al Señor;
él se inclinó y escuchó mi grito;
me puso en la boca un cántico nuevo,
un himno a nuestro Dios. R/.

Tú no quieres sacrificios ni ofrendas,
y, en cambio, me abriste el oído;
no pides sacrificio expiatorio. R/.

Entonces yo digo: «Aquí estoy
–como está escrito en mi libro–
para hacer tu voluntad.»
Dios mío, lo quiero, y llevo tu ley en las entrañas. R/.

He proclamado tu salvación
ante la gran asamblea;
no he cerrado los labios;
Señor, tú lo sabes. R/.

 

Lectura de la primera carta del apóstol san Pablo a los Corintios (6,13c-15a.17-20):

El cuerpo no es para la fornicación, sino para el Señor; y el Señor, para el cuerpo. Dios, con su poder, resucitó al Señor y nos resucitará también a nosotros. ¿No sabéis que vuestros cuerpos son miembros de Cristo? El que se une al Señor es un espíritu con él. Huid de la fornicación. Cualquier pecado que cometa el hombre queda fuera de su cuerpo. Pero el que fornica peca en su propio cuerpo. ¿O es que no sabéis que vuestro cuerpo es templo del Espíritu Santo? Él habita en vosotros porque lo habéis recibido de Dios. No os poseéis en propiedad, porque os han comprado pagando un precio por vosotros. Por tanto, ¡glorificad a Dios con vuestro cuerpo!

 

GUÍA: Sois propiedad del Señor. Sois templo del Espíritu Santo. Glorificadle con vuestro cuerpo. Admiramos la realidad de estas palabras. Sentimos su significado hecho realidad en cada persona. Avivamos la fe en el corazón y nos sentimos habitados por el Espíritu. SILENCIO DE CONTEMPLACIÓN, DE ADORACIÓN, DE PAZ.

 

Lectura del santo evangelio según san Juan (1,35-42):

En aquel tiempo, estaba Juan con dos de sus discípulos y, fijándose en Jesús que pasaba, dice: «Éste es el Cordero de Dios.»
Los dos discípulos oyeron sus palabras y siguieron a Jesús.
Jesús se volvió y, al ver que lo seguían, les pregunta: «¿Qué buscáis?»
Ellos le contestaron: «Rabí (que significa Maestro), ¿dónde vives?»
Él les dijo: «Venid y lo veréis.»
Entonces fueron, vieron dónde vivía y se quedaron con él aquel día; serían las cuatro de la tarde. Andrés, hermano de Simón Pedro, era uno de los dos que oyeron a Juan y siguieron a Jesús; encuentra primero a su hermano Simón y le dice: «Hemos encontrado al Mesías (que significa Cristo).»
Y lo llevó a Jesús.
Jesús se le quedó mirando y le dijo: «Tú eres Simón, el hijo de Juan; tú te llamarás Cefas (que se traduce Pedro).»

 

RECOGEMOS NUESTRA ORACIÓN, LOS SENTIMIENTOS Y LOS DESEOS.

INVOCAMOS A MARÍA PARA QUE NOS MUESTRE A JESÚS SU HIJO.

NOS DIRIGIMOS AL PADRE CON LA ORACIÓN DE JESÚS: PADRE NUESTRO.

 

CANTAMOS:

 

Hoy quiero cantarte, Señora de los ángeles
Reina soberana, Madre celestial
Yo soy una alondra que ha puesto en ti su nido
Viendo tu hermosura te reza su cantar

Luz de la mañana, María, templo y cuna

Mar de toda gracia, fuego, nieve y flor
Puerta siempre abierta, rosa sin espinas
Yo te doy mi vida, soy tu trovador

Salve, surco abierto donde Dios se siembra
Te eligió por madre Cristo el Redentor
Salve, esclava y reina, Virgen nazarena
Casa, pan y abrazo para el pecador

Luz de la mañana, María, templo y cuna
Mar de toda gracia, fuego, nieve y flor
Puerta siempre abierta, rosa sin espinas
Yo te doy mi vida, soy tu trovador

Luz de la mañana, María, templo y cuna
Mar de toda gracia, fuego, nieve y flor
Puerta siempre abierta, rosa sin espinas
Yo te doy mi vida, soy tu trovador

Fuente: Musixmatch

Autores de la canción: Cesáreo Gabarain Azurmendi

https://www.youtube.com/watch?v=HdV9LsGeYRU

 

viernes, 29 de diciembre de 2023

SAGRADA FAMILIA

 

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SAGRADA FAMILIA

 

GUÍA DE ORACIÓN Domingo 31 de Diciembre. Octava de Navidad. SAGRADA FAMILIA


GUÍA: Celebramos la octava de Navidad y la fiesta de la Sagrada Familia. Es modelo para las familias cristianas y recibimos sus enseñanzas. En el Génesis, Abram recibe la promesa de Dios. Tendrá una descendencia como el número de las estrellas. La carta a los Hebreos nos explica el cumplimiento de la promesa. En el evangelio se le anuncia a María que será madre del salvador. Acogemos la Palabra y confiamos como Abram y María. SILENCIO DE PRESENCIA, DE FE, DE CONFIANZA.

 

Lectura del libro del Génesis  Gn 15, 1-6; 21, 1-3

En aquel tiempo, el Señor se le apareció a Abram y le dijo: “No temas, Abram. Yo soy tu protector y tu recompensa será muy grande”. Abram le respondió: “Señor, Señor mío, ¿qué me vas a poder dar, puesto que voy a morir sin hijos? Ya que no me has dado descendientes, un criado de mi casa será mi heredero”.

Pero el Señor le dijo: “Ése no será tu heredero, sino uno que saldrá de tus entrañas”. Y haciéndolo salir de la casa, le dijo: “Mira el cielo y cuenta las estrellas, si puedes”. Luego añadió: “Así será tu descendencia”. Abram creyó lo que el Señor le decía y, por esa fe, el Señor lo tuvo por justo.

Poco tiempo después, el Señor tuvo compasión de Sara, como lo había dicho y le cumplió lo que le había prometido. Ella concibió y le dio a Abraham un hijo en su vejez, en el tiempo que Dios había predicho. Abraham le puso por nombre Isaac al hijo que le había nacido de Sara.

GUÍA:  Así será tu descendencia. Como el número de las estrellas. Abram lo cree y se fía. Vivir de fe nos ayuda a  hacer realidad, las promesas de Dios.  Todos podemos confiar y recibir las promesas. Lo interiorizamos en nosotros y nos fiamos de Dios. SILENCIO DE RECONOCIMIENTO, DE ESCUCHA, DE ACEPTACIÓN.

 

Hb 11, 8. 11-12. 17-19

Hermanos: Por su fe, Abraham, obediente al llamado de Dios, y sin saber a dónde iba, partió hacia la tierra que habría de recibir como herencia.

Por su fe, Sara, aun siendo estéril y a pesar de su avanzada edad, pudo concebir un hijo, porque creyó que Dios habría de ser fiel a la promesa; y así, de un solo hombre, ya anciano, nació una descendencia, numerosa como las estrellas del cielo e incontable como las arenas del mar.

Por su fe, Abraham, cuando Dios le puso una prueba, se dispuso a sacrificar a Isaac, su hijo único, garantía de la promesa, porque Dios le había dicho: De Isaac nacerá la descendencia que ha de llevar tu nombre. Abraham pensaba, en efecto, que Dios tiene poder hasta para resucitar a los muertos; por eso le fue devuelto Isaac, que se convirtió así en un símbolo profético.

 

GUÍA: La obediencia de Abraham nos señala el camino para el cumplimiento de la promesa. Sara concibe un hijo y Abraham, puesto a prueba responde al Señor con obediencia. Vamos en el camino de la obediencia, de la confianza y de la fe. SILENCIO DE VISUALIZACIÓN, DE OBEDIENCIA, DE CUMPLIMIENTO.
 

Lectura del santo evangelio según san Lucas

Lc 1, 26-38

En aquel tiempo, el ángel Gabriel fue enviado por Dios a una ciudad de Galilea, llamada Nazaret, a una virgen desposada con un varón de la estirpe de David, llamado José. La virgen se llamaba María.

Entró el ángel a donde ella estaba y le dijo: "Alégrate, llena de gracia, el Señor está contigo". Al oír estas palabras, ella se preocupó mucho y se preguntaba qué querría decir semejante saludo.

El ángel le dijo: "No temas, María, porque has hallado gracia ante Dios. Vas a concebir y a dar a luz un hijo y le pondrás por nombre Jesús. Él será grande y será llamado Hijo del Altísimo; el Señor Dios le dará el trono de David, su padre, y él reinará sobre la casa de Jacob por los siglos y su reinado no tendrá fin".

María le dijo entonces al ángel: "¿Cómo podrá ser esto, puesto que yo permanezco virgen?" El ángel le contestó: "El Espíritu Santo descenderá sobre ti y el poder del Altísimo te cubrirá con su sombra. Por eso, el Santo, que va a nacer de ti, será llamado Hijo de Dios. Ahí tienes a tu parienta Isabel, que a pesar de su vejez, ha concebido un hijo y ya va en el sexto mes la que llamaban estéril, porque no hay nada imposible para Dios". María contestó: "Yo soy la esclava del Señor; cúmplase en mí lo que me has dicho". Y el ángel se retiró de su presencia.

 

GUÍA: María, estamos contigo y vemos el momento de tu “sí”. Has hallado gracia ante Dios. Él hará que tu hijo sea Hijo del Altísimo.  Formas tu familia y ayudas a que todo vaya bien. Cuida a las familias del mundo y ayúdales en el amor, en el cuidado de los hijos. SILENCIO DE AGRADECIMIENTO, DE PETICIÓN, DE COMPROMISO.

 

RECOGEMOS NUESTRA ORACIÓN: Una frase nos ayuda a recordarla.

INVOCAMOS A MARÍA, MADRE Y AMIGA, QUE NOS AYUDE. 

NOS DIRIGIMOS AL PADRE COMO JESÚS: PADRE NUESTRO…


CANTAMOS

 

El Tamborilero

El camino que lleva a belén
Baja hasta el valle que la nieve cubrió
Los pastorcillos quieren ver a su rey,
Le traen regalos en su humilde zurrón
Al redentor, al redentor.
Ha nacido en un portal de belén el niño dios.

Yo quisiera poner a tus pies,

Algún presente que te agrade, señor.
Más, tú ya sabes que soy pobre también,
Y no poseo más que un viejo tambor,
Viejo tambor, viejo tambor.
En tu honor frente al portal tocaré,
Con mi tambor.

El camino que lleva a belén,
Yo voy marcando con mi viejo tambor.
Nada mejor hay que yo pueda ofrecer,
Su ronco acento es un canto de amor,
Al redentor, al redentor.
Cuando dios me vio tocando ante el,
Me sonrió.

https://www.youtube.com/watch?v=sIjRW60Fqyc 

viernes, 15 de diciembre de 2023

EL ESPÍRITU DEL SEÑOR ESTÁ SOBRE MI

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EL ESPÍRITU DEL SEÑOR ESTÁ SOBRE MI

GUÍA DE ORACIÓN 17-12-23   Domingo 3º de Adviento - Ciclo B

 

GUÍA: El Espíritu del Señor está sobre mi. Dios Padre, presente en el Hijo por medio del Espíritu. Extiende su gloria y llena la tierra. Nos unimos a los ángeles que anuncian y proclaman la grandeza de Dios. Reconocemos su presencia y nos alegramos en su gracia y poder sobre toda criatura. SILENCIO DE CONOCIMIENTO, DE PLENITUD, DE ESPERANZA.

 

Lectura del libro de Isaías (61,1-2a.10-11):

El Espíritu del Señor está sobre mí, porque el Señor me ha ungido. Me ha enviado para dar la buena noticia a los que sufren, para vendar los corazones desgarrados, para proclamar la amnistía a los cautivos, y a los prisioneros la libertad, para proclamar el año de gracia del Señor. Desbordo de gozo con el Señor, y me alegro con mi Dios: porque me ha vestido un traje de gala y me ha envuelto en un manto de triunfo, como novio que se pone la corona, o novia que se adorna con sus joyas. Como el suelo echa sus brotes, como un jardín hace brotar sus semillas, así el Señor hará brotar la justicia y los himnos ante todos los pueblos.

GUÍA: Está sobre mí. Me ha ungido para proclamar la amnistía a los cautivos, la buena nueva a los pobres. El Señor hace brotar sus semillas. Brotará la justicia ante todos los pueblos. En esta situación presenciamos los hechos y participamos de su gloria en toda la tierra. Agradecemos, nos unimos a él, ofrecemos nuestros dones. SILENCIO DE DESCUBRIMIENTO, DE AGRADECER, DE ANUNCIAR A OTROS.

Salmo

Lc 1,46-48.49-50.53-54

R/.
 Me alegro con mi Dios

Proclama mi alma la grandeza del Señor,
se alegra mi espíritu en Dios, mi salvador;
porque ha mirado la humillación de su esclava.
Desde ahora me felicitarán todas las generaciones. R/.

Porque el Poderoso ha hecho obras grandes por mí:
su nombre es santo,
y su misericordia llega a sus fieles
de generación en generación. R/.

A los hambrientos los colma de bienes
y a los ricos los despide vacíos.
Auxilia a Israel, su siervo,
acordándose de la misericordia. R/.

 

Lectura de la primera carta del apóstol san Pablo a los Tesalonicenses (5,16-24):

Estad siempre alegres. Sed constantes en orar. Dad gracias en toda ocasión: ésta es la voluntad de Dios en Cristo Jesús respecto de vosotros. No apaguéis el espíritu, no despreciéis el don de profecía; sino examinadlo todo, quedándoos con lo bueno. Guardaos de toda forma de maldad. Que el mismo Dios de la paz os consagre totalmente, y que todo vuestro espíritu, alma y cuerpo, sea custodiado sin reproche hasta la venida de nuestro Señor Jesucristo. El que os ha llamado es fiel y cumplirá sus promesas.

GUÍA:  Hemos leído la Palabra de Dios. Nos anuncia alegría. Estad siempre alegres. No apaguéis el Espíritu. Guardaos de toda maldad. En tu presencia reconocemos tu sabiduría y nuestra pequeñez. Todo se hace nuevo y se transforma con tu gracia. Cambia nuestro corazón y llénalo de ti. SILENCIO DE ACOGIDA, DE PERDÓN, DE APERTURA.

 


Lectura del santo evangelio según san Juan (1,6-8.19-28):


Surgió un hombre enviado por Dios, que se llamaba Juan: éste venía como testigo, para dar testimonio de la luz, para que por él todos vinieran a la fe. No era él la luz, sino testigo de la luz.
Y éste fue el testimonio de Juan, cuando los judíos enviaron desde Jerusalén sacerdotes y levitas a Juan, a que le preguntaran: «¿Tú quién eres?»
Él confesó sin reservas: «Yo no soy el Mesías.»
Le preguntaron: «¿Entonces, qué? ¿Eres tú Elías?»
El dijo: «No lo soy.»
«¿Eres tú el Profeta?»
Respondió: «No.»
Y le dijeron: «¿Quién eres? Para que podamos dar una respuesta a los que nos han enviado, ¿qué dices de ti mismo?»
Él contestó: «Yo soy la voz que grita en el desierto: "Allanad el camino del Señor", como dijo el profeta Isaías.»
Entre los enviados había fariseos y le preguntaron: «Entonces, ¿por qué bautizas, si tú no eres el Mesías, ni Elías, ni el Profeta?»
Juan les respondió: «Yo bautizo con agua; en medio de vosotros hay uno que no conocéis, el que viene detrás de mí, y al que no soy digno de desatar la correa de la sandalia.»
Esto pasaba en Betania, en la otra orilla del Jordán, donde estaba Juan bautizando.

 

GUÍA: Había un hombre llamado Juan. No es el Mesías pero lo precede. Bautiza con agua y perdona los pecados. También Jesús llega a él. Preparamos los caminos y abrimos el corazón para alcanzarlo y saborear su perdón. SILENCIO PARA ENCONTRARLE, PARA APOYARLE, PARA ANUNCIARLE. 

 

SILENCIO  DE ADMIRACIÓN, ILUMINACIÓN, AMOR RENOVADO.

 

RECOGEMOS LA ORACIÓN: UNA FRASE NOS AYUDA A RECORDAR.

 

ADORACIÓN, CONFIANZA, ILUMINACIÓN, AGRADECIMIENTO.

 

INVOCAMOS A MARÍA, NUESTRA MADRE, MUJER DE ESPERANZA.

 

NOS DIRIGIMOS AL PADRE, CON JESÚS Y DECIMOS: PADRE NUESTRO.

 

CANTAMOS:


ABRE TU TIENDA AL SEÑOR
RECÍBELE DENTRO, ESCUCHA SU VOZ.
ABRE TU TIENDA AL SEÑOR
PREPARA TU FUEGO QUE LLEGA EL AMOR.

1. El Adviento es esperanza
la esperanza, salvación
ya se acerca el Señor
preparemos los caminos
los caminos del amor
escuchemos su voz.

2. Que se rompan las cadenas
que se cante libertad
el Señor nos va a salvar
sanará nuestras heridas
nuestro miedo y soledad
Él será nuestra paz.

3. Por la ruta de los pobres
va María, va José
van camino de Belén
en sus ojos mil estrellas
en su seno Emmanuel
Él será nuestro Rey.

ttps://www.youtube.com/watch?v=mkFPBkWlnw8

viernes, 17 de noviembre de 2023

EL ÉXITO DE SU TRABAJO

 

REZA Y COMPARTE

EL ÉXITO DE SU TRABAJO


GUÍA DE ORACIÓN 19-11-23  Domingo 33º del Tiempo Ordinario - Ciclo A


 GUÍA:  El éxito de su trabajo se apoya en la virtud, en el bien. Alaba a la mujer hacendosa, trabajadora. Sostiene al necesitado, confía en Dios.  La figura de la mujer es exaltada. También hoy se hace la alabanza. Pedimos al Padre Dios  sostenga a cada persona en su trabajo, en  su esfuerzo y compromiso, en el bien y la verdad. SILENCIO DE OBSERVACIÓN, DE REFLEXIÓN, DE COMPROMISO. 

Lectura del libro de los Proverbios (31,10-13.19-20.30-31):


Una mujer hacendosa, ¿quién la hallará? Vale mucho más que las perlas. Su marido se fía de ella, y no le faltan riquezas. Le trae ganancias y no pérdidas todos los días de su vida. Adquiere lana y lino, los trabaja con la destreza de sus manos. Extiende la mano hacia el huso, y sostiene con la palma la rueca. Abre sus manos al necesitado y extiende el brazo al pobre. Engañosa es la gracia, fugaz la hermosura, la que teme al Señor merece alabanza. Cantadle por el éxito de su trabajo, que sus obras la alaben en la plaza.


GUÍA: El libro de los Proverbios presenta  un modelo de mujer. ¿Cuál es el que ponemos hoy? Abrimos la mente y el corazón a la verdad de Dios, a su amor, Cultivar los dones que se le han dado, ponerlos al servicio de su familia y de la humanidad. Confiar en Dios, transmitir la fe. Muchas tareas. SILENCIO DE ADMIRACIÓN, DE CONFIANZA, DE CAMINO.


Salmo  Sal 127,1-2.3.4-5


R/. Dichoso el que teme al Señor


Dichoso el que teme al Señor

y sigue sus caminos.

Comerás del fruto de tu trabajo,

serás dichoso, te irá bien. R/.

Tu mujer, como parra fecunda,

en medio de tu casa; tus hijos,

como renuevos de olivo,

alrededor de tu mesa. R/.


Ésta es la bendición del hombre que teme al Señor.

Que el Señor te bendiga desde Sión,

que veas la prosperidad de Jerusalén

todos los días de tu vida. R/.


Lectura de la primera carta del apóstol san Pablo a los Tesalonicenses (5,1-6):


En lo referente al tiempo y a las circunstancias no necesitáis, hermanos, que os escriba. Sabéis perfectamente que el día del Señor llegará como un ladrón en la noche. Cuando estén diciendo: «Paz y seguridad», entonces, de improviso, les sobrevendrá la ruina, como los dolores de parto a la que está encinta, y no podrán escapar. Pero vosotros, hermanos, no vivís en tinieblas, para que ese día no os sorprenda como un ladrón, porque todos sois hijos de la luz e hijos del día; no lo sois de la noche ni de las tinieblas, Así, pues, no durmamos como los demás, sino estemos vigilantes y despejados.


GUÍA: El día del señor llegará de improviso. Está anunciado y hay que estar preparados para recibirle.  Vivamos como en pleno día, como hijos de la luz para que nos encuentre atentos y vigilantes. El Espíritu de Dios nos dé esa luz , esa atención para vivir de acuerdo con sus mandatos. Que nos dé la fuerza y constancia para perseverar en el bien. SILENCIO DE VISUALIZACIÓN, DE BÚSQUEDA, DE ESPERA.

 Lectura del santo evangelio según san Mateo (25,14-30):


En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos esta parábola: «Un hombre, al irse de viaje, llamó a sus empleados y los dejó encargados de sus bienes: a uno le dejó cinco talentos de plata, a otro dos, a otro uno, a cada cual según su capacidad; luego se marchó. El que recibió cinco talentos fue en seguida a negociar con ellos y ganó otros cinco. El que recibió dos hizo lo mismo y ganó otros dos. En cambio, el que recibió uno hizo un hoyo en la tierra y escondió el dinero de su señor. Al cabo de mucho tiempo volvió el señor de aquellos empleados y se puso a ajustar las cuentas con ellos. Se acercó el que había recibido cinco talentos y le presentó otros cinco, diciendo: "Señor, cinco talentos me dejaste; mira, he ganado otros cinco." Su señor le dijo: "Muy bien. Eres un empleado fiel y cumplidor; como has sido fiel en lo poco, te daré un cargo importante; pasa al banquete de tu señor." Se acercó luego el que había recibido dos talentos y dijo: "Señor, dos talentos me dejaste; mira, he ganado otros dos." Su señor le dijo: "Muy bien. Eres un empleado fiel y cumplidor; como has sido fiel en lo poco, te daré un cargo importante; pasa al banquete de tu señor." Finalmente, se acercó el que había recibido un talento y dijo: "Señor, sabía que eres exigente, que siegas donde no siembras y recoges donde no esparces, tuve miedo y fui a esconder mi talento bajo tierra. Aquí tienes lo tuyo." El señor le respondió: "Eres un empleado negligente y holgazán. ¿Con que sabías que siego donde no siembro y recojo donde no esparzo? Pues debías haber puesto mi dinero en el banco, para que, al volver yo, pudiera recoger lo mío con los intereses. Quitadle el talento y dádselo al que tiene diez. Porque al que tiene se le dará y le sobrará, pero al que no tiene, se le quitará hasta lo que tiene. Y a ese empleado inútil echadle fuera, a las tinieblas; allí será el llanto y el rechinar de dientes."»


 GUÍA: La parábola de los talentos nos enseña la responsabilidad que hemos de demostrar, en llevar adelante los bienes que se nos han dado. Cada uno tiene sus talentos y se espera que los desarrollemos para nosotros y para la humanidad. Reconoce hoy tus dones. ¿Cuáles están creciendo, o puedes mejorar? Danos, Señor, la gracia de hacer el bien desde lo que somos. SILENCIO DE AGRADECIMIENTO, DE UNIÓN, DE COMMPROMISO.


     PONEMOS NUESTRA ORACIÓN EN TUS MANOS, PADRE, ACOGEMOS TU PALABRA, AYÚDANOS A RECIBIR TU PAZ.

    MARÍA CONTIGO NOS ACERCAMOS AL ALTAR, ENSÉÑANOS A ORAR.

    NOS DIRIGIMOS AL PADRE CON LA ORACIÓN DE JESÚS, Y UNIDOS A ÉL. 

 CANTAMOS:


Quién será la mujer que a tantos inspiró

poemas bellos de amor.

Le rinden honor la música, la luz,

el mármol, la palabra y el color.

Quién será la mujer que el rey y el labrador

llaman en su dolor;

el sabio, el ignorante, el pobre y el señor,

el santo al igual que el pecador.


/María es esa mujer

que desde siempre el Señor se preparó,para nacer como una flor

en el jardín que a Dios enamoró./ (bis)


Quién será la mujer radiante como el sol

vestida de resplandor, https://es.catholic.net/op/articulos/18183/quin-ser-la-mujer.html

viernes, 10 de noviembre de 2023

LA SABIDURÍA ES RADIANTE

 

REZA Y COMPARTE

LA SABIDURÍA ES RADIANTE

GUÍA DE ORACIÓN 12-11-23 Domingo 32º del Tiempo Ordinario - Ciclo A

 

GUÍA: El Libro de la Sabiduría nos presenta una personificación de la Sabiduría, su belleza, sus acciones, sus preferencias. Abrimos nuestra  mente a la belleza, a la visión de la bondad y de la virtud. Acogemos su atracción y presencia en nuestros caminos. SILENCIO DE INTERIORIZACIÓN, ADMIRACIÓN, RECONOCIMIENTO.

 

Lectura del libro de la Sabiduría (6,12-16):

La sabiduría es radiante e inmarcesible, la ven fácilmente los que la aman, y la encuentran los que la buscan; ella misma se da a conocer a los que la desean. Quien madruga por ella no se cansa: la encuentra sentada a la puerta. Meditar en ella es prudencia consumada, el que vela por ella pronto se ve libre de preocupaciones; ella misma va de un lado a otro buscando a los que la merecen; los aborda benigna por los caminos y les sale al paso en cada pensamiento.

GUÍA: Caminamos con la Sabiduría, la acompañamos en el día. Con su presencia quedamos en vela y experimentamos su prudencia. En ella nos liberamos de preocupaciones. Padre, Dios, muévenos hacia ti y conduce nuestros pasos  y nuestros pensamientos. SILENCIO DE CONOCIMIENTO, DE SABIDURÍA, DE ENCUENTRO.

Salmo

Sal 62,2.3-4.5-6.7-8
R/.
 Mi alma está sedienta de ti, Señor, Dios mío

Oh Dios, tú eres mi Dios, por ti madrugo,
mi alma está sedienta de ti;
mi carne tiene ansía de ti,
como tierra reseca, agostada, sin agua. R/.

¡Cómo te contemplaba en el santuario
viendo tu fuerza y tu gloria!
Tu gracia vale más que la vida,
te alabarán mis labios. R/.

Toda mi vida te bendeciré
y alzaré las manos invocándote.
Me saciaré como de enjundia y de manteca,
y mis labios te alabarán jubilosos. R/.

En el lecho me acuerdo de ti
y velando medito en ti,
porque fuiste mi auxilio,
y a la sombra de tus alas
canto con júbilo. R/.

 

Lectura de la primera carta del apóstol san Pablo a los Tesalonicenses (4,13-17):

No queremos que ignoréis la suerte de los difuntos para que no os aflijáis como los hombres sin esperanza. Pues si creemos que Jesús ha muerto y resucitado, del mismo modo, a los que han muerto, Dios, por medio de Jesús, los llevará con él. Esto es lo que os decimos como palabra del Señor: Nosotros, los que vivimos y quedamos para cuando venga el Señor, no aventajaremos a los difuntos. Pues él mismo, el Señor, cuando se dé la orden, a la voz del arcángel y al son de la trompeta divina, descenderá del cielo, y los muertos en Cristo resucitarán en primer lugar. Después nosotros, los que aún vivimos, seremos arrebatados con ellos en la nube, al encuentro del Señor, en el aire. Y así estaremos siempre con el Señor. Consolaos, pues, mutuamente con estas palabras.

 

GUÍA: Jesús, muerto y resucitado nos une con él en la muerte y en la resurrección. Los muertos en Cristo resucitarán en primer lugar. Nosotros estaremos siempre con él. Que el Espíritu Santo nos acerque a la resurrección y gocemos de su presencia. SILENCIO DE FE, DE ESPERANZA, DE AMOR.

Lectura del santo evangelio según san Mateo (25,1-13):

En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos esta parábola: «Se parecerá el reino de los cielos a diez doncellas que tomaron sus lámparas y salieron a esperar al esposo. Cinco de ellas eran necias y cinco eran sensatas. Las necias, al tomar las lámparas, se dejaron el aceite; en cambio, las sensatas se llevaron alcuzas de aceite con las lámparas. El esposo tardaba, les entró sueño a todas y se durmieron. A medianoche se oyó una voz: "¡Que llega el esposo, salid a recibirlo!" Entonces se despertaron todas aquellas doncellas y se pusieron a preparar sus lámparas. Y las necias dijeron a las sensatas: "Dadnos un poco de vuestro aceite, que se nos apagan las lámparas." Pero las sensatas contestaron: "Por si acaso no hay bastante para vosotras y nosotras, mejor es que vayáis a la tienda y os lo compréis." Mientras iban a comprarlo, llegó el esposo, y las que estaban preparadas entraron con él al banquete de bodas, y se cerró la puerta. Más tarde llegaron también las otras doncellas, diciendo: "Señor, señor, ábrenos." Pero él respondió: "Os lo aseguro: no os conozco." Por tanto, velad, porque no sabéis el día ni la hora.»

 

GUÍA: El Reino de los Cielos se parece a diez vírgenes que esperan al esposo. Las prudentes llevan el aceite para sus lámparas. Las necias dejan pasar el momento  y van sin suficiente aceite.  Presentarse sin aceite las pone en apuro. Van a comprarla y cuando vuelven se ha cerrado la puerta. Pedimos la prudencia y sabiduría para actuar bien y acertadamente.  SILENCIO DE PRUDENCIA, DE ACTUALIZACIÓN, DE COMPROMISO.

 

RECOGEMOS NUESTROS SENTIMIENTOS, NUESTRA ORACIÓN EN ESTE ESPACIO DE TIEMPO. PRESENTAMOS LA SABIDURÍA Y LAS OCASIONES PERDIDAS.

INVOCAMOS A MARÍA PARA QUE NOS ENSEÑE A ORAR Y A AVIVAR LA LLAMA DE NUESTRA LÁMPARA.

EL PADRE NOS ACOGE Y A ÉL NOS DIRIGIMOS CON LA ORACIÓN DE JESÚS: PADRE NUESTRO.

ESCUCHAMOS:

https://www.youtube.com/watch?v=aWqgzEHIBvs